Comienza la ofensiva para expulsar al ISIS de Raqa
Milicianos kurdos y rebeldes sirios apoyados por Washington inician la ofensiva sobre la capital de facto del califato
Natalia Sancha
Beirut, El País
Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), alianza integrada por combatientes kurdos y árabes sirios respaldados por Washington, han anunciado este martes el comienzo de la batalla para liberar Raqa del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés). "Nuestras fuerzas entraron en el barrio de Meshleb en el este de la ciudad", confirmó la comandante de las FDS, Rojda Felat, a la agencia AFP. La ofensiva tiene lugar tras siete meses de combates en los que tanto los milicianos kurdos de las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo) como los de las FDS han logrado arrebatar al grupo yihadista el control de la estratégica localidad de Tabqa, a 55 kilómetros de Raqa y sede de una importante base área.
“La batalla por Raqa será larga y difícil, pero la ofensiva va a librar un golpe decisivo para la subsistencia del califato”, dijo en un comunicado el teniente general Steve Townsend de la coalición internacional liderada por Estados Unidos que lucha contra ISIS. Washington ha desplegado a un millar de sus marines en el norte de Siria, mientras que París y Londres han hecho lo propio con trescientos soldados de élite cada uno. Su misión es la de prestar apoyo logístico a sus aliados en el terreno y coordinar la ofensiva terrestre con los bombarderos aéreos diarios, como los 24 de este martes. La operación se produce al tiempo que las tropas iraquíes apoyadas por la coalición anuncian el último envite para expulsar a los yihadistas de Mosul.
Es precisamente desde la principal mezquita de esta ciudad iraquí donde Abu Baker Al Bagdadi proclamó el califato, imponiendo la ley del terror sobre sus habitantes desde julio de 2014. Al menos 10.000 del cuarto millón de civiles que aun permanecen en esta ciudad habrían huido en las últimas semanas ante la inminente ofensiva, según el recuento que hace Médicos Sin Fronteras. Al tiempo que las aviaciones internacionales intensifican los ataques aéreos sobre la capital del ISIS, aumentan las victimas civiles bajo los bombardeos con un mortífero balance de 225 personas muertas el pasado mes, según el recuento que hace el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Londres.
Desde el sur de Raqa, son las tropas regulares sirias junto con milicias aliadas las que lanzaron este sábado una ofensiva en la localidad de Deir Ezzor contra posiciones del ISIS quienes controlan la mayor parte de la ciudad. Si bien unidades de las YPG y del Ejército leal a Damasco mantienen una coordinación mínima en la lucha contra un mismo enemigo, las fuerzas árabes rebeldes que integran las FDS se enfrentan a los uniformados regulares. “En Raqa los civiles temen la entrada de los kurdos casi más que la del régimen”, dice vía Skype Abu Ahmed, activista del grupo Raqa está siendo masacrada silenciosamente.
La milicia kurda se ha convertido en el principal aliado internacional en el tablero sirio tras varios intentos fallidos para armar a diversas facciones rebeldes en la lucha contra ISIS. Sin embargo, su presencia en la batalla de Raqa preocupa a las poblaciones árabes de la zona. “Los kurdos son una herramienta en la guerra contra ISIS, pero si mantienen esa actitud cerrada para con sus vecinos árabes y el apoyo al PKK en Turquía no van a conseguir mucho apoyo internacional para sus objetivos políticos en el futuro”, valora un diplomático europeo en Beirut.
Este mes se reinician las negociaciones de paz en Ginebra, sin que los esfuerzos políticos hayan dado fruto hasta la fecha. Entrando en el séptimo año de guerra, el conflicto se ha cobrado más de 320.000 vidas, desplazado a la mitad de los 23 millones de sirios y herido a un millón y medio.
Natalia Sancha
Beirut, El País
Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), alianza integrada por combatientes kurdos y árabes sirios respaldados por Washington, han anunciado este martes el comienzo de la batalla para liberar Raqa del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés). "Nuestras fuerzas entraron en el barrio de Meshleb en el este de la ciudad", confirmó la comandante de las FDS, Rojda Felat, a la agencia AFP. La ofensiva tiene lugar tras siete meses de combates en los que tanto los milicianos kurdos de las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo) como los de las FDS han logrado arrebatar al grupo yihadista el control de la estratégica localidad de Tabqa, a 55 kilómetros de Raqa y sede de una importante base área.
“La batalla por Raqa será larga y difícil, pero la ofensiva va a librar un golpe decisivo para la subsistencia del califato”, dijo en un comunicado el teniente general Steve Townsend de la coalición internacional liderada por Estados Unidos que lucha contra ISIS. Washington ha desplegado a un millar de sus marines en el norte de Siria, mientras que París y Londres han hecho lo propio con trescientos soldados de élite cada uno. Su misión es la de prestar apoyo logístico a sus aliados en el terreno y coordinar la ofensiva terrestre con los bombarderos aéreos diarios, como los 24 de este martes. La operación se produce al tiempo que las tropas iraquíes apoyadas por la coalición anuncian el último envite para expulsar a los yihadistas de Mosul.
Es precisamente desde la principal mezquita de esta ciudad iraquí donde Abu Baker Al Bagdadi proclamó el califato, imponiendo la ley del terror sobre sus habitantes desde julio de 2014. Al menos 10.000 del cuarto millón de civiles que aun permanecen en esta ciudad habrían huido en las últimas semanas ante la inminente ofensiva, según el recuento que hace Médicos Sin Fronteras. Al tiempo que las aviaciones internacionales intensifican los ataques aéreos sobre la capital del ISIS, aumentan las victimas civiles bajo los bombardeos con un mortífero balance de 225 personas muertas el pasado mes, según el recuento que hace el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Londres.
Desde el sur de Raqa, son las tropas regulares sirias junto con milicias aliadas las que lanzaron este sábado una ofensiva en la localidad de Deir Ezzor contra posiciones del ISIS quienes controlan la mayor parte de la ciudad. Si bien unidades de las YPG y del Ejército leal a Damasco mantienen una coordinación mínima en la lucha contra un mismo enemigo, las fuerzas árabes rebeldes que integran las FDS se enfrentan a los uniformados regulares. “En Raqa los civiles temen la entrada de los kurdos casi más que la del régimen”, dice vía Skype Abu Ahmed, activista del grupo Raqa está siendo masacrada silenciosamente.
La milicia kurda se ha convertido en el principal aliado internacional en el tablero sirio tras varios intentos fallidos para armar a diversas facciones rebeldes en la lucha contra ISIS. Sin embargo, su presencia en la batalla de Raqa preocupa a las poblaciones árabes de la zona. “Los kurdos son una herramienta en la guerra contra ISIS, pero si mantienen esa actitud cerrada para con sus vecinos árabes y el apoyo al PKK en Turquía no van a conseguir mucho apoyo internacional para sus objetivos políticos en el futuro”, valora un diplomático europeo en Beirut.
Este mes se reinician las negociaciones de paz en Ginebra, sin que los esfuerzos políticos hayan dado fruto hasta la fecha. Entrando en el séptimo año de guerra, el conflicto se ha cobrado más de 320.000 vidas, desplazado a la mitad de los 23 millones de sirios y herido a un millón y medio.