El Madrid refuerza la confianza en Kovacic: dice 'no' a las ofertas
Varios clubes europeos le pretenden, pero es el futuro del Madrid. Zidane confía en él y el club no ha querido escuchar a los equipos que han preguntado por él.
Sergio Santos Chozas
As
Mateo Kovacic es el futuro del Madrid. Con sólo 22 años se ha convertido en una pieza importante para Zidane y el club ha reforzado su confianza en él: ha dicho 'no' a todos los clubes que se han interesado por él. A pesar de que desde el extranjero apuntan el interés de distintos equipos (Milán, Nápoles, Tottenham...) la realidad es que el Madrid no tiene la intención de sentarse a dialogar con nadie. El croata es un pilar clave para el futuro del club.
Los números respaldan la decisión del club. Esta temporada, aunque aún faltan más de dos meses de competición, ya ha disputado más minutos que todo el curso anterior (1642' frente a 1411'). La campaña anterior sólo jugaba el 30% de los minutos y en esta disputa el 41%. Su progresión sigue el plan previsto y su importancia en el equipo no para de crecer. También su aportación ofensiva ha aumentado: en esta 2016-17 lleva dos goles y dos asistencias (cerró la 2015-16 con un gol y una asistencia).
Es el 14º futbolista más utilizado por Zizou esta campaña y el primer recambio para el mediocampo. Casemiro, Kroos y Modric, por el momento, son intocables para el técnico francés. Pero cuando alguno falla, Kovacic es el futbolista en quien más confía el entrenador (ha jugado más minutos que James e Isco).
Por tanto, el Madrid no se plantea su venta. Ha rendido en citas importantes (fue titular y brilló esta temporada en el Calderón y en el Camp Nou), demostrando que ya está preparado para ser titular en los momentos de máxima exigencia. La apuesta por él fue importante (su traspaso desde el Inter costó 30 millones) y se le considera el relevo natural de Modric. No está en el mercado.
Otro factor importante en su adaptación es el idioma. Kovacic entiende y habla el español de manera casi perfecta. Ya lo hacía a los pocos meses de su llegada. Es sólo una de las muchas muestras de las ganas y ambición que tiene de triunfar de blanco, igual que sucedió en la pasada pretemporada cuando acortó sus vacaciones para estar con el grupo desde el primer día (tenía permiso para llegar más tarde por haber disputado la Eurocopa con Croacia). Una ambición que le convierte en intocable.
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Mateo Kovacic es el futuro del Madrid. Con sólo 22 años se ha convertido en una pieza importante para Zidane y el club ha reforzado su confianza en él: ha dicho 'no' a todos los clubes que se han interesado por él. A pesar de que desde el extranjero apuntan el interés de distintos equipos (Milán, Nápoles, Tottenham...) la realidad es que el Madrid no tiene la intención de sentarse a dialogar con nadie. El croata es un pilar clave para el futuro del club.
Los números respaldan la decisión del club. Esta temporada, aunque aún faltan más de dos meses de competición, ya ha disputado más minutos que todo el curso anterior (1642' frente a 1411'). La campaña anterior sólo jugaba el 30% de los minutos y en esta disputa el 41%. Su progresión sigue el plan previsto y su importancia en el equipo no para de crecer. También su aportación ofensiva ha aumentado: en esta 2016-17 lleva dos goles y dos asistencias (cerró la 2015-16 con un gol y una asistencia).
Es el 14º futbolista más utilizado por Zizou esta campaña y el primer recambio para el mediocampo. Casemiro, Kroos y Modric, por el momento, son intocables para el técnico francés. Pero cuando alguno falla, Kovacic es el futbolista en quien más confía el entrenador (ha jugado más minutos que James e Isco).
Por tanto, el Madrid no se plantea su venta. Ha rendido en citas importantes (fue titular y brilló esta temporada en el Calderón y en el Camp Nou), demostrando que ya está preparado para ser titular en los momentos de máxima exigencia. La apuesta por él fue importante (su traspaso desde el Inter costó 30 millones) y se le considera el relevo natural de Modric. No está en el mercado.
Otro factor importante en su adaptación es el idioma. Kovacic entiende y habla el español de manera casi perfecta. Ya lo hacía a los pocos meses de su llegada. Es sólo una de las muchas muestras de las ganas y ambición que tiene de triunfar de blanco, igual que sucedió en la pasada pretemporada cuando acortó sus vacaciones para estar con el grupo desde el primer día (tenía permiso para llegar más tarde por haber disputado la Eurocopa con Croacia). Una ambición que le convierte en intocable.
