Alepo sigue bajo los intensos bombardeos del régimen y Rusia
Siria, AFP
Aviones sirios y rusos bombardearon de nuevo hoy Alepo, donde los ataques aéreos contra los barrios rebeldes mataron a por lo menos 71 civiles en 48 horas permitiendo a las tropas de Damasco avanzar en esta ciudad del norte de Siria.
Ante la indignación internacional por la situación humanitaria en Alepo, Washington y Moscú --respectivos apoyos de los rebeldes y del régimen de Bashar al Asad-- anunciaron el miércoles dos reuniones internacionales para este fin de semana con el objetivo de arrancar un enésimo alto el fuego en la otrora capital económica de Siria.
Al alba, los barrios rebeldes del este de esta ciudad sufrieron una veintena de bombardeos. Al mismo tiempo las tropas gubernamentales avanzaban en el nordeste de Alepo, apoderándose de colinas desde las que se divisa las zonas en poder de los insurgentes, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El Observatorio no ha dado un balance de víctimas.
La televisión estatal siria dio cuenta por su parte de la muerte de cuatro niños por disparos de cohetes el jueves por la mañana que alcanzaron una escuela en la parte de Alepo controlada por el gobierno de Damasco.
Las fuerzas del presidente Bashar al Asad lanzaron el 22 de septiembre una ofensiva para recuperar toda la ciudad de Alepo, la antigua capital económica del país, dividida desde 2012 entre los barrios rebeldes y los prorrégimen.
La operación cuenta con el respaldo de la aviación de Rusia, que ha intensificado sus bombardeos al comienzo de la semana.
Siete niños figuran entre los 56 civiles muertos el martes en los barrios rebeldes, el miércoles otros 15 civiles murieron en ese sector, afirmó Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
"El balance ha aumentado porque muchas personas fallecieron como consecuencia de sus heridas y hay cuerpos todavía bloqueados bajo los escombros", añadió Rahman.
Los bombardeos rebeldes contra los barrios progubernamentales también mataron a ocho civiles entre martes y miércoles, informó el OSDH.
Aviones sirios y rusos bombardearon de nuevo hoy Alepo, donde los ataques aéreos contra los barrios rebeldes mataron a por lo menos 71 civiles en 48 horas permitiendo a las tropas de Damasco avanzar en esta ciudad del norte de Siria.
Ante la indignación internacional por la situación humanitaria en Alepo, Washington y Moscú --respectivos apoyos de los rebeldes y del régimen de Bashar al Asad-- anunciaron el miércoles dos reuniones internacionales para este fin de semana con el objetivo de arrancar un enésimo alto el fuego en la otrora capital económica de Siria.
Al alba, los barrios rebeldes del este de esta ciudad sufrieron una veintena de bombardeos. Al mismo tiempo las tropas gubernamentales avanzaban en el nordeste de Alepo, apoderándose de colinas desde las que se divisa las zonas en poder de los insurgentes, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El Observatorio no ha dado un balance de víctimas.
La televisión estatal siria dio cuenta por su parte de la muerte de cuatro niños por disparos de cohetes el jueves por la mañana que alcanzaron una escuela en la parte de Alepo controlada por el gobierno de Damasco.
Las fuerzas del presidente Bashar al Asad lanzaron el 22 de septiembre una ofensiva para recuperar toda la ciudad de Alepo, la antigua capital económica del país, dividida desde 2012 entre los barrios rebeldes y los prorrégimen.
La operación cuenta con el respaldo de la aviación de Rusia, que ha intensificado sus bombardeos al comienzo de la semana.
Siete niños figuran entre los 56 civiles muertos el martes en los barrios rebeldes, el miércoles otros 15 civiles murieron en ese sector, afirmó Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
"El balance ha aumentado porque muchas personas fallecieron como consecuencia de sus heridas y hay cuerpos todavía bloqueados bajo los escombros", añadió Rahman.
Los bombardeos rebeldes contra los barrios progubernamentales también mataron a ocho civiles entre martes y miércoles, informó el OSDH.