Un gol de Müller acerca un poco más al título al Bayern
José Carlos Menzel
As
Nada nuevo en Alemania. El Bayern sigue ganando, sigue dominando la Bundesliga y sigue dejando atrás a sus rivales. Se impuso por 1-0 al Gladbach a domicilio, una victoria que vuelve a acercarles un poco más a su quinta ensaladera consecutiva. Después de la derrota del Leipzig en Bremen (3-0), los bávaros se ponen a trece puntos del cuadro de la Red Bull, siguen careciendo de rivales en la máxima competición alemana y un año más apuntan a cantar alirón de manera muy anticipada.
El encuentro en el Borussia Park fue lo habitual cuando juega el Bayern. El conjunto rojiblanco con el balón en su poder, el rival encerrado atrás y agarrándose al fútbol de contraataque. En la mayoría de los casos suele salir mal, pero los de Hecking lograron mantenerse vivos en la primera mitad. Un disparo de Robben al travesaño y el cabezazo seguido de Lewandowski que atrapo Sommer fueron lo más productivo que sacó el Bayern de su posesión abismal, mientras que el conjunto local lanzaba contras cuando podía. La más peligrosa: Una que acabo con el balón en los pies de Jantschke a dos metros de Neuer y que Javi Martínez despejo en el último momento.
La cosa no cambio en la segunda mitad. El Bayern cocinaba jugada tras jugada y el Gladbach se lanzaba a la contra cuando la pillaba. Raffael tuvo la sorpresa en sus botas, pero su disparo lejano se marcho fuera por muy poco. Y cuando el Gladbach parecía haberse hecho un poco con el control del esférico y todo apuntaba a un final emocionante, apareció el Bayern. Apareció Thiago, mejor dicho. El internacional español, una vez mas imperial, vio como Müller le tiraba un desmarque en el corazón del área y le puso el cuero en el pie. Müller la bajo con la diestra y finalizó con la zurda, marcando su segundo tanto en lo que va de liga y dándole tres puntos más a los suyos que, una año más, se proclamaran campeones de Alemania en breve.
As
Nada nuevo en Alemania. El Bayern sigue ganando, sigue dominando la Bundesliga y sigue dejando atrás a sus rivales. Se impuso por 1-0 al Gladbach a domicilio, una victoria que vuelve a acercarles un poco más a su quinta ensaladera consecutiva. Después de la derrota del Leipzig en Bremen (3-0), los bávaros se ponen a trece puntos del cuadro de la Red Bull, siguen careciendo de rivales en la máxima competición alemana y un año más apuntan a cantar alirón de manera muy anticipada.
El encuentro en el Borussia Park fue lo habitual cuando juega el Bayern. El conjunto rojiblanco con el balón en su poder, el rival encerrado atrás y agarrándose al fútbol de contraataque. En la mayoría de los casos suele salir mal, pero los de Hecking lograron mantenerse vivos en la primera mitad. Un disparo de Robben al travesaño y el cabezazo seguido de Lewandowski que atrapo Sommer fueron lo más productivo que sacó el Bayern de su posesión abismal, mientras que el conjunto local lanzaba contras cuando podía. La más peligrosa: Una que acabo con el balón en los pies de Jantschke a dos metros de Neuer y que Javi Martínez despejo en el último momento.
La cosa no cambio en la segunda mitad. El Bayern cocinaba jugada tras jugada y el Gladbach se lanzaba a la contra cuando la pillaba. Raffael tuvo la sorpresa en sus botas, pero su disparo lejano se marcho fuera por muy poco. Y cuando el Gladbach parecía haberse hecho un poco con el control del esférico y todo apuntaba a un final emocionante, apareció el Bayern. Apareció Thiago, mejor dicho. El internacional español, una vez mas imperial, vio como Müller le tiraba un desmarque en el corazón del área y le puso el cuero en el pie. Müller la bajo con la diestra y finalizó con la zurda, marcando su segundo tanto en lo que va de liga y dándole tres puntos más a los suyos que, una año más, se proclamaran campeones de Alemania en breve.