Casi un millón de rusos piden la disolución de la selección
EFE
Casi un millón de rusos han pedido ya la disolución de la selección nacional de fútbol después de que ésta fuera eliminada en la primera fase de la pasada Eurocopa de Francia tras sumar un solo punto.
"Disolver la selección de fútbol de Rusia. Queremos enorgullecernos, no avergonzarnos", reza la petición colgada en Change.org y dirigida, entre otros, al presidente ruso, Vladímir Putin.
Los aficionados consideran que los actuales futbolistas internacionales "no han cumplido con las expectativas" después de clasificarse sorprendentemente para la Eurocopa tras la renuncia del italiano Fabio Capello.
Rusia fue tachado como uno de los peores equipos de la Eurocopa al empatar en el último suspiro ante Inglaterra y caer ante Eslovaquia (1-2) y Gales (0-3), lo que precipitó la dimisión del seleccionador, Leonid Slutski.
Los firmantes de la petición exigen imponer restricciones a los presupuestos de los clubes y levantar las limitaciones al número de legionarios que pueden militar en la liga rusa, aduciendo que es la única forma de aumentar la competencia.
El éxito de la iniciativa ha sido tal que hasta ha obligado a reaccionar al ministro de Deportes y a la sazón presidente de la Unión de Fútbol de Rusia (UFR), Vitali Mutkó.
"Por supuesto, estoy dispuesto a reunirme con los autores de la petición. La gente está descontenta con la calidad del juego y la falta de ganas. Pero después habrá que formar un equipo y los extraterrestres no vendrán a ayudarnos", dijo.
Mutkó expresó su confianza en que el nuevo entrenador tenga en cuenta la opinión popular sobre el comportamiento de algunos de nuestros futbolistas y forme "una nueva selección".
Los aficionados y especialistas apenas salvan de la quema al portero ruso, Igor Akinféev, y son especialmente duros con futbolistas como Kokorin y Mamáev, que celebraron una fiesta muy publicitada en Mónaco tras caer eliminados.
Slutski, que logró clasificar al equipo en apenas tres meses en el cargo, apostó por la vieja guardia, pero ésta no dio la talla, especialmente en defensa.
A esto se sumó el vergonzoso comportamiento de los ultras rusos, que incluso superaron en salvajismo a los hooligans ingleses dentro y fuera del estadio, lo que estuvo a punto de costarle la expulsión del torneo.
Capello fue relevado hace un año cuando Rusia estaba al borde de la eliminación en la fase de clasificación de la Eurocopa y después de que en el Mundial de Brasil los eslavos no lograron ni una sola victoria por vez primera en su historia.
La mala actuación del equipo nacional se agrava por el hecho de que Rusia acogerá en 2018 el Mundial de fútbol y un año antes la Copa Confederaciones, donde los aficionados temen que la selección vuelva a hacer el ridículo.
Casi un millón de rusos han pedido ya la disolución de la selección nacional de fútbol después de que ésta fuera eliminada en la primera fase de la pasada Eurocopa de Francia tras sumar un solo punto.
"Disolver la selección de fútbol de Rusia. Queremos enorgullecernos, no avergonzarnos", reza la petición colgada en Change.org y dirigida, entre otros, al presidente ruso, Vladímir Putin.
Los aficionados consideran que los actuales futbolistas internacionales "no han cumplido con las expectativas" después de clasificarse sorprendentemente para la Eurocopa tras la renuncia del italiano Fabio Capello.
Rusia fue tachado como uno de los peores equipos de la Eurocopa al empatar en el último suspiro ante Inglaterra y caer ante Eslovaquia (1-2) y Gales (0-3), lo que precipitó la dimisión del seleccionador, Leonid Slutski.
Los firmantes de la petición exigen imponer restricciones a los presupuestos de los clubes y levantar las limitaciones al número de legionarios que pueden militar en la liga rusa, aduciendo que es la única forma de aumentar la competencia.
El éxito de la iniciativa ha sido tal que hasta ha obligado a reaccionar al ministro de Deportes y a la sazón presidente de la Unión de Fútbol de Rusia (UFR), Vitali Mutkó.
"Por supuesto, estoy dispuesto a reunirme con los autores de la petición. La gente está descontenta con la calidad del juego y la falta de ganas. Pero después habrá que formar un equipo y los extraterrestres no vendrán a ayudarnos", dijo.
Mutkó expresó su confianza en que el nuevo entrenador tenga en cuenta la opinión popular sobre el comportamiento de algunos de nuestros futbolistas y forme "una nueva selección".
Los aficionados y especialistas apenas salvan de la quema al portero ruso, Igor Akinféev, y son especialmente duros con futbolistas como Kokorin y Mamáev, que celebraron una fiesta muy publicitada en Mónaco tras caer eliminados.
Slutski, que logró clasificar al equipo en apenas tres meses en el cargo, apostó por la vieja guardia, pero ésta no dio la talla, especialmente en defensa.
A esto se sumó el vergonzoso comportamiento de los ultras rusos, que incluso superaron en salvajismo a los hooligans ingleses dentro y fuera del estadio, lo que estuvo a punto de costarle la expulsión del torneo.
Capello fue relevado hace un año cuando Rusia estaba al borde de la eliminación en la fase de clasificación de la Eurocopa y después de que en el Mundial de Brasil los eslavos no lograron ni una sola victoria por vez primera en su historia.
La mala actuación del equipo nacional se agrava por el hecho de que Rusia acogerá en 2018 el Mundial de fútbol y un año antes la Copa Confederaciones, donde los aficionados temen que la selección vuelva a hacer el ridículo.