La Fundación Trump admite que desvió fondos para sus negocios
La organización violó la ley que prohíbe destinar recursos a fines propios o familiares
Joan Faus
Corresponsal en Estados Unidos
Washington, El País
La fundación de Donald Trump ha admitido que violó la ley que prohíbe a organizaciones sin ánimo de lucro destinar fondos a fines propios o para ayudar a sus negocios o su familia. Así lo revela una declaración fiscal de 2015 efectuada por los abogados del presidente electo y obtenida por la publicación Guidestar, que analiza informaciones tributarias.
La declaración en un documento de la agencia tributaria de Estados Unidos (IRS, por sus siglas en inglés) muestra que los representantes de Trump reconocieron haber desviado “ingresos o activos a una persona inhabilitada”, que podría ser el empresario o algún miembro de su imperio inmobiliario, y haber realizado prácticas similares en el pasado, según publica este martes el diario The Washington Post. Pero el documento no detalla ejemplos concretos y se desconoce si es el que se acabó enviando al IRS.
Violaciones de ese tipo pueden ser objeto de sanciones. La Fiscalía de Nueva York tiene abierta una investigación a la controvertida Fundación Trump después de que el Post publicara informaciones sobre posibles casos de desvío de fondos desde 2007. Por ejemplo, habría utilizado dinero de la fundación para cerrar acciones judiciales contra proyectos de sus empresas, desvinculados de su organización caritativa. En una subasta, la fundación también habría pagado por un retrato de Trump que cuelga en una de sus propiedades empresariales en Florida.
La admisión de una presumible irregularidad fiscal se conoce a los pocos días de que el multimillonario neoyorquino acordara pagar 25 millones de dólares para cerrar los casos por las acusaciones de negligencia en la Universidad Trump, que operó entre 2004 y 2010, y ofrecía cursos sobre negocios inmobiliarios y habilidades empresariales.
Ambas polémicas, de la fundación y la universidad, persiguieron a Trump durante la campaña electoral en que derrotó a la demócrata Hillary Clinton. El republicano parece querer enterrar cualquier controversia antes de su toma de posesión como presidente el 20 de enero.
Durante la campaña, Trump acusó a Clinton de utilizar con intereses personales y políticos la fundación del matrimonio presidencial. Sin embargo, la declaración fiscal de Trump también revela una fina línea entre los proyectos empresariales y caritativos del futuro mandatario.
La Fundación Trump recibió una donación de 150.000 dólares de la fundación del empresario ucranio Victor Pinchuk. El pago fue “en apoyo” a la intervención de Trump, en un discurso por vídeo, en una conferencia en septiembre de 2015 organizada por Pinchuk, según el diario The Wall Street Journal. Entonces, Trump ya era oficialmente un aspirante a ser el candidato republicano en las elecciones presidenciales del pasado noviembre.
El empresario ucranio, que amasó su fortuna en el sector energético y fue congresista, donó también al menos 8,6 millones de dólares a la Fundación Clinton. Como la candidata demócrata, Trump afronta ahora dudas sobre los conflictos de intereses entre sus actividades caritativas y sus ganancias personales. Para conocer las declaraciones fiscales de la Fundación Trump durante la campaña electoral habrá que esperar posiblemente un año.
Joan Faus
Corresponsal en Estados Unidos
Washington, El País
La fundación de Donald Trump ha admitido que violó la ley que prohíbe a organizaciones sin ánimo de lucro destinar fondos a fines propios o para ayudar a sus negocios o su familia. Así lo revela una declaración fiscal de 2015 efectuada por los abogados del presidente electo y obtenida por la publicación Guidestar, que analiza informaciones tributarias.
La declaración en un documento de la agencia tributaria de Estados Unidos (IRS, por sus siglas en inglés) muestra que los representantes de Trump reconocieron haber desviado “ingresos o activos a una persona inhabilitada”, que podría ser el empresario o algún miembro de su imperio inmobiliario, y haber realizado prácticas similares en el pasado, según publica este martes el diario The Washington Post. Pero el documento no detalla ejemplos concretos y se desconoce si es el que se acabó enviando al IRS.
Violaciones de ese tipo pueden ser objeto de sanciones. La Fiscalía de Nueva York tiene abierta una investigación a la controvertida Fundación Trump después de que el Post publicara informaciones sobre posibles casos de desvío de fondos desde 2007. Por ejemplo, habría utilizado dinero de la fundación para cerrar acciones judiciales contra proyectos de sus empresas, desvinculados de su organización caritativa. En una subasta, la fundación también habría pagado por un retrato de Trump que cuelga en una de sus propiedades empresariales en Florida.
La admisión de una presumible irregularidad fiscal se conoce a los pocos días de que el multimillonario neoyorquino acordara pagar 25 millones de dólares para cerrar los casos por las acusaciones de negligencia en la Universidad Trump, que operó entre 2004 y 2010, y ofrecía cursos sobre negocios inmobiliarios y habilidades empresariales.
Ambas polémicas, de la fundación y la universidad, persiguieron a Trump durante la campaña electoral en que derrotó a la demócrata Hillary Clinton. El republicano parece querer enterrar cualquier controversia antes de su toma de posesión como presidente el 20 de enero.
Durante la campaña, Trump acusó a Clinton de utilizar con intereses personales y políticos la fundación del matrimonio presidencial. Sin embargo, la declaración fiscal de Trump también revela una fina línea entre los proyectos empresariales y caritativos del futuro mandatario.
La Fundación Trump recibió una donación de 150.000 dólares de la fundación del empresario ucranio Victor Pinchuk. El pago fue “en apoyo” a la intervención de Trump, en un discurso por vídeo, en una conferencia en septiembre de 2015 organizada por Pinchuk, según el diario The Wall Street Journal. Entonces, Trump ya era oficialmente un aspirante a ser el candidato republicano en las elecciones presidenciales del pasado noviembre.
El empresario ucranio, que amasó su fortuna en el sector energético y fue congresista, donó también al menos 8,6 millones de dólares a la Fundación Clinton. Como la candidata demócrata, Trump afronta ahora dudas sobre los conflictos de intereses entre sus actividades caritativas y sus ganancias personales. Para conocer las declaraciones fiscales de la Fundación Trump durante la campaña electoral habrá que esperar posiblemente un año.