El desempleo aumenta en Argentina durante los primeros meses de gestión de Macri
Las estadísticas oficiales recuperadas después de la manipulación de los Kirchner dicen que la subida se acerca al 10%
Ramiro Barreiro
Buenos Aires, El País
El desempleo vuelve a ser un tema que preocupa en Argentina. Hasta el Papa Francisco ha mostrado su inquietud. Cristina Fernández lo usa casi como muletilla en cada aparición pública. Ahora los datos oficiales lo confirman. La agencia de estadísticas oficial (Indec) ha vuelto a difundir las cifras de paro después de revisar por completo durante meses los índices de la etapa kirchnerista, que estaban desacreditados por las denuncias de manipulación de los propios trabajadores. Y la primera cifra oficial del macrismo es superior a cualquiera de las registradas en los últimos años: 9,3%.
En noviembre de 2015, cuando el organismo nadaba en un mar de críticas, el Indec midió un paro del 5,9%. Si se comparan los guarismos actuales con aquellos, la cifra representa un incremento de casi medio millón de personas desempleadas, que suman en total, 1.165.000 personas. El incremento es de casi 3,5%. Si la comparación se efectúa con igual trimestre del año pasado, el incremento en el índice de desempleo es de 2,7%, ya que en el período abril-junio había sido del 6,6%. Las cifras más altas de desempleo corresponden al Gran Rosario (11,7%); Mar del Plata (11,6%); Gran Córdoba (11,5%); partidos del GBA (11,2%); Río Cuarto (10,5%). Asimismo, el Índice de Subocupación Demandante (personas que tienen un empleo pero buscan otro) alcanzó el 7,7% y la No Demandante el 3,5% en el mismo período.
En diciembre pasado, el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, anunció la emergencia estadística, hecho que ha impedido que hasta mayo de 2016 se publique el índice de precios para el consumidor (IPC), ni se pueda comparar las cifras hasta ahora difundidas con las del mismo período pero de años anteriores. “No se incluyen datos de trimestres anteriores dado que, conforme a la emergencia estadística, el Indec ha dispuesto que las series publicadas con posterioridad al primer trimestre de 2007 y hasta el cuarto trimestre de 2015, deben ser consideradas con reservas”, aclaró el ente estadístico este martes.
En tanto, el IPC de junio, que marcó una suba del 3,1% ha superado las mediciones privadas que ya habían indicado que este año se marcó la inflación más alta de la última década y media. En consecuencia, las mediciones se alejan de las aspiraciones del presidente Mauricio Macri de cerrar 2016 con una inflación de entre 25 y 28%.
“El 9,3 del empleo registrado sin dudas es preocupante”, señaló Héctor Omar García, asesor en temas laborales de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) que lidera Hugo Yasky. La central obrera ha anunciado una movilización para el 31 de agosto. “Tenemos que tener en cuenta que más o menos un 40% de la clase trabajadora está en el trabajo informal; entonces, si sumamos las dos cosas tenemos que la situación del mercado laboral argentino es súper preocupante”, añadió.
“La perspectiva que hay en la economía da la impresión de que puede seguir subiendo. El marco externo no está claro y el destino de nuestras exportaciones es en mayor medida a Brasil, que atraviesa una situación floja. La inflación tendrá solución, con suerte, en un mediano plazo y hay importaciones que están complicando a la industria como la de los neumáticos, por citar un sólo ejemplo”, analizó el especialista.
Durante el primer trimestre de 2002 se han perdido en Argentina 60.000 puestos de trabajo en un mes (mayo) y la desocupación alcanzó el 23,6%. “De ninguna manera creo que la situación sea comparable a la de 2002”, afirmó el analista, “pero si podemos tener una situación análoga a lo que se dio en los mercados de trabajo europeos. Un desempleo en una tasa que ronda el 10% y se consolida en un periodo bastante extenso, con crecimiento de la temporalidad o rotación de los puestos de trabajo, lo cual da una sensación de inestabilidad laboral”.
Fuentes del ministerio de Trabajo indicaron a EL PAÍS que las cifras “van en línea con la postura de decirle la verdad a los argentinos; el dato no es nuevo y coincide con la encuesta que elaboró la gestión anterior en 2015 y con los que dio la Universidad Católica Argentina en diciembre” y que “existen dos sectores en tensión y uno de ellos que es la construcción ya está reactivando”.
