“NI BOLITAS NI BOLUDOS”, UNA INICIATIVA QUE UNE
ANF/ La Paz
La página de Facebook "Ni bolitas Ni boludos” apuesta por contar historias de bolivianos en Argentina y de argentinos en Bolivia, historias que muestran que más allá de los casos de discriminación, xenofobia y violencia -que los hay-, existe una permanente y cotidiana construcción de puentes entre ambas naciones y culturas. La iniciativa está a cargo de la familia boliviana Padilla Zúñiga, que radica en Buenos Aires.
Es "una relación de convivencia e interdependencia que tiene una larga historia, que en el caso de la comunidad boliviana en Buenos Aires tiene como testigos a hijos, nietos y hasta bisnietos de bolivianos nacidos en Argentina”, explica el periodista boliviano Abdel
Padilla.
La idea del proyecto, dice Padilla, es resultado de observar diariamente estos procesos durante dos años, "no sólo en las zonas donde habitan nuestros compatriotas, sino en la cultura bonaerense en general”.
Después de Paraguay, agrega, Bolivia tiene la segunda comunidad de migrantes más numerosa en Argentina, de modo que "hay muchas huellas que seguir: en la economía, en el arte, la música, el teatro, el deporte, el mundo académico, la comunicación... Historias que muchas veces no forman parte la agenda mediática en ambos países, o son opacadas por los estigmas y los prejuicios”.
Padilla refiere que antes los temas y personajes para la producción los escogían gastando zapatos, caminando y escuchando a la gente. "Ahora hay muchas personas que nos han llamado para ser parte de la agenda. Creo que se debe a que nuestros últimos dos videos, el del artista Ponciano Cárdenas y de la comerciante potosina Marina Rivero, se han viralizado de manera impensada”.
"La acogida -de los productos multimedia- fue muy buena, diría muy intensa, por los tipos de mensajes que cuelga la gente en la red”, señala.
La página de Facebook "Ni bolitas Ni boludos” apuesta por contar historias de bolivianos en Argentina y de argentinos en Bolivia, historias que muestran que más allá de los casos de discriminación, xenofobia y violencia -que los hay-, existe una permanente y cotidiana construcción de puentes entre ambas naciones y culturas. La iniciativa está a cargo de la familia boliviana Padilla Zúñiga, que radica en Buenos Aires.
Es "una relación de convivencia e interdependencia que tiene una larga historia, que en el caso de la comunidad boliviana en Buenos Aires tiene como testigos a hijos, nietos y hasta bisnietos de bolivianos nacidos en Argentina”, explica el periodista boliviano Abdel
Padilla.
La idea del proyecto, dice Padilla, es resultado de observar diariamente estos procesos durante dos años, "no sólo en las zonas donde habitan nuestros compatriotas, sino en la cultura bonaerense en general”.
Después de Paraguay, agrega, Bolivia tiene la segunda comunidad de migrantes más numerosa en Argentina, de modo que "hay muchas huellas que seguir: en la economía, en el arte, la música, el teatro, el deporte, el mundo académico, la comunicación... Historias que muchas veces no forman parte la agenda mediática en ambos países, o son opacadas por los estigmas y los prejuicios”.
Padilla refiere que antes los temas y personajes para la producción los escogían gastando zapatos, caminando y escuchando a la gente. "Ahora hay muchas personas que nos han llamado para ser parte de la agenda. Creo que se debe a que nuestros últimos dos videos, el del artista Ponciano Cárdenas y de la comerciante potosina Marina Rivero, se han viralizado de manera impensada”.
"La acogida -de los productos multimedia- fue muy buena, diría muy intensa, por los tipos de mensajes que cuelga la gente en la red”, señala.