1x1: Carrasco lideró la última carga del Vicente Calderón
El belga inició la estampida atlética que puso al Madrid contra las cuerdas en la primera parte, con dos goles al minuto 16.
Jorge García
As
Así fue la actuación de los jugadores del Atlético en la victoria ante el Madrid, en la vuelta de las semifinales de la Champions.
Oblak: Fue vital para que el Atlético mantuviera sus opciones. En el 6' ya sacó un remate que hubiera podido cortar de raíz la estampida atlética. Después incluso llegó a sacar el disparo de Kroos, pero su rebote lo aprovechó Isco. Respondió de forma notable también a Cristiano. Sostuvo a su equipo.
Giménez: Se recuperó en un tiempo récord para poder jugar. Juanfran no se encontró en condiciones y el charrúa dio un paso al frente. En su estado físico cumplió. Dejó que le dañaran lo justo por su costado, eso sí, sin darle profundidad al equipo por la derecha.
Savic: Comenzó entonado bien sobre Cristiano, sufriendo más ante Benzema. Pero el francés le retrató en una baldosa en la jugada que originó el 2-1 de Isco con una maniobra contra la línea de fondo que nunca debió permitirse.
Godín: Puso todo lo que había que poner en las dos áreas. El uruguayo fue con todo en cada acción, contundente y conectando con la grada. Pero también se precipitó en el gol de Isco, yendo a encimar a Benzema contra la banda. Fue encommiable verle en los últimos diez minutos yéndose hacia arriba.
Filipe: Sin errores, pero bastante bien atado. No tuvo por su banda el peso de Carrasco por la suya, pero fue un partido correcto del brasileño que anímicamente acusó el mazazo del 2-1.
Carrasco: Entró en el campo enchufadísimo, cargando constantemente por el costado derecho. Kroos no le seguía y, en esos primeros 20 minutos, fue una pesadilla para Marcelo. Se contagió de la sobrexcitación y en el 40' pudo ser expulsado por una feísima entrada a Casemiro. En la reanudación volvió a intentarlo, esta vez acomodado en la izquierda. En el 65' Keylor le sacó una gran ocasión que él se había fabricado.
Saúl: Inició la última carga colchonera en el Calderón con un cabezazo imperial. En su versión del final de temporada, dueño del centro ante un Casemiro por entonces desbordado. Pero poco a poco fue sucumbiendo ante el manejo de un Modric que ayer le salvó el tipo al Madrid.
Gabi: Tuvo también culpa en ese arranque frenético del Atlético. Dueño de los espacios cortos, robando y, sobre todo, sacando limpio y rápido el primer pase en campo colchonero. Las posesiones largas y la precisión en el pase madridista fue limitando su impacto en el partido. Se vació.
Koke: Jugó lo que le dieron las piernas. Según avanzó el partido pagó la sobrexcitación del equipo y fue desapareciendo. Ha llegado cargadísimo al final de la temporada y ese desgaste lo acusó en la segunda parte.
Griezmann: Se enfrentó y superó la prueba del penalti. Hasta entonces había buscado muy bien los espacios a la espalda de la medular madridista, aprovechando muy bien la pantalla que Torres le preparaba sosteniendo a Ramos y a Varane. En la segunda parte volvió a intentar filtrarse pero el Madrid, mucho más sereno en defensa, le fue anulando.
Torres: Fue el Niño más beligerante que se recuerda. En ese primer cuarto de hora infernal lo ganó casi todo por arriba, desesperando a Ramos y a Varane. Al francés incluso consiguió sacarle de cuadro en el penalti que ponía a un paso la remontada. Se despidió del Calderón ofreciéndole todo lo que tenía.
Sustituciones
Thomas: Simeone le puso en el campo por Giménez para quemar las naves. Mantuvo el tipo como lateral derecho.
Gameiro: En la ida tuvo la mejor, la única, ocasión del Atlético y no estuvo fino. En el Calderón, al poco de salir tuvo a placer un rebote de Keylor de los que no se pueden perdonar. El costarricense se la sacó. Después, esta era más difícil, Correa se la volvió a poner en boca de gol, pero Varane llegó antes que él.
