Rusia refuerza sus defensas antiaéreas en Crimea ante unas maniobras ucranias
Ucrania desafía a Moscú con lanzamientos de misiles en el mar Negro
Pilar Bonet
Moscú, El País
La tensión entre Rusia y Ucrania ha vuelto a dispararse después de que Kiev haya anunciado unas maniobras militares que incluyen el disparo de misiles antiaéreos de alcance medio en aguas del mar Negro, en las inmediaciones de Crimea, la península anexionada por Moscú en 2014.
Las maniobras se realizarán el 1 y 2 de diciembre en la provincia de Hersón (lindante con Crimea) y en ellas participará la aviación militar, la aviación de transporte, unidades de misiles antiaéreos y aparatos no pilotados entre otras cosas.
Uno de los elementos de las mencionadas maniobras serán los disparos de misiles dirigidos de alcance medio, según el jefe de Prensa de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Román Yurchílo. Ucrania informó de estas maniobras el pasado 24 de noviembre.
Moscú considera “ruso” el espacio aéreo sobre la península, que tras la anexión solo tiene comunicaciones por vía aérea con el territorio de Rusia. Para la Organización Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y la organización internacional de controladores, Eurocontrol, el espacio aéreo sobre Crimea es ucraniano.
Moscú ha reaccionado ante las intenciones ucranianas con un reforzamiento de sus defensas antiaéreas en Crimea, y la portavoz del ministerio de Exteriores, María Zajárova, ha calificado el anuncio de Kiev de “provocación” destinada a causar una escalada del conflicto entre los dos países. Ucrania espera una “enérgica reacción por parte de Rusia”, dijo la funcionaria, en opinión de la cual, no hay que excluir que Kiev pretenda “conservar a EEUU como principal protector tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales”. “Para esto se necesita una provocación”, afirmó Zajárova.
El Kremlin espera que Ucrania no permitirá “medidas ilegales que provoquen peligro para los vuelos sobre Rusia”, afirmó Dmitri Peskov, el secretario de prensa del presidente de Rusia, Vladímir Putin, citado por TASS. Varios despachos publicados el miércoles por esta agencia oficial rusa hacían hincapié en la necesidad de “posponer” los lanzamientos de misiles ucranianos.
En Kiev, el secretario del Consejo de Seguridad, Alexandr Turchínov, ha dicho que Ucrania realizará sus pruebas de misiles de acuerdo con los planes ya aprobados. “A tenor de todos los acuerdos internacionales, el espacio aéreo soberano de la Federación Rusa en el mar Negro se acaba por el centro del estrecho de Kerch”. “En esta zona Ucrania no planea realizar pruebas de misiles. Todo el resto del territorio al oeste del estrecho de Kerch es espacio aéreo soberano de Ucrania”, dijo Turchínov.
Al margen de la situación formal y los derechos reconocidos internacionalmente, sobre el terreno Rusia controla Crimea y Ucrania plantearía un dilema de prestigio a Moscú, si realiza las maniobras anunciadas. “Las tropas de defensa antiaérea de Rusia en Crimea están preparadas para los disparos de misiles de Ucrania en aguas del mar Negro y han reforzado su régimen de trabajo”, manifestó una fuente militar rusa de Sebastopol a Tass.
Los ejercicios se realizarán “exclusivamente en el espacio aéreo de Ucrania, sobre el mar abierto” y “de acuerdo con las normas internacionales, dijo el portavoz militar ucraniano, Yurchilo. Moscú había enviado a Crimea equipos de misiles antiaéreos S300 que posteriormente se desplazaron a Siria para proteger a la agrupación rusa allí. Para el 30 de noviembre debía llegar a la península una nueva división de equipos de misiles Bastión, que sustituye a la división desplazada a Siria. Una división Bastión consta de 10 vehículos, de los cuales cuatro son lanzadores y dos son contenedores transportables para los misiles. Los equipos se desplazarán a lo largo de la costa occidental, en la zona de Sebastopol y Evpatoria, y en el noreste de la península.
El ministerio de Defensa de Rusia ha presentado una protesta en Kiev y el servicio de Aviación de Rusia ha acusado a Ucrania de haber creado zonas peligrosas para los vuelos sobre el mar Negro y de violar las “aguas territoriales rusas” junto a Crimea. La aviación ucraniana ha respondido a las quejas rusas afirmando que se trata del espacio aéreo ucraniano y citando la decisión del consejo de la IATA de 1997 a este respecto. “Desde entonces no ha cambiado”, manifestó el servicio de prensa del ministerio de aviación de Ucrania, según el canal de televisión 5.ua.
