River gritó ante Rafaela y se desahogó en el Monumental
Buenos Aires, Clarín
Se desahogó River y se desahogó Andrés D'Alessandro. En el Monumental, el local no jugó bien pero pudo ganar ante Atlético de Rafaela por un gol del zurdo, de tiro libre, 21 minutos después de haber saltado al campo de juego. Marcelo Gallardo había decidido que el Cabezón fuera suplente y buscaba que su equipo reaccionara tras la derrota por 2-1 ante Patronato en Paraná.
El partido para River había empezado mucho antes de que Germán Delfino hiciera sonar su silbato en el Monumental. Gallardo lo había empezado a jugar este viernes cuando decidió dejar en el banco a D'Alessandro para que Gonzalo Martínez volviera al equipo y ratificar a Tomás Andrade entre los once. Toda una declaración de principios del entrenador.
Pero incluso este sábado el partido de River ante Atlético de Rafaela (llegaba de vencer a Racing) comenzaba antes de que rodara la pelota porque en la entrada en calor Ignacio Fernández sintió un pinchazo y se quedó afuera. Gallardo debió realizar un cambio de último momento y Camilo Mayada saltó al campo de juego. Ante la urgencia, la demora y el Muñeco se fue expulsado.
Todo eso que había pasado antes pareció mucho cuando la pelota se movió, porque adentro de la cancha pasó más bien poco en un primer tiempo en el que Delfino sacó cinco amarillas (a Ponzio y Maidana en el local; a Colombo, Campi y Costa en la visita).
Cada uno cumplió el rol que exigía la coyuntura: River con la pelota y la obligación de atacar; y Atlético de Rafaela a esperar por alguna contra. Fue claro el local cuando la pelota pasaba por Andrade y hasta logró desequilibrar con el Pity Martínez por la izquierda. Pero no generó peligro. Lo más claro fue un zurdazo del exHuracán que se fue muy cerca del ángulo. Andrade no logró asociarse con los de arriba y los de arriba no tuvieron peso en el área para golpear. Alario chocó y Driussi desentonó.
Y de a poco, la visita se empezó a animar. Gudiño por derecha y Borgnino por la izquierda complicaban. Costa peleaba con el desorientado Mina, pero perecía ante la fuerza física de Maidana. Y Luna no estaba fino. Pero a los 44, la Crema generó la situación más clara de gol: desbordó Borgnino y envió el centro atrás, Costa definió pero Batalla salvó a River y en el rebote Luna no le acertó al arco. El primer tiempo se fue con ese grito de gol atragantado.
Para el segundo tiempo Gallardo dispuso que Iván Rossi reemplazara a Mayada. El exBanfield debutaba en la Primera de River y el Muñeco seguía intentando enmendar el hueco que le había dejado Nacho Fernández. Pero el partido otra vez se hacía monótono.
River era previsible y Atlético de Rafaela cada vez se sentía más cómodo en ese libreto de esperar y contragolpear. Dos veces se tuvo que revolcar Batalla para evitar que le convirtieran. La primera ante Costa, que se abrió demasiado y se quedó sin ángulo. La segunda ante Luna, que controló mal y se le fue larga. La visita perdonaba.
A los 12, Gallardo recurrió a D'Alessandro. El zurdo a la cancha por Andrade y a jugar al ritmo del Cabezón. Le faltó precisión al local, aunque fue más prolijo para manejar la pelota en ese circuito que armaron Ponzio, Rossi y D'Alessandro. Pero Alario siguió siendo inofensivo, Martínez quedó aislado y Driussi le dejó su lugar a Iván Alonso, con la esperanza de pescar algún centro.
Lo salvó D'Alessandro a River. Porque el partido se moría con el cero a cero, pero el zurdo acertó un tiro libre a los 33 y desató el desahogo de un Monumental contenido y preocupado por la derrota en Paraná y por la falta de juego ante Rafaela. Fue cómplice el codo de Campi en la barrera que desvió el remate y desacomodó al arquero Lucas Hoyos.
Sobre el final se lució el ecuatoriano Mina (de muy pobre rendimiento) con un cierre espectacular en los pies de Costa adentro del área. River fue la zurda de D'Alessandro y fue triunfo 1-0. Apenas eso.
