Una mujer muerta y cinco heridos por un ataque con cuchillo en el centro de Londres
La principal hipótesis de Scotland Yard es que el atacante tenía problemas mentales
María Contreras
Londres, El País
La policía ha arrestado en Londres a un hombre de 19 años sospechoso de matar con un cuchillo a una mujer y herir a otras cinco personas en Russell Square, en el centro de la capital británica, a última hora del miércoles. No ha trascendido de momento la motivación del atacante. El comandante de Scotland Yard Mark Rowley, uno de los más altos mandos antiterroristas, ha asegurado que la “salud mental” del hombre es un “factor significativo” del ataque y la “principal línea de investigación” sobre la que se trabaja, si bien no descarta la posibilidad de que se trate de un atentado terrorista. Fuentes policiales han informado que el sospechoso es de nacionalidad noruega con ascendencia somalí. Respecto a las víctimas, la mujer asesinada era estadounidense, y los heridos son de nacionalidades australiana, estadounidense, israelí y británica.
Scotland Yard recibió una llamada a las 22.33 (hora local), la primera de muchas que se produjeron en la media hora posterior al ataque, alertando de que un hombre tenía un cuchillo y que varias personas habían resultado heridas en Russell Square, en el lado oriental de la plaza, junto al hotel Imperial y muy cerca del Museo Británico. La policía llegó al lugar a los cinco minutos y, dos minutos más tarde, llegaron los servicios médicos. Encontraron a una mujer herida sobre el suelo. Se le practicaron los primeros auxilios, pero murió pocos minutos después. La mujer, según la policía, tenía alrededor de 60 años. También resultaron heridas otras cinco personas -dos mujeres y tres hombres-, tres de las cuales habían recibido ya el alta el jueves por la mañana.
El sospechoso fue arrestado a las 22.39. Un agente de policía empleó una pistola de electrochoque Taser para reducirlo. Varios testigos describen al sospechoso como un hombre con casco y atuendo de cuero negro de motorista. Después de ser atendido en el hospital, permanece bajo custodia policial. La brigada de homicidios de la policía está liderando la operación, con ayuda de la unidad antiterrorista.
“Las primeras indicaciones sugieren que la salud mental es un factor significativo en este caso, y esa es la principal línea de investigación. Por supuesto, en este punto debemos tener la mente abierta al considerar el motivo y, consecuentemente, el terrorismo como posible motivación sigue siendo una línea a explorar”, dijo el comandante Rowley, en una comparecencia pasadas las tres de la madrugada. Los londinenses, añadió, verán un aumento de la presencia policial en las calles, incluidos agentes armados, para “proporcionar seguridad”.
En un comunicado, la policía metropolitana indicó que ha reforzado la vigilancia en la zona. Los testigos hablan de una importante movilización policial y un cerco que se ha ido ampliando. Apenas unas horas antes, la policía británica había anunciado el despliegue de 600 agentes adicionales para reforzar la seguridad en Londres, tras los ataques en Francia y Alemania.
El nivel de amenaza terrorista en Reino Unido continúa siendo severo, el segundo más alto de una escala de cinco, que indica que un ataque es “altamente probable”.
El alcalde de Londres, Sadiq Khan, ha llamado este jueves a los ciudadanos a mantener la "calma" y a permanecer "vigilantes". "La seguridad de los londinenses es mi prioridad número uno", ha afirmado en un comunicado. "Por favor, notifiquen cualquier comportamiento sospechoso a la policía. Todos tenemos que desempeñar un papel crucial como ojos y oídos de nuestra policía y nuestros servicios de seguridad y para asegurar que Londres está protegida".
Russell Square es un importante centro cultural de Londres, flanquedo por el imponente Museo Británico, y una zona turística con hoteles y tiendas de suvenires.
La fuerte presencia policial inevitablemente hizo a muchos vecinos recordar los ataques terroristas del 7 de julio de 2005, cuando una cadena de atentados suicidas en la red de transporte público dejó 52 personas muertas y más de 700 heridas. El más grave de los ataques de aquel día se produjo precisamente en la línea Piccadilly del metro, entre Kings Cross y Russell Square, donde perdieron la vida 26 personas.
