Caso Porvenir: Evo cuestiona a expresidentes y los llama “cómplices” de traición a la patria
Morales rechazó los 15 años de cárcel para el exprefecto de Pando.
Página Siete Digital / La Paz
El presidente Evo Morales cuestionó a los expresidentes y políticos de derecha que se pronunciaron a favor del exprefecto de Pando, Leopoldo Fernández, quien el pasado viernes fue sentenciado a 15 años de cárcel por la denominada masacre de El Porvenir.
A través de una conferencia de prensa, el Presidente hizo un recuento de lo que vivió el país en su primer Gobierno, cuando los prefectos de la llamada "Media Luna” (Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca) se organizaron, según él, para dividir Bolivia a través de movilizaciones y enfrentamientos, uno de ellos el vivido en la población de El Porvenir, Pando.
"Lo peor es cómo expresidentes pueden defender a separatistas, quienes defienden a los separatistas son cómplices de traición a la patria, piensan dividir Bolivia”, declaró el jefe de Estado desde Palacio de Gobierno.
Además, declaró su rechazo a los 15 años de cárcel, porque estos delitos de "genocidio" deberían ser penados con más años. "Las penas para estos grupos deberían ser más de 15 años, son temas de la justicia, eso no comparto", acotó.
A través de su cuenta de Twitter, el expresidente Carlos Mesa afirmó que la sentencia a Fernández, "queda en entredicho” por la "evidente judicialización de la política”. "L. Fernández. Con un sistema judicial en descrédito y una evidente judicialización de la política, cualquier sentencia queda en entredicho”, escribió Mesa en su cuenta de Twitter.
El expresidente Jorge Tuto Quiroga también se manifestó al respecto y rechazó la sentencia de 15 años de reclusión contra Fernández y exigió a la justicia revertirla y que si no la hace serán los tribunales internacionales que lo absolverán con un daño económico para el Estado.
El 11 de septiembre del año 2008 en Porvenir, Cobija, se enfrentaron campesinos afines al Gobierno y funcionarios de la Prefectura y cívicos de Pando. Estos hechos dejaron un saldo de 13 muertos y 30 heridos. Cinco días después, Fernández fue detenido y trasladado a La Paz, bajo la acusación de ser el principal autor de aquellos hechos.
El presidente Evo Morales cuestionó a los expresidentes y políticos de derecha que se pronunciaron a favor del exprefecto de Pando, Leopoldo Fernández, quien el pasado viernes fue sentenciado a 15 años de cárcel por la denominada masacre de El Porvenir.
A través de una conferencia de prensa, el Presidente hizo un recuento de lo que vivió el país en su primer Gobierno, cuando los prefectos de la llamada "Media Luna” (Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca) se organizaron, según él, para dividir Bolivia a través de movilizaciones y enfrentamientos, uno de ellos el vivido en la población de El Porvenir, Pando.
"Lo peor es cómo expresidentes pueden defender a separatistas, quienes defienden a los separatistas son cómplices de traición a la patria, piensan dividir Bolivia”, declaró el jefe de Estado desde Palacio de Gobierno.
Además, declaró su rechazo a los 15 años de cárcel, porque estos delitos de "genocidio" deberían ser penados con más años. "Las penas para estos grupos deberían ser más de 15 años, son temas de la justicia, eso no comparto", acotó.
A través de su cuenta de Twitter, el expresidente Carlos Mesa afirmó que la sentencia a Fernández, "queda en entredicho” por la "evidente judicialización de la política”. "L. Fernández. Con un sistema judicial en descrédito y una evidente judicialización de la política, cualquier sentencia queda en entredicho”, escribió Mesa en su cuenta de Twitter.
El expresidente Jorge Tuto Quiroga también se manifestó al respecto y rechazó la sentencia de 15 años de reclusión contra Fernández y exigió a la justicia revertirla y que si no la hace serán los tribunales internacionales que lo absolverán con un daño económico para el Estado.
El 11 de septiembre del año 2008 en Porvenir, Cobija, se enfrentaron campesinos afines al Gobierno y funcionarios de la Prefectura y cívicos de Pando. Estos hechos dejaron un saldo de 13 muertos y 30 heridos. Cinco días después, Fernández fue detenido y trasladado a La Paz, bajo la acusación de ser el principal autor de aquellos hechos.
