Más de un millón de "fantasmas" pueden votar en las elecciones presidenciales de Ecuador
Son personas fallecidas que siguen figurando en el padrón electoral para los comicios presidenciales del próximo 19 de febrero
Mercedes Alvaro
Desde Quito, Ecuador
Infobae
Cuando falta menos de un mes para las elecciones presidenciales, algunos ecuatorianos han comenzado a comentar que no sería raro que Hugo Chávez y Fidel Castro lleguen a ese país como observadores de las elecciones del 19 de Febrero. ¿Una broma de mal gusto? Nada de eso, es que han comenzado a encontrar en el padrón electoral a hijos, nietos, padres, abuelos, amigos que están muertos. Y se calcula que 1,6 millones de fantasmas podrían votar.
El padrón electoral con el que se realizarán los comicios preocupa a partidos políticos y colectivos ciudadanos, que a través de diversos medios expresan casi a diario su descontento.
El fin de semana pasado, cientos de ciudadanos comenzaron a quejarse a través de las redes sociales, sobre todo de Twitter, sobre personas muertas que aparecían en el padrón; las denuncias, que se iniciaron como respuesta al pedido del candidato vicepresidencial Andrés Páez para que los ciudadanos verifiquen si sus familiares muertos siguen empadronados, no han parado.
El alemán Pins Dewite Gunter, fallecido en el 2010, está empadronado y jamás votó en Ecuador, dice Jorge Rodríguez, un respetado economista ecuatoriano, miembro de la Comisión Nacional Anticorrupción, un colectivo ciudadano que congrega a connotadas personalidades del país, varias de ellas que fueron miembros de la Comisión de Control Cívico de la Corrupción creada después de la caída del presidente Abdalá Bucaram para investigar actos de corrupción a nivel ejecutivo, parlamentario, judicial y local, pero que cerró en el 2008 cuando se aprobó una nueva Constitución.
Desde el año pasado, diversos grupos han alertado sobre irregularidades o inconsistencias en el padrón electoral, no solo por constar personas fallecidas sino también porque se detectaron personas que constaban dos veces en el padrón, por cédulas que no existían en el registro electoral, emisión de dos números de cédula a una misma persona e incluso por haberse detectado personas nacidas hace más de 100 años habilitadas para votar.
Entre quienes alertaron se encuentran delegados de las organizaciones políticas que fueron convocados por el propio Consejo Nacional Electoral (CNE) a realizar auditorías del registro electoral y del sistema de escrutinios para las elecciones de febrero próximo, y la Comisión Nacional Anticorrupción.
Ante la ola de críticas de los últimos días, el CNE ha dicho que según la ley es el Registro Civil el que tiene que eliminar de la lista de los cedulados a los nombres de los fallecidos y mantener actualizados los archivos de los cedulados. "Son los familiares quienes deben declarar y solicitar la inscripción del registro de defunción de un ciudadano".
Néstor Marroquín un ex auditor del registro electoral por el partido político Concertación, sostiene que "parece que por una negligencia, y tenemos la sospecha de que es una negligencia dolosa, los funcionarios del Registro Civil no cumplieron con su función, emitieron las partidas de defunción y no las inscribieron".
Según Juan Pablo Pozo, titular del CNE, son solo 12 las alertas que se han presentado sobre personas que a pesar de haber fallecido constan en el padrón electoral aptas para sufragar. Una cosa es que estén empadronados y otra cosa es que esos ciudadanos sufraguen, dijo Pozo.
Pero Rodríguez sostiene que "no son 12. Son 1.600.000 los fantasmas en el padrón".
Entre las denuncias hay casos, por ejemplo, de una persona fallecida en 1983 cuya partida de defunción consta en el Registro Civil y sin embargo está empadronada, o de una persona que murió en el 2009 y aparece empadronada. Y también hay casos como el de una persona muerta en 1968 que históricamente consta como ciudadano habilitado para sufragar en el norte de Quito, la capital del país y no ha sido sacada del padrón.
La respuesta oficial del CNE a las críticas y denuncias ha sido que el Registro Electoral estuvo a consideración de la ciudadanía del 7 al 21 de septiembre de 2016 y en ese lapso, solo se presentaron 99 reclamos por inconsistencias en la información personal. Todos estos fueron procesados y corregidos.
A las denuncias de ciudadanos se unen las de diversos colectivos.
El Consejo Nacional Electoral ha convocado a elecciones a 12,8 millones de personas mayores de 16 años. Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), la población ecuatoriana mayor a 16 años al 31 de diciembre del 2016 alcanza solo a 11,2 millones de personas . Hay una diferencia de 1,6 millones de votantes, que representa el 14,43% del total de ecuatorianos en capacidad de votar según en INEC, dice la Comisión Nacional anticorrupción.
