Morales convoca a embajador en Brasil tras destitución de Dilma
Página Siete Digital / La Paz
A tiempo de condenar lo que denomina como un "golpe parlamentario”, el presidente Evo Morales convocó hoy al embajador de Bolivia en Brasil, José Kinn, para asumir las medidas que corresponden tras la destitución de la presidenta Dilma Rousseff.
"Estamos convocando a nuestro embajador en Brasil para asumir las medidas que en este momento se aconsejan”, expresó el mandatario a través de su cuenta de Twitter.
También indicó que condena "el golpe parlamentario contra la democracia brasileña. Acompañamos a Dilma, Lula y su pueblo en esta hora difícil”.
En tanto, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, decidió retirar hoy a su máximo representante diplomático en Brasil, tras la destitución de la presidenta Dilma Rousseff. "Destituyeron a Dilma. Una apología al abuso y la traición. Retiraremos nuestro encargado (de negocios) de la embajada" en Brasilia, escribió el mandatario en Twitter.
En mayo, Quito llamó a consultas a su embajador en Brasil, Horacio Sevilla, que desde entonces no volvió al puesto y en junio fue nombrado representante permanente de Ecuador ante Naciones Unidas, según AFP.
El gobierno venezolano de Nicolás Maduro anunció el retiro de su embajador y el congelamiento de sus relaciones con Brasil al condenar "enérgicamente" la destitución este miércoles de la presidenta Dilma Rousseff con un "golpe de Estado parlamentario".
Venezuela "ha decidido retirar definitivamente a su embajador" en Brasil, Alberto Castellar, "y congelar las relaciones políticas y diplomáticas con el gobierno surgido de este golpe parlamentario", subrayó la cancillería, en un comunicado.
La presidenta de Brasil Dilma Rousseff fue destituida por el Senado este miércoles y minutos después asumió el poder su exvicepresidente y máximo enemigo, Michel Temer.
El Senado aprobó la destitución de Rousseff con 61 votos a favor y 20 en contra, sin abstenciones. Rousseff, en el poder desde el 1 de enero de 2011, fue suspendida en mayo de este año para ser juzgada por maquillaje de las cuentas públicas para asegurar su reelección en 2014 y continuar con esa práctica al año siguiente.
A tiempo de condenar lo que denomina como un "golpe parlamentario”, el presidente Evo Morales convocó hoy al embajador de Bolivia en Brasil, José Kinn, para asumir las medidas que corresponden tras la destitución de la presidenta Dilma Rousseff.
"Estamos convocando a nuestro embajador en Brasil para asumir las medidas que en este momento se aconsejan”, expresó el mandatario a través de su cuenta de Twitter.
También indicó que condena "el golpe parlamentario contra la democracia brasileña. Acompañamos a Dilma, Lula y su pueblo en esta hora difícil”.
En tanto, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, decidió retirar hoy a su máximo representante diplomático en Brasil, tras la destitución de la presidenta Dilma Rousseff. "Destituyeron a Dilma. Una apología al abuso y la traición. Retiraremos nuestro encargado (de negocios) de la embajada" en Brasilia, escribió el mandatario en Twitter.
En mayo, Quito llamó a consultas a su embajador en Brasil, Horacio Sevilla, que desde entonces no volvió al puesto y en junio fue nombrado representante permanente de Ecuador ante Naciones Unidas, según AFP.
El gobierno venezolano de Nicolás Maduro anunció el retiro de su embajador y el congelamiento de sus relaciones con Brasil al condenar "enérgicamente" la destitución este miércoles de la presidenta Dilma Rousseff con un "golpe de Estado parlamentario".
Venezuela "ha decidido retirar definitivamente a su embajador" en Brasil, Alberto Castellar, "y congelar las relaciones políticas y diplomáticas con el gobierno surgido de este golpe parlamentario", subrayó la cancillería, en un comunicado.
La presidenta de Brasil Dilma Rousseff fue destituida por el Senado este miércoles y minutos después asumió el poder su exvicepresidente y máximo enemigo, Michel Temer.
El Senado aprobó la destitución de Rousseff con 61 votos a favor y 20 en contra, sin abstenciones. Rousseff, en el poder desde el 1 de enero de 2011, fue suspendida en mayo de este año para ser juzgada por maquillaje de las cuentas públicas para asegurar su reelección en 2014 y continuar con esa práctica al año siguiente.