Más de 6.000 migrantes rescatados y nueve muertos en el Canal de Sicilia
MSF denuncia que "muchas personas" han sufrido quemaduras causadas por la combustión de los motores de las embarcaciones
María Salas Oraá
Roma, El País
Justo tres años después de que la imagen de los centenares de ataúdes, muchos de ellos blancos, convirtieran el aeropuerto de la isla italiana de Lampedusa en una morgue, y de las palabras del papa Francisco sobre la "vergüenza" del drama de la migración, el Mediterráneo vive uno de sus rescates más numerosos en el que hay, de nuevo, nueve fallecidos.
La Guardia Costera italiana ha salvado a más de 6.000 migrantes en el Canal de Sicilia en 39 operaciones de salvamento realizadas este lunes, convertido en una de las jornadas con más rescatados. En total, los socorridos han sido 6.055 personas que partieron desde el norte de África utilizando todo tipo de embarcaciones, desde lanchas motoras hasta barcazas o pesqueros. El rescate masivo se debe, según explican los guardacostas, a que el mar ha estado en calma después de varios días de fuerte oleaje.
Coordinados por la Guardia Costera, las embarcaciones de la Marina Militar de Italia, del dispositivo comunitario EUNAVFORMED —destinado a combatir el negocio de la inmigración irregular de las mafias— y de organizaciones humanitarias como Médicos Sin Fronteras (MSF) han recuperado los cadáveres de nueve personas y ofrecido asistencia sanitaria urgente a una mujer embarazada, "agotada por el viaje", y a una niña de ocho años. Ambas han sido trasladadas en helicóptero a la isla siciliana de Lampedusa y permanecen hospitalizadas.
Entre los rescatados hay "muchos menores" y también heridos. MSF denuncia que "muchas personas" han sufrido quemaduras causadas por la combustión de los motores de las embarcaciones y otras han sido rescatadas directamente del agua y a punto de ahogarse.
Esta gran operación de salvamento, a la que los guardacostas se refieren como "una de las más numerosas desde que estalló la emergencia migratoria", coincide con la jornada que Italia dedica a la memoria de las víctimas de la inmigración. El 3 de octubre se recuerda la memoria de los centenares de muertos —muchos de ellos niños— que dejó el incendio de una barcaza repleta de migrantes en Lampedusa en 2013. Aunque los cuerpos recuperados fueron 366, se calcula que las víctimas, que en su mayoría procedían de Eritrea, pudieran llegar incluso al millar.
Precisamente para conmemorar esta fecha, que Italia dedica a "quien ha perdido la vida en el intento de emigrar para huir de la guerra, las persecuciones y la miseria", acudió a los actos celebrados en la isla el ministro del Interior italiano, Angelino Alfano, quien alertó de que "Europa no puede continuar mirando desde el balcón lo que ocurre en el Mediterráneo" y recordó que es un problema europeo y no solo italiano.
La presidenta de la Cámara de Diputados, Laura Boldrini, antigua portavoz de ACNUR, afirmó que "el recuerdo es útil, pero no suficiente cuando los números continúan siendo los de un desastre" y pidió la colaboración de todos los Estados miembros. "Italia continúa esforzándose con las operaciones de socorro, pero es necesario de que todos los estados de la Unión Europea compartan su parte de responsabilidad, al igual que comparten los recursos comunitarios cuando llegan", añadió.
María Salas Oraá
Roma, El País
Justo tres años después de que la imagen de los centenares de ataúdes, muchos de ellos blancos, convirtieran el aeropuerto de la isla italiana de Lampedusa en una morgue, y de las palabras del papa Francisco sobre la "vergüenza" del drama de la migración, el Mediterráneo vive uno de sus rescates más numerosos en el que hay, de nuevo, nueve fallecidos.
La Guardia Costera italiana ha salvado a más de 6.000 migrantes en el Canal de Sicilia en 39 operaciones de salvamento realizadas este lunes, convertido en una de las jornadas con más rescatados. En total, los socorridos han sido 6.055 personas que partieron desde el norte de África utilizando todo tipo de embarcaciones, desde lanchas motoras hasta barcazas o pesqueros. El rescate masivo se debe, según explican los guardacostas, a que el mar ha estado en calma después de varios días de fuerte oleaje.
Coordinados por la Guardia Costera, las embarcaciones de la Marina Militar de Italia, del dispositivo comunitario EUNAVFORMED —destinado a combatir el negocio de la inmigración irregular de las mafias— y de organizaciones humanitarias como Médicos Sin Fronteras (MSF) han recuperado los cadáveres de nueve personas y ofrecido asistencia sanitaria urgente a una mujer embarazada, "agotada por el viaje", y a una niña de ocho años. Ambas han sido trasladadas en helicóptero a la isla siciliana de Lampedusa y permanecen hospitalizadas.
Entre los rescatados hay "muchos menores" y también heridos. MSF denuncia que "muchas personas" han sufrido quemaduras causadas por la combustión de los motores de las embarcaciones y otras han sido rescatadas directamente del agua y a punto de ahogarse.
Esta gran operación de salvamento, a la que los guardacostas se refieren como "una de las más numerosas desde que estalló la emergencia migratoria", coincide con la jornada que Italia dedica a la memoria de las víctimas de la inmigración. El 3 de octubre se recuerda la memoria de los centenares de muertos —muchos de ellos niños— que dejó el incendio de una barcaza repleta de migrantes en Lampedusa en 2013. Aunque los cuerpos recuperados fueron 366, se calcula que las víctimas, que en su mayoría procedían de Eritrea, pudieran llegar incluso al millar.
Precisamente para conmemorar esta fecha, que Italia dedica a "quien ha perdido la vida en el intento de emigrar para huir de la guerra, las persecuciones y la miseria", acudió a los actos celebrados en la isla el ministro del Interior italiano, Angelino Alfano, quien alertó de que "Europa no puede continuar mirando desde el balcón lo que ocurre en el Mediterráneo" y recordó que es un problema europeo y no solo italiano.
La presidenta de la Cámara de Diputados, Laura Boldrini, antigua portavoz de ACNUR, afirmó que "el recuerdo es útil, pero no suficiente cuando los números continúan siendo los de un desastre" y pidió la colaboración de todos los Estados miembros. "Italia continúa esforzándose con las operaciones de socorro, pero es necesario de que todos los estados de la Unión Europea compartan su parte de responsabilidad, al igual que comparten los recursos comunitarios cuando llegan", añadió.