Los 5 futbolistas que jugaron en el Real Madrid y en el PSG
Di María, Makélélé, Beckham, Anelka y Heinze han sido los cinco jugadores que han vestido las camisetas del Madrid y del PSG
Gonzalo Castro, As
Solamente cinco jugadores han tenido la oportunidad en toda la historia del fútbol de vestir las camisetas del Real Madrid y del PSG. Ponerse, a lo largo de una carrera, la elástica de los clubes más importantes de España y Francia. Dos argentinos, dos franceses y un inglés. Estos son los cinco privilegiados:
Ángel Di María, conocido entre los madridistas como el Fideo, se convirtió en un pilar fundamental en el medio del campo de Ancelotti y, sobre todo, en aquella final de Lisboa en la que fue elegido como el mejor jugador. El Madrid consiguió al fin la ansiada Décima y el 22 blanco fue una pieza clave en su consecución. Aunque para muchos merengues su recuerdo más bonito de Di María es chutando a puerta justo antes de que Bale empujara a gol el segundo ante el Atleti, el primer recuerdo de muchos otros fue antes. En la final de la Copa del Rey y ante el eterno rival. Di María brindó a Cristiano un balón perfecto para que el portugués rematará de cabeza y batiera a Pinto. El Madrid de Mourinho ganaba la Copa del Rey al Barcelona de Guardiola. Ángel Di María consiguió de blanco dos Copas, una Liga, una Supercopa de España, una Supercopa de Europa y una Champions. El verano de 2014 puso rumbo a Manchester y al año siguiente viajó hacia París.
Vicente del Bosque encontró en Makélélé el eje del medio del campo madridista entre el 2000 y el 2003. Cuántas veces se ha escuchado eso de "el Madrid no volverá a encontrar al nuevo Makélélé". Y es verdad. Equilibrio y solidez en la medular del Bernabéu. Desde 2008 y hasta su retirada en 2011, vistió la camiseta parisina. Tras colgar las botas, siguió unido al conjunto de la capital francesa desde los despachos. Con el Madrid, Makélélé añadió a sus vitrinas trofeos como dos Ligas, dos Supercopas de España, una Champions, una Supercopa de Europa y una Copa Intercontinental.
Sus primeros pinitos en España llegaron con la camiseta blanquivioleta del Real Valladolid. Pronto dio el paso al fútbol europeo y recaló en las filas del PSG. Tres temporadas en Francia y otras tres en el Manchester United, antes de desembarcar en el Real Madrid. Jugó en el Bernabéu dos temporadas. Heinze consiguió una Liga Española y una Supercopa de España.
El Real Madrid lo fichó en 1999 y sólo duró un año. Año muy discreto en el que no encajó ni con la afición blanca, ni con sus compañeros, ni con el propio Vicente del Bosque. A pesar de ello, recobró la titularidad a final de temporada y marcó goles importantes en las semifinales de la Champions ante el Bayern de Múnich y jugó de titular la final del 2000. Ese mismo verano fue declarado transferible. Anelka jugó en el Parque de los Príncipes en sus inicios en el 1995 y regresó a la capital francesa en el 2005.
Después de 12 años en la Premier League, David Beckham se convirtió en el cuarto Galáctico de Florentino Pérez en 2003. Como blanco, el inglés disputó un total de 155 partidos y anotó 20 goles. Con el retiro de Zidane, la llegada de Capello al banquillo, y el fichaje de jugadores como Cannavaro, Van Nistelrooy y Diarra para encarar la temporada 2006/07, Beckham pasó a segundo plano, y no fue considerado en los planes del italiano. Con el Real Madrid consiguió una Liga Española y una Supercopa de España. Su último año como profesional lo pasó en París en la temporada 2012-13.
Solamente cinco jugadores han tenido la oportunidad en toda la historia del fútbol de vestir las camisetas del Real Madrid y del PSG. Ponerse, a lo largo de una carrera, la elástica de los clubes más importantes de España y Francia. Dos argentinos, dos franceses y un inglés. Estos son los cinco privilegiados:
Ángel Di María, conocido entre los madridistas como el Fideo, se convirtió en un pilar fundamental en el medio del campo de Ancelotti y, sobre todo, en aquella final de Lisboa en la que fue elegido como el mejor jugador. El Madrid consiguió al fin la ansiada Décima y el 22 blanco fue una pieza clave en su consecución. Aunque para muchos merengues su recuerdo más bonito de Di María es chutando a puerta justo antes de que Bale empujara a gol el segundo ante el Atleti, el primer recuerdo de muchos otros fue antes. En la final de la Copa del Rey y ante el eterno rival. Di María brindó a Cristiano un balón perfecto para que el portugués rematará de cabeza y batiera a Pinto. El Madrid de Mourinho ganaba la Copa del Rey al Barcelona de Guardiola. Ángel Di María consiguió de blanco dos Copas, una Liga, una Supercopa de España, una Supercopa de Europa y una Champions. El verano de 2014 puso rumbo a Manchester y al año siguiente viajó hacia París.
Vicente del Bosque encontró en Makélélé el eje del medio del campo madridista entre el 2000 y el 2003. Cuántas veces se ha escuchado eso de "el Madrid no volverá a encontrar al nuevo Makélélé". Y es verdad. Equilibrio y solidez en la medular del Bernabéu. Desde 2008 y hasta su retirada en 2011, vistió la camiseta parisina. Tras colgar las botas, siguió unido al conjunto de la capital francesa desde los despachos. Con el Madrid, Makélélé añadió a sus vitrinas trofeos como dos Ligas, dos Supercopas de España, una Champions, una Supercopa de Europa y una Copa Intercontinental.
Sus primeros pinitos en España llegaron con la camiseta blanquivioleta del Real Valladolid. Pronto dio el paso al fútbol europeo y recaló en las filas del PSG. Tres temporadas en Francia y otras tres en el Manchester United, antes de desembarcar en el Real Madrid. Jugó en el Bernabéu dos temporadas. Heinze consiguió una Liga Española y una Supercopa de España.
El Real Madrid lo fichó en 1999 y sólo duró un año. Año muy discreto en el que no encajó ni con la afición blanca, ni con sus compañeros, ni con el propio Vicente del Bosque. A pesar de ello, recobró la titularidad a final de temporada y marcó goles importantes en las semifinales de la Champions ante el Bayern de Múnich y jugó de titular la final del 2000. Ese mismo verano fue declarado transferible. Anelka jugó en el Parque de los Príncipes en sus inicios en el 1995 y regresó a la capital francesa en el 2005.
Después de 12 años en la Premier League, David Beckham se convirtió en el cuarto Galáctico de Florentino Pérez en 2003. Como blanco, el inglés disputó un total de 155 partidos y anotó 20 goles. Con el retiro de Zidane, la llegada de Capello al banquillo, y el fichaje de jugadores como Cannavaro, Van Nistelrooy y Diarra para encarar la temporada 2006/07, Beckham pasó a segundo plano, y no fue considerado en los planes del italiano. Con el Real Madrid consiguió una Liga Española y una Supercopa de España. Su último año como profesional lo pasó en París en la temporada 2012-13.