"La diferencia tan abismal es imposible de justificar", más aún si se toma en cuenta que las cifras del INEC son oficiales", dijo el jueves la Comisión Nacional Anticorrupción, en una carta enviada al secretario general de la OEA, al secretario general de la Unasur, a los delegados y comisionados de Argentina, Brasil y Perú y a los candidatos a presidente y vicepresidente de Ecuador.
Ya en marzo del año pasado, auditores representando a agrupaciones políticas en un informe entregado al CNE advirtieron de las inconsistencias y recomendaron entre otras cosas realizar una auditoría a la base de datos del Registro Civil, realizar un seguimiento periódico a las acciones del Registro Civil para depurar la información hasta el cierre del proceso de actualización del Registro Electoral en Octubre , y disponer a la Dirección Nacional de Control Electoral que inicie la revisión de las bases de datos presentadas . "Tuvieron siete meses para realizar la depuración y tener un padrón electoral lo más real, pero el Consejo Electoral no hizo nada para corregir los problemas", afirma Marroquín, quien en octubre renunció a sus funciones precisamente porque no se corrigieron los problemas.
Pozo, sin embargo, sostiene que en la auditoría que se realizó el año pasado al padrón se registraron inconsistencias que no llegan ni al 1%.
El martes pasado, Marroquín presentó una demanda de infracción electoral cometida por el Registro Civil por no cumplir la función de entregar un padrón electoral depurado o la información necesaria para que el Consejo Electoral tenga el padrón depurado. Él dice que hasta el momento no se ha hecho ninguna corrección y calcula que al menos 1 millón de personas están irregularmente empadronadas y podrían votar el 19 de Febrero y en el caso de los muertos alguien podría verles votando.
Mientras los unos denuncian y los otros se defienden se han creado cuentas de e-mail como muertos@defiendetuvoto.org para denunciar la presencia de personas muertas en el padrón, se han comenzado a difundir en redes sociales y en chats consejos y sugerencias para el 19 de febrero entre ellas ir con la camiseta tricolor todos quienes no votarán por el candidato oficial y llevar esfero propio.
El humor tampoco está ausente del debate y abundan los memes sobre los muertos y los fantasmas que podrían votar el 19 de Febrero y sobre lo que se dice es el último descubrimiento electoral: "Jesús resucitó al tercer día y descubrió que estaba empadronado".
Mercedes Alvaro
Desde Quito, Ecuador
Infobae
Cuando falta menos de un mes para las elecciones presidenciales, algunos ecuatorianos han comenzado a comentar que no sería raro que Hugo Chávez y Fidel Castro lleguen a ese país como observadores de las elecciones del 19 de Febrero. ¿Una broma de mal gusto? Nada de eso, es que han comenzado a encontrar en el padrón electoral a hijos, nietos, padres, abuelos, amigos que están muertos. Y se calcula que 1,6 millones de fantasmas podrían votar.
El padrón electoral con el que se realizarán los comicios preocupa a partidos políticos y colectivos ciudadanos, que a través de diversos medios expresan casi a diario su descontento.
El fin de semana pasado, cientos de ciudadanos comenzaron a quejarse a través de las redes sociales, sobre todo de Twitter, sobre personas muertas que aparecían en el padrón; las denuncias, que se iniciaron como respuesta al pedido del candidato vicepresidencial Andrés Páez para que los ciudadanos verifiquen si sus familiares muertos siguen empadronados, no han parado.
El alemán Pins Dewite Gunter, fallecido en el 2010, está empadronado y jamás votó en Ecuador, dice Jorge Rodríguez, un respetado economista ecuatoriano, miembro de la Comisión Nacional Anticorrupción, un colectivo ciudadano que congrega a connotadas personalidades del país, varias de ellas que fueron miembros de la Comisión de Control Cívico de la Corrupción creada después de la caída del presidente Abdalá Bucaram para investigar actos de corrupción a nivel ejecutivo, parlamentario, judicial y local, pero que cerró en el 2008 cuando se aprobó una nueva Constitución.
Desde el año pasado, diversos grupos han alertado sobre irregularidades o inconsistencias en el padrón electoral, no solo por constar personas fallecidas sino también porque se detectaron personas que constaban dos veces en el padrón, por cédulas que no existían en el registro electoral, emisión de dos números de cédula a una misma persona e incluso por haberse detectado personas nacidas hace más de 100 años habilitadas para votar.
Entre quienes alertaron se encuentran delegados de las organizaciones políticas que fueron convocados por el propio Consejo Nacional Electoral (CNE) a realizar auditorías del registro electoral y del sistema de escrutinios para las elecciones de febrero próximo, y la Comisión Nacional Anticorrupción.