La policía ha acordonado el área durante toda la noche, pero la mayoría de los cordones fueron levantados durante la mañana, quedando solo el cierre parcial al tráfico de una calle.
María Contreras
Londres, El País
La policía ha arrestado en Londres a un hombre de 19 años sospechoso de matar con un cuchillo a una mujer y herir a otras cinco personas en Russell Square, en el centro de la capital británica, a última hora del miércoles. No ha trascendido de momento la motivación del atacante. El comandante de Scotland Yard Mark Rowley, uno de los más altos mandos antiterroristas, ha asegurado que la “salud mental” del hombre es un “factor significativo” del ataque y la “principal línea de investigación” sobre la que se trabaja, si bien no descarta la posibilidad de que se trate de un atentado terrorista. Fuentes policiales han informado que el sospechoso es de nacionalidad noruega con ascendencia somalí. Respecto a las víctimas, la mujer asesinada era estadounidense, y los heridos son de nacionalidades australiana, estadounidense, israelí y británica.
Scotland Yard recibió una llamada a las 22.33 (hora local), la primera de muchas que se produjeron en la media hora posterior al ataque, alertando de que un hombre tenía un cuchillo y que varias personas habían resultado heridas en Russell Square, en el lado oriental de la plaza, junto al hotel Imperial y muy cerca del Museo Británico. La policía llegó al lugar a los cinco minutos y, dos minutos más tarde, llegaron los servicios médicos. Encontraron a una mujer herida sobre el suelo. Se le practicaron los primeros auxilios, pero murió pocos minutos después. La mujer, según la policía, tenía alrededor de 60 años. También resultaron heridas otras cinco personas -dos mujeres y tres hombres-, tres de las cuales habían recibido ya el alta el jueves por la mañana.
El sospechoso fue arrestado a las 22.39. Un agente de policía empleó una pistola de electrochoque Taser para reducirlo. Varios testigos describen al sospechoso como un hombre con casco y atuendo de cuero negro de motorista. Después de ser atendido en el hospital, permanece bajo custodia policial. La brigada de homicidios de la policía está liderando la operación, con ayuda de la unidad antiterrorista.
“Las primeras indicaciones sugieren que la salud mental es un factor significativo en este caso, y esa es la principal línea de investigación. Por supuesto, en este punto debemos tener la mente abierta al considerar el motivo y, consecuentemente, el terrorismo como posible motivación sigue siendo una línea a explorar”, dijo el comandante Rowley, en una comparecencia pasadas las tres de la madrugada. Los londinenses, añadió, verán un aumento de la presencia policial en las calles, incluidos agentes armados, para “proporcionar seguridad”.
En un comunicado, la policía metropolitana indicó que ha reforzado la vigilancia en la zona. Los testigos hablan de una importante movilización policial y un cerco que se ha ido ampliando. Apenas unas horas antes, la policía británica había anunciado el despliegue de 600 agentes adicionales para reforzar la seguridad en Londres, tras los ataques en Francia y Alemania.
El nivel de amenaza terrorista en Reino Unido continúa siendo severo, el segundo más alto de una escala de cinco, que indica que un ataque es “altamente probable”.
El alcalde de Londres, Sadiq Khan, ha llamado este jueves a los ciudadanos a mantener la "calma" y a permanecer "vigilantes". "La seguridad de los londinenses es mi prioridad número uno", ha afirmado en un comunicado. "Por favor, notifiquen cualquier comportamiento sospechoso a la policía. Todos tenemos que desempeñar un papel crucial como ojos y oídos de nuestra policía y nuestros servicios de seguridad y para asegurar que Londres está protegida".
Russell Square es un importante centro cultural de Londres, flanquedo por el imponente Museo Británico, y una zona turística con hoteles y tiendas de suvenires.
La fuerte presencia policial inevitablemente hizo a muchos vecinos recordar los ataques terroristas del 7 de julio de 2005, cuando una cadena de atentados suicidas en la red de transporte público dejó 52 personas muertas y más de 700 heridas. El más grave de los ataques de aquel día se produjo precisamente en la línea Piccadilly del metro, entre Kings Cross y Russell Square, donde perdieron la vida 26 personas.
La policía ha acordonado el área durante toda la noche, pero la mayoría de los cordones fueron levantados durante la mañana, quedando solo el cierre parcial al tráfico de una calle.