España bate su récord de temperatura: 46,9 grados
La agencia del clima de la ONU apunta más alto, a 47,3 grados, pero la temperatura se tomó en una estación automática y la Aemet aún debe certificarlo
Victoria Torres Benayas
Madrid, El País
Nunca antes se había documentado en la historia de España una temperatura tan alta como la que se registró este jueves en el observatorio de Córdoba aeropuerto, durante el pico de la segunda ola de calor del año: 46,9 grados. El anterior récord absoluto de temperatura lo ostentaba la misma Córdoba, igualada con Sevilla, y era de 46,6 grados, tres décimas menos, que se alcanzaron ambos el 23 de julio de 1995.
La Agencia de Naciones Unidas para la Acción Climática apunta sin embargo más alto. En su cuenta de Twitter, ha informado de que en la localidad cordobesa de Montoro, a 41 kilómetros de la capital río Guadalquivir arriba, los termómetros escalaron este jueves a los 47,3 grados.
La portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Delia Gutiérrez, explica que la cifra de Córdoba está certificada, mientras que el de Montoro, no. “El dato de Córdoba es la máxima histórica registrada hasta ahora en observatorios nacionales principales, la red de mayor calidad y garantía de la Aemet. Sin embargo, el observatorio de Montoro está en la red automática y todavía hay que verificarlo”, aclara.
Gutiérrez aprovecha para restar fiabilidad a los pavorosos 50 grados marcados por termómetros que se encuentran en las calles o en las farmacias, cuyas imágenes han circulado por las redes y por Whatsapp. “Para que una medida de temperatura sea representativa y comparable internacionalmente se tiene que tomar en condiciones estándares y sin factores que puedan alterarla como que los aparatos estén cerca de un jardín o sobre el asfalto”, recuerda.
No solo Córdoba se batió ayer jueves a sí misma y al récord de España, sino que otras seis capitales de provincia pulverizaron sus máximos. Se trata de Badajoz aeropuerto, que se anotó 45,4 grados, cuando su anterior cota estaba en los 44,8 de 2003; Cáceres hizo 44,2 y el anterior máximo estaba en 42,6 en 2005; Ciudad Real, con 43,7, también supera sus 43,4; Granada base aérea, que se encuentra en Armilla, alcanzó los 43,5 cuando su máxima estaba en los 42,8 de 2003; Jaén marcó 44,4 frente a su máxima de 40,6; y Teruel, con 40,2, iguala el máximo de su serie histórica.
Estas cifras de verdadero infierno se producen en el marco de una ola de calor que la Aemet califica de “muy intensa” y “poco habitual”. De hecho, y a falta de un estudio pormenorizado una vez que concluya el episodio el próximo domingo, con 46,9 grados ya sería la peor ola de calor jamás vivida en cuanto a valores máximos. Según un informe de la Aemet sobre este fenómeno en España desde 1976 a junio de 2017, nunca antes se había llegado a los 47 grados durante uno de estos fenómenos —el anterior récord absoluto de temperaturas fue un pico aislado, no se produjo dentro de una ola—.
La cota más alta dentro de una ola se alcanzó en 2012, 45,9 grados en Sevilla aeropuerto. En cinco ocasiones más hasta ahora se superaron los 45, como los 45,2 en Córdoba aeropuerto y en Montoro del tórrido verano de 2015. Aunque muy fuerte, la actual ola no es ni de lejos la más larga ni la que mayor superficie afectó. El episodio que más tiempo duró fueron los 26 días de la ola de calor interminable del verano de 2015. Por su parte, la más extensa en cuanto a territorio fue la de agosto de 2012, que llegó a afectar a 40 provincias. En la actual ola, han estado bajo aviso rojo o riesgo extremo, el más alto en una escala de tres nieles, hasta siete provincias el mismo día. Aunque es muy raro que se superen tantos umbrales, no es excepcional. “La ocasión en la que más avisos rojos se han declarado fue el 10 de agosto de 2012, con 20 provincias en riesgo extremo”, recuerda Gutiérrez.
Ya sea finalmente la máxima 46,9 grados o 47,3, el hecho indiscutible es que jamás arreció tanto el calor en España desde que se documentan las temperaturas. La pasada primavera ya fue la más cálida de la historia del país, con una temperatura media de 15,4 grados, 1,7 grados por encima de la media, y este verano va por el mismo camino. Meteorología calcula que esta estación sume entre medio y un grado a la temperatura media. El comportamiento de este mes de junio, con una temprana ola de calor durante la que se alcanzaron 44,5 grados en Córdoba, sumado a la ola actual, lleva a concluir que posiblemente este estío acabe entre los más calurosos desde que hay registros, que fueron los de 2003 (con una temperatura media de 24,9 grados), 2015 (24,5) y 2016 (24,2), o que incluso los supere.