Ramiro Barreiro
Buenos Aires, El País
El desempleo vuelve a ser un tema que preocupa en Argentina. Hasta el Papa Francisco ha mostrado su inquietud. Cristina Fernández lo usa casi como muletilla en cada aparición pública. Ahora los datos oficiales lo confirman. La agencia de estadísticas oficial (Indec) ha vuelto a difundir las cifras de paro después de revisar por completo durante meses los índices de la etapa kirchnerista, que estaban desacreditados por las denuncias de manipulación de los propios trabajadores. Y la primera cifra oficial del macrismo es superior a cualquiera de las registradas en los últimos años: 9,3%.
En noviembre de 2015, cuando el organismo nadaba en un mar de críticas, el Indec midió un paro del 5,9%. Si se comparan los guarismos actuales con aquellos, la cifra representa un incremento de casi medio millón de personas desempleadas, que suman en total, 1.165.000 personas. El incremento es de casi 3,5%. Si la comparación se efectúa con igual trimestre del año pasado, el incremento en el índice de desempleo es de 2,7%, ya que en el período abril-junio había sido del 6,6%. Las cifras más altas de desempleo corresponden al Gran Rosario (11,7%); Mar del Plata (11,6%); Gran Córdoba (11,5%); partidos del GBA (11,2%); Río Cuarto (10,5%). Asimismo, el Índice de Subocupación Demandante (personas que tienen un empleo pero buscan otro) alcanzó el 7,7% y la No Demandante el 3,5% en el mismo período.
En diciembre pasado, el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, anunció la emergencia estadística, hecho que ha impedido que hasta mayo de 2016 se publique el índice de precios para el consumidor (IPC), ni se pueda comparar las cifras hasta ahora difundidas con las del mismo período pero de años anteriores. “No se incluyen datos de trimestres anteriores dado que, conforme a la emergencia estadística, el Indec ha dispuesto que las series publicadas con posterioridad al primer trimestre de 2007 y hasta el cuarto trimestre de 2015, deben ser consideradas con reservas”, aclaró el ente estadístico este martes.
En tanto, el IPC de junio, que marcó una suba del 3,1% ha superado las mediciones privadas que ya habían indicado que este año se marcó la inflación más alta de la última década y media. En consecuencia, las mediciones se alejan de las aspiraciones del presidente Mauricio Macri de cerrar 2016 con una inflación de entre 25 y 28%.
“El 9,3 del empleo registrado sin dudas es preocupante”, señaló Héctor Omar García, asesor en temas laborales de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) que lidera Hugo Yasky. La central obrera ha anunciado una movilización para el 31 de agosto. “Tenemos que tener en cuenta que más o menos un 40% de la clase trabajadora está en el trabajo informal; entonces, si sumamos las dos cosas tenemos que la situación del mercado laboral argentino es súper preocupante”, añadió.
“La perspectiva que hay en la economía da la impresión de que puede seguir subiendo. El marco externo no está claro y el destino de nuestras exportaciones es en mayor medida a Brasil, que atraviesa una situación floja. La inflación tendrá solución, con suerte, en un mediano plazo y hay importaciones que están complicando a la industria como la de los neumáticos, por citar un sólo ejemplo”, analizó el especialista.
Durante el primer trimestre de 2002 se han perdido en Argentina 60.000 puestos de trabajo en un mes (mayo) y la desocupación alcanzó el 23,6%. “De ninguna manera creo que la situación sea comparable a la de 2002”, afirmó el analista, “pero si podemos tener una situación análoga a lo que se dio en los mercados de trabajo europeos. Un desempleo en una tasa que ronda el 10% y se consolida en un periodo bastante extenso, con crecimiento de la temporalidad o rotación de los puestos de trabajo, lo cual da una sensación de inestabilidad laboral”.
Fuentes del ministerio de Trabajo indicaron a EL PAÍS que las cifras “van en línea con la postura de decirle la verdad a los argentinos; el dato no es nuevo y coincide con la encuesta que elaboró la gestión anterior en 2015 y con los que dio la Universidad Católica Argentina en diciembre” y que “existen dos sectores en tensión y uno de ellos que es la construcción ya está reactivando”.