San Lorenzo superó a Vélez y sigue en alza
Le ganó 2-1 en el Nuevo Gasómetro, con goles de Blanco y Blandi. Tripichio había puesto el empate transitorio. El Ciclón, que venía de conseguir una heroica clasificación en la Sudamericana, llegó a siete puntos y se acomoda arriba en la tabla.
Buenos Aires, Clarín
San Lorenzo sigue creciendo. Con una clasificación épica en la Copa Sudamericana, con el frente abierto en la Copa Argentina y acomodado arriba en la tabla de posiciones del torneo local con este triunfo ante Vélez, más ajustado de lo que demostraron en el campo de juego.
Fue todo del Ciclón, que sufrió más de la cuenta pero volvió a festejar ante su público, en un duelo que cobró singular relevancia en las últimas dos décadas, tanto por lo futbolístico como por los hechos de violencia por enfrentamientos entre sus hinchadas.
En la cancha, quedó en evidencia la diferencia de jerarquía de los dos equipos. El Ciclón está en alza, en pleno crecimiento desde la llegada de Diego Aguirre; mientras que Vélez intenta conseguir regularidad con un equipo plagado de juveniles.
El primer tiempo fue un monólogo azulgrana. Con una dinámica fenomenal del medio hacia adelante: Tino Costa, Belluschi y Seba Blanco (de gran momento) no tenían un puesto fijo y flotaban por el frente de ataque.
Justamente Blanco capturó un pase horizontal y puso a San Lorenzo arriba con un golazo a los 11 minutos. Con la ventaja, el equipo de Aguirre se soltó aún más y Vélez no encontraba el rumbo: Somoza no lograba hacer pie en el medio y el local ya merecía ampliar el resultado. Lo tuvo Blandi, pero no alcanzó a definir.
El segundo tiempo se jugó en el mismo escenario. San Lorenzo con la pelota, el dominio y las situaciones. El equipo de Bassedas replegado y apostando a que sus tanques, Bracos y Pavone, lograran pivotear y generar peligro.
Y en una jugada aislada encontró el empate, tras un envío al área que despejó mal Corujo hacia el medio y Tripicihio aprovechó con un buen zurdazo contra el palo.
En ese momento, San Lorenzo tenía otro obstáculo por saltar. Y dio una muestra de carácter más en este gran presente. Reaccionó, fue a buscarlo, no se quedó en el empate injusto. Lo arrinconó a Vélez. Con el ingreso de Bergessio para sumar peso ofensivo y con el olfato goleador de Nicolás Blandi, que está en estado de gracia: capturó un rebote en el corazón del área la colgó en el ángulo de zurda.
Fue justo, por todo lo que había hecho el Ciclón, que mereció haber ganado con más comodidad. Un premio para un equipo que se va armando, que esta vez no contó con Ortigoza, su gran líder futbolístico, pero que sigue creciendo a fuerza de resultados.
Buenos Aires, Clarín
San Lorenzo sigue creciendo. Con una clasificación épica en la Copa Sudamericana, con el frente abierto en la Copa Argentina y acomodado arriba en la tabla de posiciones del torneo local con este triunfo ante Vélez, más ajustado de lo que demostraron en el campo de juego.
Fue todo del Ciclón, que sufrió más de la cuenta pero volvió a festejar ante su público, en un duelo que cobró singular relevancia en las últimas dos décadas, tanto por lo futbolístico como por los hechos de violencia por enfrentamientos entre sus hinchadas.
En la cancha, quedó en evidencia la diferencia de jerarquía de los dos equipos. El Ciclón está en alza, en pleno crecimiento desde la llegada de Diego Aguirre; mientras que Vélez intenta conseguir regularidad con un equipo plagado de juveniles.
El primer tiempo fue un monólogo azulgrana. Con una dinámica fenomenal del medio hacia adelante: Tino Costa, Belluschi y Seba Blanco (de gran momento) no tenían un puesto fijo y flotaban por el frente de ataque.
Justamente Blanco capturó un pase horizontal y puso a San Lorenzo arriba con un golazo a los 11 minutos. Con la ventaja, el equipo de Aguirre se soltó aún más y Vélez no encontraba el rumbo: Somoza no lograba hacer pie en el medio y el local ya merecía ampliar el resultado. Lo tuvo Blandi, pero no alcanzó a definir.
El segundo tiempo se jugó en el mismo escenario. San Lorenzo con la pelota, el dominio y las situaciones. El equipo de Bassedas replegado y apostando a que sus tanques, Bracos y Pavone, lograran pivotear y generar peligro.
Y en una jugada aislada encontró el empate, tras un envío al área que despejó mal Corujo hacia el medio y Tripicihio aprovechó con un buen zurdazo contra el palo.
En ese momento, San Lorenzo tenía otro obstáculo por saltar. Y dio una muestra de carácter más en este gran presente. Reaccionó, fue a buscarlo, no se quedó en el empate injusto. Lo arrinconó a Vélez. Con el ingreso de Bergessio para sumar peso ofensivo y con el olfato goleador de Nicolás Blandi, que está en estado de gracia: capturó un rebote en el corazón del área la colgó en el ángulo de zurda.
Fue justo, por todo lo que había hecho el Ciclón, que mereció haber ganado con más comodidad. Un premio para un equipo que se va armando, que esta vez no contó con Ortigoza, su gran líder futbolístico, pero que sigue creciendo a fuerza de resultados.