Boca alcanzó a rescatar un empate ante Tigre pero no pudo acercarse a la punta
Boca quería seguir con su pequeña y dulce primavera tras el 4-1 a Quilmes y la clasificación a cuartos de la Copa Argentina contra Lanús, y para ello tenía la difícil misión de ganar de visitante por el torneo local (nunca pudo con el actual entrenador) y cortar una racha negra ante Tigre en Victoria. No le fue fácil a los de Barros Schelotto y cosecharon un 1 a 1 que los alejó de la punta. Con muy poco, Tigre lo complicó y así quedaron con 8 puntos, a cinco del puntero Estudiantes y con seis equipos más por encima. En tanto, los locales aún no ganaron en el torneo y poseen tan sólo tres puntos en el torneo.
En tres minutos el partido mostró su carta de presentación de "movidito". Es que a los 60 segundos Benedetto -confiando- remató desde afuera y la pelota fue retenida en dos tiempos por Gabbarini. En la jugada posterior, Peruzzi desbordó, tocó para Pablo Pérez y su centro no pudo ser conectado por el nueve de Boca, quien se perdió una buena chance de arrancar ganando.
En la primera que tuvo Tigre se puso en ventaja. A los 3', Pablo Pérez -displicente en la salida desde su área- fue presionado por Diego Morales, que se la robó y le pegó frente a Sara. La floja respuesta del arquero también ayudó a la apertura del marcador: 1 a 0 y a Boca se le hizo cuesta arriba demasiado rápido.
Con un Boca apurado y Tigre tranquilo, el juego tuvo su ida y vuelta entretenido en ese primer tiempo, con chances y tenencia compartida. Fue así que a los 23' Lucas Janson perdió una clarísima para estirar la ventaja. Apareció solo y sin marca por detrás de todos en un centro y erró el cabezazo al lado del arco.
Un minuto después respondió Boca, pero Bentarcur erró el zapatazo. El volante enganchó bien ante la marca de Godoy pero pifió el remate: le dio más fuerza que dirección y se fue por arriba. A los 19' Benedetto disparó un derechazo cruzado tras pase del uruguayo, pero también eligió potencia en vez de colocación y su remate encontró las manos firmes del arquero local.
A los 32' lo tuvo Benedetto, otra vez. Con tiempo tras esquivar un rival, el goleador le pegó de nuevo cruzado de derecha y la pelota encontró el mismo final: las manos firmes de Gabbarini.
El segundo tiempo fue un poco más entretenido. El ida y vuelta se incrementó aún más por las necesidades del visitante y la disposición del local para contragolpear. A Boca le costó el cambio de ritmo, el juego asociado y erró mucho cuando tuvo sus chances, pero logró cosechar un empate que le cerró mejor que irse sin nada.
Otra vez a los tres minutos -y otra vez Janson-, Tigre tuvo el segundo, pero tras una apilada del volante entre camisetas de Boca, esta vez Sara salvó la caída de su arco. El rebote le quedó a Sebastián Rincón, pero el delantero estaba adelantado.
Fue el colombiano el que pudo aumentar a los seis, cuando su centro se convirtió de manera casual en disparo al arco que casi se le mete por detrás al arquero xeneize. A esa altura, Tigre merecía estar más tranquilo en el resultado.
Apesar de no ser claro, Boca nunca dejó de ir y buscar. A los 11', Silva cedió para Pavón, que apuntó de frente al arco y plantado desde un perfil inmejorable, pero no le apuntó al arco y el balón se fue lejos.
A los 31' Zuqui desaprovechó un regalo de Tigre cuando tardó en pegarle tras encontrar un mal pase y lo cerraron bien a la hora del remate. De ese córner se generaron tres situaciones más para los visitantes, pero todos los rebotes y disparos chocaban con las piernas de los dirigidos por Troglio.
Parecía que el empate estaba lejos. Es más, dos minutos después de esa situación Rincón dejó vivo a los visitantes. El colombiano quedó mano a mano con Sara y su disparo a colocar se fue apenas al lado del palo derecho del arquero.
Pero de tanto ir, Boca tendría su premio. A los treinta y seis, una pelota larga y frontal de Sebastián Pérez fue mal rechazada por Echeverría (pareció un delantero que bajó la pelota más que un defensor) y le quedó a Insaurralde, que con un zurdazo puso el 1 a 1 final.
Después del empate los de la Ribera tuvieron chances para quedarse con el partido. A los 38' Silva remató cruzado desde afuera del área: cerca. Y la mejor fue a los 42'. Centurión hizo todo bien menos el remate final. Picó habilitado tras un pase de Silva, encaró a la defensa, con un enganche dejó desparramado a su marcador y cuando el arquero le salió la tiró afuera. Insólito.
Tigre perdonó primero, Boca perdonó después. El resultado terminó siendo justo por lo hecho por ambos en los 90 minutos, pero ambos equipos se fueron con un sabor amargo y con un punto que huele a poco.
