Imputan oficialmente a expresidenta surcoreana por casos de corrupción
Seúl, AFP
La expresidenta de Corea del Sur, Park Geun-Hye, fue imputada oficialmente este lunes por soborno en un caso de corrupción que provocó su destitución.
Park, cuya destitución fue confirmada en marzo y se halla actualmente detenida, se enfrenta a acusaciones de soborno, coacción, abuso de poder y divulgación de secretos de estado, indicaron los fiscales en un comunicado.
“Hemos imputado formalmente a Park, con múltiples cargos que incluyen abuso de poder, coacción, soborno y divulgación de secretos de estado” señalaron los fiscales al término de sus investigaciones.
La caída en desgracia de la expresidenta comenzó a mediados de 2016 cuando se reveló que su amiga y confidente Choi Soon-sil, que nunca ocupó ningún cargo oficial, aprovechó su influencia para conseguir que grandes compañías surcoreanas le pagaran millones de dólares.
Así, la confidente obtuvo 70 millones de dólares para dos fundaciones que controlaba, una suma que utilizó con fines personales.
Este mismo lunes, el presidente del grupo Lotte, el quinto mayor conglomerado surcoreano, fue también imputado por el mismo caso de corrupción que provocó la destitución de la presidenta surcoreana.
Shin Dong-Bin, de 62 años, está acusado de haber entregado cerca de 7 millones de dólares en sobornos a la expresidenta Park Geun-Hye y a su confidente.
La expresidenta de Corea del Sur, Park Geun-Hye, fue imputada oficialmente este lunes por soborno en un caso de corrupción que provocó su destitución.
Park, cuya destitución fue confirmada en marzo y se halla actualmente detenida, se enfrenta a acusaciones de soborno, coacción, abuso de poder y divulgación de secretos de estado, indicaron los fiscales en un comunicado.
“Hemos imputado formalmente a Park, con múltiples cargos que incluyen abuso de poder, coacción, soborno y divulgación de secretos de estado” señalaron los fiscales al término de sus investigaciones.
La caída en desgracia de la expresidenta comenzó a mediados de 2016 cuando se reveló que su amiga y confidente Choi Soon-sil, que nunca ocupó ningún cargo oficial, aprovechó su influencia para conseguir que grandes compañías surcoreanas le pagaran millones de dólares.
Así, la confidente obtuvo 70 millones de dólares para dos fundaciones que controlaba, una suma que utilizó con fines personales.
Este mismo lunes, el presidente del grupo Lotte, el quinto mayor conglomerado surcoreano, fue también imputado por el mismo caso de corrupción que provocó la destitución de la presidenta surcoreana.
Shin Dong-Bin, de 62 años, está acusado de haber entregado cerca de 7 millones de dólares en sobornos a la expresidenta Park Geun-Hye y a su confidente.