Golpe al Clan Úsuga: cayó uno de los narcos más buscados de Colombia
Uno de los 20 criminales más buscados de Colombia y miembro del Clan Úsuga, la principal banda narcotraficante del país, murió en un enfrentamiento con la policía, informaron este miércoles las autoridades.
También el presidente Juan Manuel Santos reportó el miércoles la muerte del cabecilla. "¡Somos efectivos! Fue neutralizado alias '010', uno de los 20 más buscados del Clan Úsuga", escribió el mandatario en su cuenta oficial de Twitter.
"En enfrentamiento en el sector de Istmina, en zona rural (en el departamento del Chocó, oeste), se logra la neutralización de John Jairo Álvarez, conocido con el alias 'Cero 10'", informó a la prensa el director de la brigada antinarcóticos de la Policía Nacional, José Ángel Mendoza.
Álvarez había sido señalado en abril por el gobierno de Colombia, que desde hace meses encabeza una fuerte ofensiva contra el Clan Úsuga, como uno de los 20 delincuentes más buscados del país y ofrecía una recompensa de unos 40.000 dólares por información que llevara a su captura.
Según Mendoza, el hombre estaba siendo seguido desde hacía varias semanas por unidades de la Policía, contra las que abrió fuego cuando finalmente dieron con él. "En el enfrentamiento terminan neutralizados este peligroso delincuente del crimen organizado, del Clan Úsuga, y dos de sus escoltas", añadió el responsable policial.
Álvarez tenía una orden de arresto en su contra por el delito de concierto para delinquir, pero también "era investigado por narcotráfico, por terrorismo, por minería criminal, por extorsión y, sobre todo, por homicidio".
Adicionalmente, era señalado por el asesinato de varios integrantes de la fuerza pública y por "explotar sexualmente a niñas entre 11 y 14 años", según agregó un comunicado de la Policía Nacional.
Por el máximo jefe del Clan Úsuga, Dairo Antonio Úsuga David, alias "Otoniel", las autoridades de Estados Unidos ofrecen una recompensa de hasta 5 millones de dólares.
El Clan Úsuga, surgido de disidentes de la desmovilización masiva de paramilitares promovida por el gobierno de Álvaro Uribe entre 2003 y 2006, es acusado de enviar toneladas de cocaína a Centroamérica y Estados Unidos, entre otras muchas actividades delictivas.
Las autoridades colombianas están embarcadas desde hace meses en una fuerte ofensiva contra las bandas criminales, que los expertos consideran el principal reto de seguridad en un escenario de posconflicto con las guerrillas FARC y ELN, con las que el gobierno de Juan Manuel Santos busca poner fin a más de 50 años de conflicto armado.
