La china Shi Tingmao gana el oro en trampolín de 3 metros
La campeona mundial Shi Tingmao obtuvo elevadas calificaciones desde la primera ronda para ganar este domingo la medalla de oro de la final de trampolín de 3 metros del concurso femenino de saltos de los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Como en los Mundiales del año pasado en Kazán, Rusia, Tingmao ganó el oro este domingo, con 406.05 puntos, seguida de su compatriota He Zi (387.90) y de la italiana Tania Cagnotto (372.80).
En la vuelta inicial, Tingmao se apareció con un clavado de dos vueltas y media inversas, de 3.0 de grado de dificultad y obtuvo la misma puntuación que He Zi, con el mismo salto.
Las chinas volvieron a recibir las mismas calificaciones en su siguiente demostración, 3,5 vueltas hacia adelante, de 3.1, pero en la tercera ronda Tingmauo coleccionó notas de 9.0 y 9,5 con sus dos vueltas y media de espalda y se enfiló a la medalla de oro.
Con la corona asegurada para la monarca del mundo, la otra china sacó su arte y se hizo de la presea de plata, seguida de Cagnotto, quien cerró bien con 2,5 vueltas y media de espalda y se hizo del bronce.
Con la victoria, Shi Tingmao se convirtió en la tercera mujer que gana en unos mismos Juegos Olímpicos la medalla de oro en saltos sincronizados y en la final individual de trampolín de tres metros, después de sus compatriotas Guo Jingjing, en Atenas 2004 y Pekín 2008 y Wu Minxia, en Londres 2012.
Después de cinco finales, China domina la competición de saltos de los Juegos Olímpicos con cuatro medallas de oro, una de plata y una de bronce, seguida de Gran Bretaña (1-0-1), Estados Unidos (0-2-0), Italia (0-1-1) y Malasia (0-1-0).
Río de Janeiro, 14 ago (EFE).- Nada más recibir la medalla de plata, He Zi se encontró con la sorpresa de la visita de su novio, que le pidió matrimonio delante del público presente en el centro acuático Maria Lenk.
Tras la ceremonia de entrega de medallas, He Zi, de 25 años y que hace cuatro años ganó el oro en esta misma prueba en Londres, escuchó atentamente el largo discurso de su novio, que acto seguido le entregó, rodilla en tierra, una sortija y una flor. Ella, muy emocionada, le dio el sí.