Se desahogó River y se desahogó Andrés D'Alessandro. En el Monumental, el local no jugó bien pero pudo ganar ante Atlético de Rafaela por un gol del zurdo, de tiro libre, 21 minutos después de haber saltado al campo de juego. Marcelo Gallardo había decidido que el Cabezón fuera suplente y buscaba que su equipo reaccionara tras la derrota por 2-1 ante Patronato en Paraná.
El partido para River había empezado mucho antes de que Germán Delfino hiciera sonar su silbato en el Monumental. Gallardo lo había empezado a jugar este viernes cuando decidió dejar en el banco a D'Alessandro para que Gonzalo Martínez volviera al equipo y ratificar a Tomás Andrade entre los once. Toda una declaración de principios del entrenador.
Pero incluso este sábado el partido de River ante Atlético de Rafaela (llegaba de vencer a Racing) comenzaba antes de que rodara la pelota porque en la entrada en calor Ignacio Fernández sintió un pinchazo y se quedó afuera. Gallardo debió realizar un cambio de último momento y Camilo Mayada saltó al campo de juego. Ante la urgencia, la demora y el Muñeco se fue expulsado.
Todo eso que había pasado antes pareció mucho cuando la pelota se movió, porque adentro de la cancha pasó más bien poco en un primer tiempo en el que Delfino sacó cinco amarillas (a Ponzio y Maidana en el local; a Colombo, Campi y Costa en la visita).
Cada uno cumplió el rol que exigía la coyuntura: River con la pelota y la obligación de atacar; y Atlético de Rafaela a esperar por alguna contra. Fue claro el local cuando la pelota pasaba por Andrade y hasta logró desequilibrar con el Pity Martínez por la izquierda. Pero no generó peligro. Lo más claro fue un zurdazo del exHuracán que se fue muy cerca del ángulo. Andrade no logró asociarse con los de arriba y los de arriba no tuvieron peso en el área para golpear. Alario chocó y Driussi desentonó.
Y de a poco, la visita se empezó a animar. Gudiño por derecha y Borgnino por la izquierda complicaban. Costa peleaba con el desorientado Mina, pero perecía ante la fuerza física de Maidana. Y Luna no estaba fino. Pero a los 44, la Crema generó la situación más clara de gol: desbordó Borgnino y envió el centro atrás, Costa definió pero Batalla salvó a River y en el rebote Luna no le acertó al arco. El primer tiempo se fue con ese grito de gol atragantado.
Para el segundo tiempo Gallardo dispuso que Iván Rossi reemplazara a Mayada. El exBanfield debutaba en la Primera de River y el Muñeco seguía intentando enmendar el hueco que le había dejado Nacho Fernández. Pero el partido otra vez se hacía monótono.
River era previsible y Atlético de Rafaela cada vez se sentía más cómodo en ese libreto de esperar y contragolpear. Dos veces se tuvo que revolcar Batalla para evitar que le convirtieran. La primera ante Costa, que se abrió demasiado y se quedó sin ángulo. La segunda ante Luna, que controló mal y se le fue larga. La visita perdonaba.
A los 12, Gallardo recurrió a D'Alessandro. El zurdo a la cancha por Andrade y a jugar al ritmo del Cabezón. Le faltó precisión al local, aunque fue más prolijo para manejar la pelota en ese circuito que armaron Ponzio, Rossi y D'Alessandro. Pero Alario siguió siendo inofensivo, Martínez quedó aislado y Driussi le dejó su lugar a Iván Alonso, con la esperanza de pescar algún centro.
Lo salvó D'Alessandro a River. Porque el partido se moría con el cero a cero, pero el zurdo acertó un tiro libre a los 33 y desató el desahogo de un Monumental contenido y preocupado por la derrota en Paraná y por la falta de juego ante Rafaela. Fue cómplice el codo de Campi en la barrera que desvió el remate y desacomodó al arquero Lucas Hoyos.
Sobre el final se lució el ecuatoriano Mina (de muy pobre rendimiento) con un cierre espectacular en los pies de Costa adentro del área. River fue la zurda de D'Alessandro y fue triunfo 1-0. Apenas eso.