Victoria Torres Benayas
Madrid, El País
Nunca antes se había documentado en la historia de España una temperatura tan alta como la que se registró este jueves en el observatorio de Córdoba aeropuerto, durante el pico de la segunda ola de calor del año: 46,9 grados. El anterior récord absoluto de temperatura lo ostentaba la misma Córdoba, igualada con Sevilla, y era de 46,6 grados, tres décimas menos, que se alcanzaron ambos el 23 de julio de 1995.
La Agencia de Naciones Unidas para la Acción Climática apunta sin embargo más alto. En su cuenta de Twitter, ha informado de que en la localidad cordobesa de Montoro, a 41 kilómetros de la capital río Guadalquivir arriba, los termómetros escalaron este jueves a los 47,3 grados.
La portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Delia Gutiérrez, explica que la cifra de Córdoba está certificada, mientras que el de Montoro, no. “El dato de Córdoba es la máxima histórica registrada hasta ahora en observatorios nacionales principales, la red de mayor calidad y garantía de la Aemet. Sin embargo, el observatorio de Montoro está en la red automática y todavía hay que verificarlo”, aclara.
Gutiérrez aprovecha para restar fiabilidad a los pavorosos 50 grados marcados por termómetros que se encuentran en las calles o en las farmacias, cuyas imágenes han circulado por las redes y por Whatsapp. “Para que una medida de temperatura sea representativa y comparable internacionalmente se tiene que tomar en condiciones estándares y sin factores que puedan alterarla como que los aparatos estén cerca de un jardín o sobre el asfalto”, recuerda.
No solo Córdoba se batió ayer jueves a sí misma y al récord de España, sino que otras seis capitales de provincia pulverizaron sus máximos. Se trata de Badajoz aeropuerto, que se anotó 45,4 grados, cuando su anterior cota estaba en los 44,8 de 2003; Cáceres hizo 44,2 y el anterior máximo estaba en 42,6 en 2005; Ciudad Real, con 43,7, también supera sus 43,4; Granada base aérea, que se encuentra en Armilla, alcanzó los 43,5 cuando su máxima estaba en los 42,8 de 2003; Jaén marcó 44,4 frente a su máxima de 40,6; y Teruel, con 40,2, iguala el máximo de su serie histórica.
Estas cifras de verdadero infierno se producen en el marco de una ola de calor que la Aemet califica de “muy intensa” y “poco habitual”. De hecho, y a falta de un estudio pormenorizado una vez que concluya el episodio el próximo domingo, con 46,9 grados ya sería la peor ola de calor jamás vivida en cuanto a valores máximos. Según un informe de la Aemet sobre este fenómeno en España desde 1976 a junio de 2017, nunca antes se había llegado a los 47 grados durante uno de estos fenómenos —el anterior récord absoluto de temperaturas fue un pico aislado, no se produjo dentro de una ola—.
La cota más alta dentro de una ola se alcanzó en 2012, 45,9 grados en Sevilla aeropuerto. En cinco ocasiones más hasta ahora se superaron los 45, como los 45,2 en Córdoba aeropuerto y en Montoro del tórrido verano de 2015. Aunque muy fuerte, la actual ola no es ni de lejos la más larga ni la que mayor superficie afectó. El episodio que más tiempo duró fueron los 26 días de la ola de calor interminable del verano de 2015. Por su parte, la más extensa en cuanto a territorio fue la de agosto de 2012, que llegó a afectar a 40 provincias. En la actual ola, han estado bajo aviso rojo o riesgo extremo, el más alto en una escala de tres nieles, hasta siete provincias el mismo día. Aunque es muy raro que se superen tantos umbrales, no es excepcional. “La ocasión en la que más avisos rojos se han declarado fue el 10 de agosto de 2012, con 20 provincias en riesgo extremo”, recuerda Gutiérrez.
Ya sea finalmente la máxima 46,9 grados o 47,3, el hecho indiscutible es que jamás arreció tanto el calor en España desde que se documentan las temperaturas. La pasada primavera ya fue la más cálida de la historia del país, con una temperatura media de 15,4 grados, 1,7 grados por encima de la media, y este verano va por el mismo camino. Meteorología calcula que esta estación sume entre medio y un grado a la temperatura media. El comportamiento de este mes de junio, con una temprana ola de calor durante la que se alcanzaron 44,5 grados en Córdoba, sumado a la ola actual, lleva a concluir que posiblemente este estío acabe entre los más calurosos desde que hay registros, que fueron los de 2003 (con una temperatura media de 24,9 grados), 2015 (24,5) y 2016 (24,2), o que incluso los supere.