Un hombre mata a tres y hiere a cinco tras disparar contra los clientes de un bar en Sinaloa
El incidente ocurre enmedio de una crisis de seguridad en la entidad, donde se han recrudecido los enfrentamientos entre grupos criminales desde principios de año
Zorayda Gallegos
México, El País
La madrugada de este viernes un hombre disparó indiscriminadamente contra los asistentes de un bar en Culiacán, la capital de Sinaloa (al noroeste de México) tras una riña al interior del establecimiento. En el tiroteo murieron tres personas y cinco más resultaron heridas, confirmó el fiscal del Estado, Marco Antonio Higuera, a medios locales. El incidente ocurre enmedio de una crisis de seguridad en la entidad, donde se han recrudecido los enfrentamientos entre grupos criminales desde principios de año. Entre las víctimas hay una menor de edad y un extranjero, al que se le localizó una licencia de conducir de Texas (EE UU).
El incidente ocurrió alrededor de las 3.00 horas del viernes. Las autoridades han dicho que todo se suscitó por una discusión entre dos personas. En medio del pleito, uno de ellos sacó una pistola y le dio un balazo al hombre con el que hablaba. Inmediatamente varios hombres armados subieron hasta el segundo piso, donde se localizaba el bar El Pirata. Uno de ellos, un joven de 18 años que portaba un fusil de asalto AK-47, disparó en contra de los asistentes. Los atacantes huyeron. Esta mañana, tras resguardar el bar, las autoridades periciales recogieron 48 casquillos percutidos.
En una entrevista con medios locales, el fiscal Higuera informó que al parecer son cuatro personas las responsables del incidente, pero no se ha detenido a nadie hasta el momento. Para la investigación de los hechos han tomado las declaraciones de los asistentes al establecimiento y se buscarán apoyar de las cámaras de seguridad instaladas en el lugar. Entre los lesionados se encuentra otra menor de edad y el guardia de seguridad del centro nocturno.
Sinaloa ha tenido un inicio de año violento. En enero hubo un repunte en los homicidios. Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad, una instancia que recopila la icidencia delictiva en el paìs, en enero hubo 116 asesinatos, una cifra tan alta que no se registraba desde 2013. En enero del año pasado en el Estado habían ocurrido 77 homicidios. La racha de inseguridad se ha extendido también a febrero.
Desde principios de febrero las balaceras se intensificaron, ocasionando el cese de clases en varios planteles escolares. El 5 de febrero dos grupos delincuenciales se enfrentaron a balazos cerca del aeropuerto de Culiacán, con un saldo de dos personas heridas. Unos cuarenta minutos después, en otro punto de la ciudad, un tiroteo entre civiles armados dejó dos hombres muertos. El 7 de febrero, en un enfrentamiento entre miembros de la Marina y hombres armados, seis personas murieron (un marino y cinco civiles).
El martes pasado, en una localidad del municipio de Navolato, un grupo de hombres armados que viajaba en varias camionetas despojó al conductor de un camión, donde transportaba a jornaleros agrícolas. Aunque no se reportaron muertos, los delincuentes incendiaron el autobús, lo que generó temor entre los habitantes del lugar. Estos niveles de violencia y de sicosis en la población no se veían desde el 2008 o 2011, en los peores años de la guerra contra el narco.
Zorayda Gallegos
México, El País
La madrugada de este viernes un hombre disparó indiscriminadamente contra los asistentes de un bar en Culiacán, la capital de Sinaloa (al noroeste de México) tras una riña al interior del establecimiento. En el tiroteo murieron tres personas y cinco más resultaron heridas, confirmó el fiscal del Estado, Marco Antonio Higuera, a medios locales. El incidente ocurre enmedio de una crisis de seguridad en la entidad, donde se han recrudecido los enfrentamientos entre grupos criminales desde principios de año. Entre las víctimas hay una menor de edad y un extranjero, al que se le localizó una licencia de conducir de Texas (EE UU).
El incidente ocurrió alrededor de las 3.00 horas del viernes. Las autoridades han dicho que todo se suscitó por una discusión entre dos personas. En medio del pleito, uno de ellos sacó una pistola y le dio un balazo al hombre con el que hablaba. Inmediatamente varios hombres armados subieron hasta el segundo piso, donde se localizaba el bar El Pirata. Uno de ellos, un joven de 18 años que portaba un fusil de asalto AK-47, disparó en contra de los asistentes. Los atacantes huyeron. Esta mañana, tras resguardar el bar, las autoridades periciales recogieron 48 casquillos percutidos.
En una entrevista con medios locales, el fiscal Higuera informó que al parecer son cuatro personas las responsables del incidente, pero no se ha detenido a nadie hasta el momento. Para la investigación de los hechos han tomado las declaraciones de los asistentes al establecimiento y se buscarán apoyar de las cámaras de seguridad instaladas en el lugar. Entre los lesionados se encuentra otra menor de edad y el guardia de seguridad del centro nocturno.
Sinaloa ha tenido un inicio de año violento. En enero hubo un repunte en los homicidios. Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad, una instancia que recopila la icidencia delictiva en el paìs, en enero hubo 116 asesinatos, una cifra tan alta que no se registraba desde 2013. En enero del año pasado en el Estado habían ocurrido 77 homicidios. La racha de inseguridad se ha extendido también a febrero.
Desde principios de febrero las balaceras se intensificaron, ocasionando el cese de clases en varios planteles escolares. El 5 de febrero dos grupos delincuenciales se enfrentaron a balazos cerca del aeropuerto de Culiacán, con un saldo de dos personas heridas. Unos cuarenta minutos después, en otro punto de la ciudad, un tiroteo entre civiles armados dejó dos hombres muertos. El 7 de febrero, en un enfrentamiento entre miembros de la Marina y hombres armados, seis personas murieron (un marino y cinco civiles).
El martes pasado, en una localidad del municipio de Navolato, un grupo de hombres armados que viajaba en varias camionetas despojó al conductor de un camión, donde transportaba a jornaleros agrícolas. Aunque no se reportaron muertos, los delincuentes incendiaron el autobús, lo que generó temor entre los habitantes del lugar. Estos niveles de violencia y de sicosis en la población no se veían desde el 2008 o 2011, en los peores años de la guerra contra el narco.