El precio del petróleo cae pese al acuerdo de la OPEP para restringir la oferta
Los productores prolongan los recortes hasta marzo de 2018 con la esperanza de impulsar el mercado
Luis Doncel
Madrid, El País
Lo que en un principio pareció excepcional va camino de convertirse en normalidad. La OPEP –la organización que reúne a los mayores productores de petróleo del mundo- anunció hace seis meses la primera reducción en la oferta de crudo en ocho años. Los mismos protagonistas, reunidos el jueves en Viena, prolongarán estos recortes hasta marzo de 2018. Con esta medida, el cartel del crudo deja clara su intención, repetida en los últimos días, de hacer “lo que sea necesario” para estabilizar un mercado importantísimo e impedir que los precios caigan por debajo de los 50 dólares por barril.
Pese a las buenas intenciones, los mercados acogieron con frialdad una decisión que ya habían descontado. Así, el precio del brent cayó dos dólares hasta el entorno de los 52 tras las subidas del inicio de la jornada. Se trata del mayor descenso diario en tres semanas.
La OPEP continuará con los recortes nueve meses más, plazo que empieza a contar a partir del próximo julio. Atrás quedaron ideas más radicales, como prolongar los cortes un año entero o incluso ahogar aún más la producción, y recortar más allá de los 1,8 millones de barriles acordados entre miembros de la OPEP y países externos el pasado noviembre. Pero al final se impuso el plan que Arabia Saudí —líder in pectore del cartel de productores— había acordado con Rusia, que pese a no pertenecer a esta organización cada vez aparece más alineada con ella.
“Tan solo mantener los recortes supone ya de por sí un éxito. Ir más allá habría hecho peligrar unos equilibrios muy delicados. El acuerdo cumple las expectativas y permite sentirse cómodos tanto a los productores, que tratan de evitar un desplome de los precios, como a los consumidores”, asegura a EL PAÍS Gonzalo Escribano, experto en Energía del Instituto Elcano.
"Todos los indicadores muestran que la continuación de los recortes durante nueve meses es el plazo óptimo que debe llevarnos a finales de año a unas existencias de crudo en torno a la media de los últimos cinco años", dijo a los periodistas el poderoso ministro de Energía saudí, Jalid al Falih, según informa Reuters.
La OPEP inició esta nueva estrategia de restricción a la oferta después de inundar el mercado con existencias, lo que hizo que el precio del crudo pasara de los niveles máximos de 115 dólares en 2014 a los mínimos de 29 en 2016. La fiebre del fracking en EE UU y una demanda renqueante también contribuyeron al desplome de los precios.
Preocupados por esta tendencia, los saudíes impulsaron un giro de 180 grados y decidieron reducir la producción mundial en torno al 2%. Pero esta estrategia ha funcionado solo a medias. Ha logrado mantener el precio por encima de los 50 dólares, pero no ha hecho que se agoten las existencias de crudo al nivel previsto.
Ahora, tras el nuevo acuerdo de la OPEP, los analistas prevén que los precios se mantengan entre los 50 y los 60 dólares a lo largo de los próximos meses. "En la banda alta de esta franja", matiza Escribano.
Luis Doncel
Madrid, El País
Lo que en un principio pareció excepcional va camino de convertirse en normalidad. La OPEP –la organización que reúne a los mayores productores de petróleo del mundo- anunció hace seis meses la primera reducción en la oferta de crudo en ocho años. Los mismos protagonistas, reunidos el jueves en Viena, prolongarán estos recortes hasta marzo de 2018. Con esta medida, el cartel del crudo deja clara su intención, repetida en los últimos días, de hacer “lo que sea necesario” para estabilizar un mercado importantísimo e impedir que los precios caigan por debajo de los 50 dólares por barril.
Pese a las buenas intenciones, los mercados acogieron con frialdad una decisión que ya habían descontado. Así, el precio del brent cayó dos dólares hasta el entorno de los 52 tras las subidas del inicio de la jornada. Se trata del mayor descenso diario en tres semanas.
La OPEP continuará con los recortes nueve meses más, plazo que empieza a contar a partir del próximo julio. Atrás quedaron ideas más radicales, como prolongar los cortes un año entero o incluso ahogar aún más la producción, y recortar más allá de los 1,8 millones de barriles acordados entre miembros de la OPEP y países externos el pasado noviembre. Pero al final se impuso el plan que Arabia Saudí —líder in pectore del cartel de productores— había acordado con Rusia, que pese a no pertenecer a esta organización cada vez aparece más alineada con ella.
“Tan solo mantener los recortes supone ya de por sí un éxito. Ir más allá habría hecho peligrar unos equilibrios muy delicados. El acuerdo cumple las expectativas y permite sentirse cómodos tanto a los productores, que tratan de evitar un desplome de los precios, como a los consumidores”, asegura a EL PAÍS Gonzalo Escribano, experto en Energía del Instituto Elcano.
"Todos los indicadores muestran que la continuación de los recortes durante nueve meses es el plazo óptimo que debe llevarnos a finales de año a unas existencias de crudo en torno a la media de los últimos cinco años", dijo a los periodistas el poderoso ministro de Energía saudí, Jalid al Falih, según informa Reuters.
La OPEP inició esta nueva estrategia de restricción a la oferta después de inundar el mercado con existencias, lo que hizo que el precio del crudo pasara de los niveles máximos de 115 dólares en 2014 a los mínimos de 29 en 2016. La fiebre del fracking en EE UU y una demanda renqueante también contribuyeron al desplome de los precios.
Preocupados por esta tendencia, los saudíes impulsaron un giro de 180 grados y decidieron reducir la producción mundial en torno al 2%. Pero esta estrategia ha funcionado solo a medias. Ha logrado mantener el precio por encima de los 50 dólares, pero no ha hecho que se agoten las existencias de crudo al nivel previsto.
Ahora, tras el nuevo acuerdo de la OPEP, los analistas prevén que los precios se mantengan entre los 50 y los 60 dólares a lo largo de los próximos meses. "En la banda alta de esta franja", matiza Escribano.