Ante la ola de críticas de los últimos días, el CNE ha dicho que según la ley es el Registro Civil el que tiene que eliminar de la lista de los cedulados a los nombres de los fallecidos y mantener actualizados los archivos de los cedulados. "Son los familiares quienes deben declarar y solicitar la inscripción del registro de defunción de un ciudadano".
Néstor Marroquín un ex auditor del registro electoral por el partido político Concertación, sostiene que "parece que por una negligencia, y tenemos la sospecha de que es una negligencia dolosa, los funcionarios del Registro Civil no cumplieron con su función, emitieron las partidas de defunción y no las inscribieron".
Según Juan Pablo Pozo, titular del CNE, son solo 12 las alertas que se han presentado sobre personas que a pesar de haber fallecido constan en el padrón electoral aptas para sufragar. Una cosa es que estén empadronados y otra cosa es que esos ciudadanos sufraguen, dijo Pozo.
Pero Rodríguez sostiene que "no son 12. Son 1.600.000 los fantasmas en el padrón".
Entre las denuncias hay casos, por ejemplo, de una persona fallecida en 1983 cuya partida de defunción consta en el Registro Civil y sin embargo está empadronada, o de una persona que murió en el 2009 y aparece empadronada. Y también hay casos como el de una persona muerta en 1968 que históricamente consta como ciudadano habilitado para sufragar en el norte de Quito, la capital del país y no ha sido sacada del padrón.
La respuesta oficial del CNE a las críticas y denuncias ha sido que el Registro Electoral estuvo a consideración de la ciudadanía del 7 al 21 de septiembre de 2016 y en ese lapso, solo se presentaron 99 reclamos por inconsistencias en la información personal. Todos estos fueron procesados y corregidos.
A las denuncias de ciudadanos se unen las de diversos colectivos.
El Consejo Nacional Electoral ha convocado a elecciones a 12,8 millones de personas mayores de 16 años. Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), la población ecuatoriana mayor a 16 años al 31 de diciembre del 2016 alcanza solo a 11,2 millones de personas . Hay una diferencia de 1,6 millones de votantes, que representa el 14,43% del total de ecuatorianos en capacidad de votar según en INEC, dice la Comisión Nacional anticorrupción.
"La diferencia tan abismal es imposible de justificar", más aún si se toma en cuenta que las cifras del INEC son oficiales", dijo el jueves la Comisión Nacional Anticorrupción, en una carta enviada al secretario general de la OEA, al secretario general de la Unasur, a los delegados y comisionados de Argentina, Brasil y Perú y a los candidatos a presidente y vicepresidente de Ecuador.
Ya en marzo del año pasado, auditores representando a agrupaciones políticas en un informe entregado al CNE advirtieron de las inconsistencias y recomendaron entre otras cosas realizar una auditoría a la base de datos del Registro Civil, realizar un seguimiento periódico a las acciones del Registro Civil para depurar la información hasta el cierre del proceso de actualización del Registro Electoral en Octubre , y disponer a la Dirección Nacional de Control Electoral que inicie la revisión de las bases de datos presentadas . "Tuvieron siete meses para realizar la depuración y tener un padrón electoral lo más real, pero el Consejo Electoral no hizo nada para corregir los problemas", afirma Marroquín, quien en octubre renunció a sus funciones precisamente porque no se corrigieron los problemas.
Pozo, sin embargo, sostiene que en la auditoría que se realizó el año pasado al padrón se registraron inconsistencias que no llegan ni al 1%.
El martes pasado, Marroquín presentó una demanda de infracción electoral cometida por el Registro Civil por no cumplir la función de entregar un padrón electoral depurado o la información necesaria para que el Consejo Electoral tenga el padrón depurado. Él dice que hasta el momento no se ha hecho ninguna corrección y calcula que al menos 1 millón de personas están irregularmente empadronadas y podrían votar el 19 de Febrero y en el caso de los muertos alguien podría verles votando.
Mientras los unos denuncian y los otros se defienden se han creado cuentas de e-mail como muertos@defiendetuvoto.org para denunciar la presencia de personas muertas en el padrón, se han comenzado a difundir en redes sociales y en chats consejos y sugerencias para el 19 de febrero entre ellas ir con la camiseta tricolor todos quienes no votarán por el candidato oficial y llevar esfero propio.
El humor tampoco está ausente del debate y abundan los memes sobre los muertos y los fantasmas que podrían votar el 19 de Febrero y sobre lo que se dice es el último descubrimiento electoral: "Jesús resucitó al tercer día y descubrió que estaba empadronado".