Desmembraron a una mujer colombiana y esparcieron sus partes en Nueva York
New York, AFP
El cadáver de una colombiana fue hallado el pasado miércoles en el río Hudson, en Nueva York. La mujer fue identificada como Jennifer Londoño, una colombiana de 31 años, oriunda de Pereira, quien residía con su novio en Nueva Jersey.
Londoño fue, como confirmaron las autoridades, desmembrada y decapitada. Sus retos fueron esparcidos por distintos lugares de la Gran Manzana: una de las piernas fue encontrada en el Upper West Side en Manhattan, mientras que su torso lo halló una pareja que caminaba sobre el Canal de Red Hook de la costa de Brooklyn.
La colombiana fue vista por última vez el 25 de junio en el bar Luna Loung, en Englewood, Nueva Jersey, el cual administraba.
El principal sospechoso del crimen es su novio, un hombre de 40 años. Durante un allanamiento al departamento que la pareja compartía, la policía encontró rastros de sangre en la bañera.
Ahora solo falta un prueba de ADN que confirme que el cuerpo sí es de la colombiana. Sin embargo, su madre, lo pudo reconocer por un tatuaje que dice “Lily”, que coincide con uno que tenía Jennifer en homenaje a una tía fallecida.
Una amiga de Londoño, Marcela Toro, dijo al diario The New York Post: “ella era una persona cariñosa, dulce, que no tenía problemas con nadie y tenía un montón de amigos. Todo el mundo la quería, aún no entendemos por qué alguien le haría eso a ella”.
El cadáver de una colombiana fue hallado el pasado miércoles en el río Hudson, en Nueva York. La mujer fue identificada como Jennifer Londoño, una colombiana de 31 años, oriunda de Pereira, quien residía con su novio en Nueva Jersey.
Londoño fue, como confirmaron las autoridades, desmembrada y decapitada. Sus retos fueron esparcidos por distintos lugares de la Gran Manzana: una de las piernas fue encontrada en el Upper West Side en Manhattan, mientras que su torso lo halló una pareja que caminaba sobre el Canal de Red Hook de la costa de Brooklyn.
La colombiana fue vista por última vez el 25 de junio en el bar Luna Loung, en Englewood, Nueva Jersey, el cual administraba.
El principal sospechoso del crimen es su novio, un hombre de 40 años. Durante un allanamiento al departamento que la pareja compartía, la policía encontró rastros de sangre en la bañera.
Ahora solo falta un prueba de ADN que confirme que el cuerpo sí es de la colombiana. Sin embargo, su madre, lo pudo reconocer por un tatuaje que dice “Lily”, que coincide con uno que tenía Jennifer en homenaje a una tía fallecida.
Una amiga de Londoño, Marcela Toro, dijo al diario The New York Post: “ella era una persona cariñosa, dulce, que no tenía problemas con nadie y tenía un montón de amigos. Todo el mundo la quería, aún no entendemos por qué alguien le haría eso a ella”.