Pilar Bonet
Moscú, El País
La tensión entre Rusia y Ucrania ha vuelto a dispararse después de que Kiev haya anunciado unas maniobras militares que incluyen el disparo de misiles antiaéreos de alcance medio en aguas del mar Negro, en las inmediaciones de Crimea, la península anexionada por Moscú en 2014.
Las maniobras se realizarán el 1 y 2 de diciembre en la provincia de Hersón (lindante con Crimea) y en ellas participará la aviación militar, la aviación de transporte, unidades de misiles antiaéreos y aparatos no pilotados entre otras cosas.
Uno de los elementos de las mencionadas maniobras serán los disparos de misiles dirigidos de alcance medio, según el jefe de Prensa de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Román Yurchílo. Ucrania informó de estas maniobras el pasado 24 de noviembre.
Moscú considera “ruso” el espacio aéreo sobre la península, que tras la anexión solo tiene comunicaciones por vía aérea con el territorio de Rusia. Para la Organización Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y la organización internacional de controladores, Eurocontrol, el espacio aéreo sobre Crimea es ucraniano.
Moscú ha reaccionado ante las intenciones ucranianas con un reforzamiento de sus defensas antiaéreas en Crimea, y la portavoz del ministerio de Exteriores, María Zajárova, ha calificado el anuncio de Kiev de “provocación” destinada a causar una escalada del conflicto entre los dos países. Ucrania espera una “enérgica reacción por parte de Rusia”, dijo la funcionaria, en opinión de la cual, no hay que excluir que Kiev pretenda “conservar a EEUU como principal protector tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales”. “Para esto se necesita una provocación”, afirmó Zajárova.
El Kremlin espera que Ucrania no permitirá “medidas ilegales que provoquen peligro para los vuelos sobre Rusia”, afirmó Dmitri Peskov, el secretario de prensa del presidente de Rusia, Vladímir Putin, citado por TASS. Varios despachos publicados el miércoles por esta agencia oficial rusa hacían hincapié en la necesidad de “posponer” los lanzamientos de misiles ucranianos.
En Kiev, el secretario del Consejo de Seguridad, Alexandr Turchínov, ha dicho que Ucrania realizará sus pruebas de misiles de acuerdo con los planes ya aprobados. “A tenor de todos los acuerdos internacionales, el espacio aéreo soberano de la Federación Rusa en el mar Negro se acaba por el centro del estrecho de Kerch”. “En esta zona Ucrania no planea realizar pruebas de misiles. Todo el resto del territorio al oeste del estrecho de Kerch es espacio aéreo soberano de Ucrania”, dijo Turchínov.
Al margen de la situación formal y los derechos reconocidos internacionalmente, sobre el terreno Rusia controla Crimea y Ucrania plantearía un dilema de prestigio a Moscú, si realiza las maniobras anunciadas. “Las tropas de defensa antiaérea de Rusia en Crimea están preparadas para los disparos de misiles de Ucrania en aguas del mar Negro y han reforzado su régimen de trabajo”, manifestó una fuente militar rusa de Sebastopol a Tass.
Los ejercicios se realizarán “exclusivamente en el espacio aéreo de Ucrania, sobre el mar abierto” y “de acuerdo con las normas internacionales, dijo el portavoz militar ucraniano, Yurchilo. Moscú había enviado a Crimea equipos de misiles antiaéreos S300 que posteriormente se desplazaron a Siria para proteger a la agrupación rusa allí. Para el 30 de noviembre debía llegar a la península una nueva división de equipos de misiles Bastión, que sustituye a la división desplazada a Siria. Una división Bastión consta de 10 vehículos, de los cuales cuatro son lanzadores y dos son contenedores transportables para los misiles. Los equipos se desplazarán a lo largo de la costa occidental, en la zona de Sebastopol y Evpatoria, y en el noreste de la península.
El ministerio de Defensa de Rusia ha presentado una protesta en Kiev y el servicio de Aviación de Rusia ha acusado a Ucrania de haber creado zonas peligrosas para los vuelos sobre el mar Negro y de violar las “aguas territoriales rusas” junto a Crimea. La aviación ucraniana ha respondido a las quejas rusas afirmando que se trata del espacio aéreo ucraniano y citando la decisión del consejo de la IATA de 1997 a este respecto. “Desde entonces no ha cambiado”, manifestó el servicio de prensa del ministerio de aviación de Ucrania, según el canal de televisión 5.ua.