Correa: Fue la última bala del Cholo y el argentino respondió. Le fabricó una ocasión inmejorable a Gaitán al poco de salir, pero Varane se interpuso.
As
Así fue la actuación de los jugadores del Atlético en la victoria ante el Madrid, en la vuelta de las semifinales de la Champions.
Oblak: Fue vital para que el Atlético mantuviera sus opciones. En el 6' ya sacó un remate que hubiera podido cortar de raíz la estampida atlética. Después incluso llegó a sacar el disparo de Kroos, pero su rebote lo aprovechó Isco. Respondió de forma notable también a Cristiano. Sostuvo a su equipo.
Giménez: Se recuperó en un tiempo récord para poder jugar. Juanfran no se encontró en condiciones y el charrúa dio un paso al frente. En su estado físico cumplió. Dejó que le dañaran lo justo por su costado, eso sí, sin darle profundidad al equipo por la derecha.
Savic: Comenzó entonado bien sobre Cristiano, sufriendo más ante Benzema. Pero el francés le retrató en una baldosa en la jugada que originó el 2-1 de Isco con una maniobra contra la línea de fondo que nunca debió permitirse.
Godín: Puso todo lo que había que poner en las dos áreas. El uruguayo fue con todo en cada acción, contundente y conectando con la grada. Pero también se precipitó en el gol de Isco, yendo a encimar a Benzema contra la banda. Fue encommiable verle en los últimos diez minutos yéndose hacia arriba.
Filipe: Sin errores, pero bastante bien atado. No tuvo por su banda el peso de Carrasco por la suya, pero fue un partido correcto del brasileño que anímicamente acusó el mazazo del 2-1.
Carrasco: Entró en el campo enchufadísimo, cargando constantemente por el costado derecho. Kroos no le seguía y, en esos primeros 20 minutos, fue una pesadilla para Marcelo. Se contagió de la sobrexcitación y en el 40' pudo ser expulsado por una feísima entrada a Casemiro. En la reanudación volvió a intentarlo, esta vez acomodado en la izquierda. En el 65' Keylor le sacó una gran ocasión que él se había fabricado.
Saúl: Inició la última carga colchonera en el Calderón con un cabezazo imperial. En su versión del final de temporada, dueño del centro ante un Casemiro por entonces desbordado. Pero poco a poco fue sucumbiendo ante el manejo de un Modric que ayer le salvó el tipo al Madrid.
Gabi: Tuvo también culpa en ese arranque frenético del Atlético. Dueño de los espacios cortos, robando y, sobre todo, sacando limpio y rápido el primer pase en campo colchonero. Las posesiones largas y la precisión en el pase madridista fue limitando su impacto en el partido. Se vació.
Koke: Jugó lo que le dieron las piernas. Según avanzó el partido pagó la sobrexcitación del equipo y fue desapareciendo. Ha llegado cargadísimo al final de la temporada y ese desgaste lo acusó en la segunda parte.
Griezmann: Se enfrentó y superó la prueba del penalti. Hasta entonces había buscado muy bien los espacios a la espalda de la medular madridista, aprovechando muy bien la pantalla que Torres le preparaba sosteniendo a Ramos y a Varane. En la segunda parte volvió a intentar filtrarse pero el Madrid, mucho más sereno en defensa, le fue anulando.
Torres: Fue el Niño más beligerante que se recuerda. En ese primer cuarto de hora infernal lo ganó casi todo por arriba, desesperando a Ramos y a Varane. Al francés incluso consiguió sacarle de cuadro en el penalti que ponía a un paso la remontada. Se despidió del Calderón ofreciéndole todo lo que tenía.
Sustituciones
Thomas: Simeone le puso en el campo por Giménez para quemar las naves. Mantuvo el tipo como lateral derecho.
Gameiro: En la ida tuvo la mejor, la única, ocasión del Atlético y no estuvo fino. En el Calderón, al poco de salir tuvo a placer un rebote de Keylor de los que no se pueden perdonar. El costarricense se la sacó. Después, esta era más difícil, Correa se la volvió a poner en boca de gol, pero Varane llegó antes que él.
Correa: Fue la última bala del Cholo y el argentino respondió. Le fabricó una ocasión inmejorable a Gaitán al poco de salir, pero Varane se interpuso.
