Obispos de Bolivia claman: "En nombre de Dios, ¡deténganse!

La Paz, Erbol
La Conferencia Episcopal de Bolivia (CEP) ha lanzado un clamoroso llamado para que las partes en conflicto detengan la violencia que ha provocado al menos tres muertes esta semana y ha pedido que la justicia identifique a los responsables, los que no deben esconderse detrás del anonimato grupal.
"En nombre de Dios, ¡Deténganse!. No podemos ceder irresponsablemente a la lógica perversa de la violencia, con presiones irracionales, agresiones criminales, confrontaciones y represalias", claman los obispos mediante un comunicado.
En ese marco, indicaron que "la administración de justicia tiene en estos momentos una grave responsabilidad ya que tiene la obligación de esclarecer las muertes y agresiones con transparencia, idoneidad y objetividad".



Agregan que "los crímenes que se han sucedido tienen autores individuales, por más que intenten esconderse detrás del anonimato grupal".

Los prelados indican que "el país demanda urgentemente de sus autoridades y de todos los sectores movilizados predisposición sincera y capacidad de diálogo responsable".

Los obispos también elevan sus oraciones "al señor de la vida, para pedirle perdón por la muerte y dolor que se ha provocado y para pedirle que nos ilumine para ser capaces de reconciliación entre todos".

Desde el martes los cooperativistas mineros protagonizaron un bloqueo de carreteras que dejó un saldo de al menos tres muertos, entre ellos dos mineros y el viceministro Rodolfo Illanes, aunque los dirigentes aseguran que los fallecidos de su lado son tres.

El viceministro Illanes fue asesinado a golpes la tarde de ayer luego de permanecer secuestrado en la población de Panduro, en la carretera La Paz-Oruro.

Ante estos hechos, los obispos parafrasean al papa Francisco, quien durante esta jornada dijo: Hay una palabra que nunca podemos cansarnos de repetir y sobre todo de dar testimonio: diálogo".

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