Ni Pogba, ni Payet: Kanté

Cuando los ojeadores de los grandes clubes europeos repasen el Francia-Rumania lo volverán a ver: el hombre orquesta de la defensa francesa estuvo impecable

John Carlin
El País
La Eurocopa nos ofrece dos temas de conversación: uno sobre el fútbol que se despliega en los campos y otro, de igual interés para muchos, sobre los fichajes que se firman en los despachos. En el segundo apartado, el foco de toda la atención al comienzo del Francia-Rumania disputado el viernes fue Paul Pogba, pero acabó siendo Dimitri Payet, anotador del golazo de la victoria francesa por 2 a 1. Pogba es supuestamente objeto de deseo del Real Madrid, del Manchester United y de otros dos o tres de los clubes capaces de pagar los 120 millones de euros en los que está valorado; Payet fichó por el West Ham United el verano pasado por 14 millones. El valor de Payet hoy se habrá multiplicado por cuatro. El de Pogba veremos si se mantiene a lo largo de los partidos que le quedan a Francia en el torneo.


Pero hubo otro jugador francés en aquel primer partido de la Eurocopa a quien los aficionados al deporte paralelo de los fichajes veraniegos debemos prestar mucha, mucha atención. Se llama N’Golo Kanté, tiene solo 25 años y si el Madrid, el United y compañía no estaban enterados de que es el mejor centrocampista defensivo en el mercado, ahora sí que lo están. Al hablar después del partido sobre porqué sustituyó a Pogba en el segundo tiempo, el entrenador francés Didier Deschamps explicó que juzgó necesario reemplazar un centrocampista con un delantero. Tuvo que elegir entre el alto, elegante Pogba y el bajito Kanté. Deschamps no lo dudó. “No quise quitar a Kanté por un segundo,” dijo Deschamps. “Y esta noche vieron porqué”.

Cuando los ojeadores de los grandes clubes europeos repasen el vídeo del Francia-Rumania lo volverán a ver. Kanté, el hombre orquesta de la defensa francesa, estuvo impecable de principio a fin: limpio en las recuperaciones; preciso en la distribución del balón. Recuerda a Claude Makelele, compañero en su día de Zinedine Zidane y el jugador que el Madrid galáctico nunca debería haber vendido.

Hablando de ojeadores, mucho se ha dicho sobre Monchi, el del Sevilla, pero quizá deberíamos darle una medalla también a Steve Walsh, del Leicester City, que fue quien trajo a Kanté hace un año al campeón de la Premier League. Kanté, que costó ocho millones de euros, fue igual de crucial en el inesperado éxito del Leicester y sus dos jugadores más sonados, el delantero Jamie Vardy y el centrocampista ofensivo Riyad Marhez. Walsh también fue el que descubrió a Vardy, fichado por 1,2 milones de euros, y a Mahrez, que costó medio millón. Por menos de diez millones –por menos de diez veces lo que costaría hoy fichar a Pogba– el Leicester fichó a los tres jugadores que lo coronaron campeón de Inglaterra. Buen material para los que nos gusta hablar de estas cosas.

Entradas populares