La familia de Kim Jong-nam tiene dos o tres semanas para reclamar el cadáver
Corea del Norte, AFP
La familia de Kim Jong-nam, hermano mayor del líder de régimen coreano asesinado en Malasia, dispone de dos a tres semanas para reclamar su cadáver a las autoridades del país, dijo hoy el ministro malasio de Sanidad, Subramaniam Sathasivam.
“Esperamos que esto se pueda resolver en dos o tres semanas”, dijo el ministro en respuesta a las preguntas de los periodistas sobre qué va a pasar con los restos de Kim Jong-nam, que se encuentran en el tanatorio del Hospital Kuala Lumpu, según el diario local The Star.
El ministro señaló que saben que Kim Jong-nam tenía esposa e hijos y confían en que éstos deseen recuperar el cadáver, pero en el caso de que nadie lo haga, el Gobierno de Malasia adoptará una decisión.
La Policía de Malasia completó la semana pasada la investigación de los restos mortales y entregó estos a Sanidad para que dispusiera de ellos.
Según la investigación policial, Kim Jong-nam murió el 13 de febrero pasado en la terminal de salidas internacionales del aeropuerto de Kuala Lumpur, adonde había ido para regresar a Macao.
Dos mujeres, una indonesia y una vietnamita, le restregaron el rostro con el agente nervioso VX y murió camino del hospital menos de media hora después.
Ambas mujeres, que alegan que creían que estaban gastando una broma, han sido detenidas y acusadas de asesinato.
La Policía busca además a siete norcoreanos: tres que cree que se esconden en la embajada de ese país en Kuala Lumpur y otros cuatro que supuestamente contrataron a las mujeres y abandonaron el país el mismo día del asesinato.
Kim Jong-nam nació en 1971 de la relación entre el líder norcoreano, Kim Jong-il, y su primera concubina, la actriz Song Hye-rim.
El actual líder norcoreano, Kim Jong-un, nació en 1984 del mismo padre y su última consorte, Ko Yong-hui.
El hermano mayor estuvo considerado en su día como el mejor posicionado para heredar la jefatura del régimen norcoreano, pero cayó en desgracia en 2001.
Los últimos años vivió exiliado en China, principalmente en Macao, desde donde atrajo la atención en 2012 por criticar a Pyongyang y su sistema de sucesión.
La familia de Kim Jong-nam, hermano mayor del líder de régimen coreano asesinado en Malasia, dispone de dos a tres semanas para reclamar su cadáver a las autoridades del país, dijo hoy el ministro malasio de Sanidad, Subramaniam Sathasivam.
“Esperamos que esto se pueda resolver en dos o tres semanas”, dijo el ministro en respuesta a las preguntas de los periodistas sobre qué va a pasar con los restos de Kim Jong-nam, que se encuentran en el tanatorio del Hospital Kuala Lumpu, según el diario local The Star.
El ministro señaló que saben que Kim Jong-nam tenía esposa e hijos y confían en que éstos deseen recuperar el cadáver, pero en el caso de que nadie lo haga, el Gobierno de Malasia adoptará una decisión.
La Policía de Malasia completó la semana pasada la investigación de los restos mortales y entregó estos a Sanidad para que dispusiera de ellos.
Según la investigación policial, Kim Jong-nam murió el 13 de febrero pasado en la terminal de salidas internacionales del aeropuerto de Kuala Lumpur, adonde había ido para regresar a Macao.
Dos mujeres, una indonesia y una vietnamita, le restregaron el rostro con el agente nervioso VX y murió camino del hospital menos de media hora después.
Ambas mujeres, que alegan que creían que estaban gastando una broma, han sido detenidas y acusadas de asesinato.
La Policía busca además a siete norcoreanos: tres que cree que se esconden en la embajada de ese país en Kuala Lumpur y otros cuatro que supuestamente contrataron a las mujeres y abandonaron el país el mismo día del asesinato.
Kim Jong-nam nació en 1971 de la relación entre el líder norcoreano, Kim Jong-il, y su primera concubina, la actriz Song Hye-rim.
El actual líder norcoreano, Kim Jong-un, nació en 1984 del mismo padre y su última consorte, Ko Yong-hui.
El hermano mayor estuvo considerado en su día como el mejor posicionado para heredar la jefatura del régimen norcoreano, pero cayó en desgracia en 2001.
Los últimos años vivió exiliado en China, principalmente en Macao, desde donde atrajo la atención en 2012 por criticar a Pyongyang y su sistema de sucesión.