Los jugadores que apuñalan a Cristiano Ronaldo en el Real Madrid de Zidane por la espalda (y en la cara)
Diario Gol
Tercera reunión en tres días. Jugadores y cuerpo técnico ya mantuvieron una al término del partido ante el Las Palmas (3-3) y otra en la sesión de entrenamiento del jueves.
El objetivo de esta última era seguir corrigiendo errores de cara al momento complicado de la temporada que se acerca. Según la versión oficial.
El motivo oculto
El diario Marca tiene otra explicación. Según el rotativo, el encuentro de los miembros del equipo sirvió para un intercambio de opiniones y un tirón de orejas de Sergio Ramos a sus compañeros en una de las reuniones más tensas que se recuerda en Valdevebas.
“Aquí el único que no tiene que defender es Cristiano Ronaldo, que marca 60 goles” dijo el capitán después de repasar algunas de las jugadas del choque con los canarios. Unas palabras que dividieron aún un vestuario que vive una situación convulsa desde hace semanas. Quedaron dos grupos bien definidos.
División
Por un lado los ‘amigos’ del portugués. Pepe, Marcelo, Keylor Navas y Fabio Coentrao dejaron claro su apoyo al luso. Se mostraron de acuerdo con la opinión del de Camas.
Otros jugadores no lo estaban tanto. Isco Alarcón, Toni Kroos, Luka Modric, Álvaro Morata y Marco Asensio no entienden porque unos tienen que trabajar más que otros. Se supone que son un equipo y todos deben remar en la misma dirección.
Tampoco consideran que CR7 esté en condiciones de cargar con el equipo a la espalda cuando las cosas van mal. En los últimos partidos quedó claramente demostrado.
Uno de los hombres de Zinedine Zidane fue un poco más allá. Gareth Bale fue al que más molestaron las palabras de Ramos. El galés trasladó al presidente su malestar. Tal y como le prometió Florentino Pérez, él debe ser el heredero del liderato del equipo. Está demostrando estar mucho más en forma que el ‘7’ blanco.
El equipo se juega en Ipurúa seguir dependiendo de sí mismo en la Liga y el núcleo duro del vestuario espera completar una buena actuación y sumar los tres puntos. Si no tendremos más reuniones subidas de tono.
