Líderes del planeta buscan una tregua en Siria y mejorar la economía mundial en la cumbre del G20
China, AFP
Los principales líderes del planeta dieron inicio a la cumbre del G20 con esperanzas de encontrar una “nueva senda” que guíe a la economía global a crecimientos más prósperos que los actuales y una tregua en Siria.
China organiza por primera vez este foro, la reunión internacional más importante en la historia del país, y el anfitrión, el presidente Xi Jinping, pidió a sus invitados que se centraran en la economía, pero sus ruegos quedaron eclipsados por la maratoniana actividad diplomática desarrollada en los márgenes de la cumbre.
Estados Unidos y Rusia aceleraron en Hangzhou las negociaciones para un alto el fuego en la guerra de Siria que permita aumentar el envío de ayuda humanitaria a ese país y sus respectivos presidentes, Barack Obama y Vladímir Putin, se reunirán mañana, lunes, en un encuentro que podría servir para ultimar los detalles de ese pacto.
El otro gran protagonista de la cumbre está siendo el presidente turco, Erdogan quien se reunió con Obama, con quien analizó estrategias conjuntas para combatir al Estado Islámico (EI) en Siria, y acercó posturas con la canciller alemana, Angela Merkel, tras entrevistarse en la víspera con Putin y Xi.
Al inaugurar la cita, Xi conminó a los participantes a hallar una “nueva senda” para el crecimiento que se materialice “acciones reales” y evite las “palabras vacías”, porque las amenazas para la economía mundial, dijo, se acumulan ocho años después de la crisis financiera internacional.
La tarea de los líderes del G20 en Hangzhou, destacó Xi, es “proporcionar una solución que corrija tanto los síntomas como las causas de raíz de los problemas económicos globales”. El mandatario chino instó a los participantes en la cumbre a coordinar sus políticas monetarias y fiscales.
Para terminar la jornada, los líderes del G20 se relajaron en el espectáculo de danza, música y fuegos artificiales, coordinado por el aclamado director de cine Zhang Yimou, que China ofreció como gala de bienvenida en el majestuoso Lago del Oeste de Hangzhou, un momento de tregua antes de retomar este lunes el serial de reuniones.
Los principales líderes del planeta dieron inicio a la cumbre del G20 con esperanzas de encontrar una “nueva senda” que guíe a la economía global a crecimientos más prósperos que los actuales y una tregua en Siria.
China organiza por primera vez este foro, la reunión internacional más importante en la historia del país, y el anfitrión, el presidente Xi Jinping, pidió a sus invitados que se centraran en la economía, pero sus ruegos quedaron eclipsados por la maratoniana actividad diplomática desarrollada en los márgenes de la cumbre.
Estados Unidos y Rusia aceleraron en Hangzhou las negociaciones para un alto el fuego en la guerra de Siria que permita aumentar el envío de ayuda humanitaria a ese país y sus respectivos presidentes, Barack Obama y Vladímir Putin, se reunirán mañana, lunes, en un encuentro que podría servir para ultimar los detalles de ese pacto.
El otro gran protagonista de la cumbre está siendo el presidente turco, Erdogan quien se reunió con Obama, con quien analizó estrategias conjuntas para combatir al Estado Islámico (EI) en Siria, y acercó posturas con la canciller alemana, Angela Merkel, tras entrevistarse en la víspera con Putin y Xi.
Al inaugurar la cita, Xi conminó a los participantes a hallar una “nueva senda” para el crecimiento que se materialice “acciones reales” y evite las “palabras vacías”, porque las amenazas para la economía mundial, dijo, se acumulan ocho años después de la crisis financiera internacional.
La tarea de los líderes del G20 en Hangzhou, destacó Xi, es “proporcionar una solución que corrija tanto los síntomas como las causas de raíz de los problemas económicos globales”. El mandatario chino instó a los participantes en la cumbre a coordinar sus políticas monetarias y fiscales.
Para terminar la jornada, los líderes del G20 se relajaron en el espectáculo de danza, música y fuegos artificiales, coordinado por el aclamado director de cine Zhang Yimou, que China ofreció como gala de bienvenida en el majestuoso Lago del Oeste de Hangzhou, un momento de tregua antes de retomar este lunes el serial de reuniones.