Familiares de los bolivianos detenidos parten a Chile
La Paz, ANF
Dieciséis familiares de los nueve bolivianos detenidos en Chile, partieron de la terminal aérea de El Alto rumbo a Iquique en un vuelo de la aerolínea Amaszonas. El canciller Fernando Huanacuni despidió a la delegación.
“Están viajando los familiares, como ha sido el compromiso del Gobierno”, expresó la autoridad.
Huanacuni indicó que viajará mañana a Ginebra, Suiza, para formalizar la denuncia de este caso ante el Comité de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
"Yo y mi hija viajamos, quiero ver a mi hijo. Lo extrañé mucho", dijo Casimiro Tórrez, padre del funcionario de la Aduana Nacional detenido Juan José Tórrez, en declaraciones a la Red Patria Nueva.
Se prevé que también mañana los familiares visiten el penal de Alto Hospicio, donde los nueve capturados se encuentran cumpliendo una detención preventiva de 120 días. El retorno de los allegados está previsto para ese mismo día.
El abogado de los familiares, Raúl Ruiz Roca, expresó su compromiso de asumir y representar la defensa y anunció que presentará una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por la detención arbitraria de los bolivianos.
Para el jurista, los derechos humanos fundamentales de los connacionales fueron vulnerados en el vecino país, al igual que las garantías en el debido proceso.
Además, Ruiz dijo que se vulneró la dignidad, el honor y la honra de los dos militares y siete aduaneros "contraviniendo flagrantemente los principios y garantías fundamentales que cualquier sistema jurídico de países americanos debe brindar".
"Este asunto debía haber sido considerado y resuelto directamente entre Estados y no así en el marco de la jurisdicción penal chilena", señaló.
Esta visita tiene el objetivo de levantar el ánimo de los dos militares y siete funcionarios aduaneros que fueron capturados el 19 de marzo en la frontera con chile y detenidos preventivamente desde el 22 de marzo.
El gobierno de Michelle Bachelet acusa los bolivianos de tres delitos: robo con intimidación y violencia, porte y tenencia de armas prohibidas, y contrabando.
Dieciséis familiares de los nueve bolivianos detenidos en Chile, partieron de la terminal aérea de El Alto rumbo a Iquique en un vuelo de la aerolínea Amaszonas. El canciller Fernando Huanacuni despidió a la delegación.
“Están viajando los familiares, como ha sido el compromiso del Gobierno”, expresó la autoridad.
Huanacuni indicó que viajará mañana a Ginebra, Suiza, para formalizar la denuncia de este caso ante el Comité de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
"Yo y mi hija viajamos, quiero ver a mi hijo. Lo extrañé mucho", dijo Casimiro Tórrez, padre del funcionario de la Aduana Nacional detenido Juan José Tórrez, en declaraciones a la Red Patria Nueva.
Se prevé que también mañana los familiares visiten el penal de Alto Hospicio, donde los nueve capturados se encuentran cumpliendo una detención preventiva de 120 días. El retorno de los allegados está previsto para ese mismo día.
El abogado de los familiares, Raúl Ruiz Roca, expresó su compromiso de asumir y representar la defensa y anunció que presentará una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por la detención arbitraria de los bolivianos.
Para el jurista, los derechos humanos fundamentales de los connacionales fueron vulnerados en el vecino país, al igual que las garantías en el debido proceso.
Además, Ruiz dijo que se vulneró la dignidad, el honor y la honra de los dos militares y siete aduaneros "contraviniendo flagrantemente los principios y garantías fundamentales que cualquier sistema jurídico de países americanos debe brindar".
"Este asunto debía haber sido considerado y resuelto directamente entre Estados y no así en el marco de la jurisdicción penal chilena", señaló.
Esta visita tiene el objetivo de levantar el ánimo de los dos militares y siete funcionarios aduaneros que fueron capturados el 19 de marzo en la frontera con chile y detenidos preventivamente desde el 22 de marzo.
El gobierno de Michelle Bachelet acusa los bolivianos de tres delitos: robo con intimidación y violencia, porte y tenencia de armas prohibidas, y contrabando.