Por qué Melania Trump y su hijo Barron no se mudarán a la Casa Blanca (al menos por un tiempo)
EEUU, BBC
Así como su campaña rompió esquemas, la presidencia de Donald Trump iniciará con un movimiento inusual: la nueva pareja presidencial no vivirá junta en la Casa Blanca, por un tiempo.
La futura primera dama, Melania Trump, permanecerá en Nueva York por unos meses luego de que Trump jure el cargo el 20 de enero de 2017, confirmó el presidente electo este domingo.
Eso se debe a que la pareja ha decidido que Barron, el hijo de 10 años de Melania y Donald Trump, permanezca en la escuela a la que asiste en la Gran Manzana hasta que concluya su año escolar.
Así como su campaña rompió esquemas, la presidencia de Donald Trump iniciará con un movimiento inusual: la nueva pareja presidencial no vivirá junta en la Casa Blanca, por un tiempo.
La futura primera dama, Melania Trump, permanecerá en Nueva York por unos meses luego de que Trump jure el cargo el 20 de enero de 2017, confirmó el presidente electo este domingo.
Eso se debe a que la pareja ha decidido que Barron, el hijo de 10 años de Melania y Donald Trump, permanezca en la escuela a la que asiste en la Gran Manzana hasta que concluya su año escolar.
Así lo explicó Trump a reporteros que preguntaban sobre el futuro de la pareja en la Casa Blanca.
El presidente electo dijo que volverían a vivir juntos "justo cuando (Barron)termine la escuela".
El menor cursa el quinto grado en un colegio privado del Upper West Side de Manhattan, Nueva York y su año escolar finaliza a inicios del verano de 2017.
Hasta ahora, Trump, su equipo y su familia han desarrollado sus actividades desde la Torre Trump en Manhattan, donde hay un gran despliegue de seguridad por parte del Servicio Secreto de EE.UU.
Un nuevo precedente
Jason Miller, un portavoz del equipo de Trump, dijo que la nueva pareja presidencial es sensible al hecho de "sacar a un niño de 10 años de la escuela en medio de un año escolar".
Sin embargo, todos los presidentes han vivido y despachado desde la Casa Blanca desde que toman el cargo, una tradición que se remonta a la administración de John Adams, en 1800.
El primer presidente del país, George Washington, y su esposa no vivieron en la mansión de la capital estadounidense porque aún no existía el edificio.
El diario The Washington Post señaló que hubo un caso singular: la primera dama Anna Harrison, esposa del presidente William Henry Harrison, no tuvo oportunidad de mudarse porque el noveno presidente murió un mes después del juramentodel cargo.
Luego de una campaña inusual, el gobierno de Donald Trump seguirá diferenciándose de sus antecesores sentando otro nuevo precedente.