Colectivos ciudadanos: de la crítica pasiva a la lucha activa
Los consultados aseguran que se organizaron porque ya no toleran que el partido oficialista vulnere derechos constitucionales de personas y organizaciones
Wendy Pinto / La Paz
Atrás quedaron las marchas encabezadas por dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB), instancia reconocida -en su momento- como la que doblaba el brazo de los gobernantes de turno; hoy las convocatorias las hacen colectivos ciudadanos y plataformas juveniles desde las redes sociales por similares motivos, pero el principal es contra el Gobierno por la constante vulneración a los derechos constitucionales.
"Ya no toleramos que el Gobierno maneje todo a su antojo, no escuchó a los discapacitados, a los potosinos y ahora tampoco a los fabriles. Éste y otros colectivos nacimos para defender la democracia y para repudiar las políticas del gobierno de turno y su abuso de poder”, aseguró Berghil Laurel, miembro de "Los Hijos de la Democracia”.
Los colectivos ciudadanos y plataformas juveniles tomaron más fuerza durante el proceso del referendo constitucional del 21 de febrero, ahora se mantienen activos y manifiestan su descontento por las decisiones ejecutadas por el partido en función de gobierno, el Movimiento Al Socialismo (MAS).
"Bolivia yo me comprometo”, "Bolivia dijo No”, "A mí me gusta la democracia no la dictadura, Estamos Emputados Bolivia”; "Si los medios callan, las redes hablan” y "Movimiento Ciudadano Bolivia” -por mencionar algunas- son las páginas en Facebook y Twitter por las que los participantes se autoconvocan para marchar por diversas causas.
Una de las primeras protestas fue para defender el resultado de la consulta del 21 de febrero y al mismo tiempo reprocharon los casos de corrupción del Fondo Indígena y el presunto tráfico de influencias entre el presidente Evo Morales y su expareja Gabriela Zapata, ejecutiva de la empresa china CAMC.
Luego fue para evitar la regulación de las redes sociales por el Gobierno y después por las personas con discapacidad. Una marcha inesperada en plaza Murillo fue encabezada hace dos semanas por periodistas de base en la ciudad de La Paz, quienes ante los constantes abusos de autoridades del MAS y la intención de modificar la Ley de Imprenta se movilizaron para exigir respeto a la libertad de prensa y garantías para su trabajo.
Recientemente, los docentes investigadores de posgrado del CIDES-UMSA rechazaron el amedrentamiento contra uno de sus miembros por haber investigado el Fondo Indígena y repudiaron las políticas del Gobierno en tiempos de democracia. "No podemos quedarnos indiferentes ante la vulneración de derechos de libertad de expresión, de pensamiento u opinión, no se queden callados”, convocó una docente del CIDES, Fernanda Wanderley, que también integra el colectivo Fuerza Ciudadana.
Según el líder de "Otra Izquierda es Posible”, Alberto Astorga, la causa por la cual varios sectores de la sociedad dejaron la pasividad de la crítica por la lucha activa es que ven vulnerados sus derechos. "Hay tantas injusticias en el país, el MAS inserta su mano en la justicia y en todos los órganos, hasta los profesionales como el abogado Eduardo León se han visto afectados”, afirmó.
Ésas no son las únicas razones por las que estos grupos funcionan. El representante de la "Red Nacional de Participación Política Juvenil”, José Manuel Ormachea, dijo que también luchan por su derecho político generacional. "Nacimos con el objetivo de la renovación urgente de los cuadros políticos en el país, los liderazgos más caducos tienen que aceptar nuestra existencia”, afirmó.
La mayoría dijo que los dirigentes se "vendieron” al MAS, por lo que la lucha será impulsada por las bases civiles y exigieron que ningún político se atribuya el éxito de su protesta.
Marcha en defensa de la democracia
Desde la anterior semana circula por las redes sociales Facebook, Twitter y las aplicaciones Whatsapp y Telegram una convocatoria para participar en la "Marcha por la Democracia”. El llamado viene desde colectivos ciudadanos.
"La marcha no es convocada por ningún partido político, es 100% convocada por la sociedad y ciberactivistas, que estamos cansados de tantos abusos, queremos un cambio por eso marcharemos”, se lee en el mensaje que se hizo viral, al igual que los hastags: #Boliviatenecesita, #BoliviaDijoNo, #UnidosSeremosMillones.
La marcha será el 18 de junio a las 17:00. La cita es por departamentos: Beni en la plazuela Fátima; Cochabamba, plaza Colón; La Paz, plaza San Francisco; Oruro, Parque de la Unión; Potosí, plaza Central; Santa Cruz, plaza del Estudiante; Sucre, plaza 25 de Mayo; y Tarija, plaza principal.
Punto de vista
María Teresa Zegada
Socióloga
Plataformas son saludables para la democracia
La presencia de plataformas ciudadanas y colectivos juveniles es muy interesante porque justamente están expresando varias cosas: primero, un descontento con el Gobierno y lo están haciendo a través de una acción política concreta. Manifiestan insatisfacción con la política tradicional porque estos colectivos podrían canalizarse mediante organizaciones políticas existentes, es decir, podrían apoyar a los Demócratas o Unidad Nacional, pero no.
Ellos muestran otras formas de protesta política y es desde la ciudadanía. Eso refleja una madurez ciudadana y actitud comprometida con la práctica política, es un signo de muy buena salud de la democracia, están buscando maneras creativas de incidir en la esfera pública, de participar sin necesidad de ser parte de la política tradicional, como partidos y candidaturas.
El Gobierno debería estar muy atento no en el sentido de aplacarlas, sino de tomarlas como una señal de expresión de la sociedad, debe reorientar muchas prácticas políticas con las que la ciudadanía está descontenta.
Es muy saludable para la democracia, es el momento de la expresión civil, de dar señal, de dar mensajes tanto al
Estado como a los partidos políticos. Estas plataformas que están creciendo y en algún momento van a tener que implementarse de una manera más articulada para lograr un efecto político, porque por ahora son voces en la esfera pública que deben tomarse en cuenta.
Así como aparecen pueden tender a desaparecer. De lo que se trata es de generar un impacto, tendrán que buscar formas de articulación de mensajes que podrían constituir en un mensaje ideológico programático y en una alternativa de poder a mediano y largo plazo.
Wendy Pinto / La Paz
Atrás quedaron las marchas encabezadas por dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB), instancia reconocida -en su momento- como la que doblaba el brazo de los gobernantes de turno; hoy las convocatorias las hacen colectivos ciudadanos y plataformas juveniles desde las redes sociales por similares motivos, pero el principal es contra el Gobierno por la constante vulneración a los derechos constitucionales.
"Ya no toleramos que el Gobierno maneje todo a su antojo, no escuchó a los discapacitados, a los potosinos y ahora tampoco a los fabriles. Éste y otros colectivos nacimos para defender la democracia y para repudiar las políticas del gobierno de turno y su abuso de poder”, aseguró Berghil Laurel, miembro de "Los Hijos de la Democracia”.
Los colectivos ciudadanos y plataformas juveniles tomaron más fuerza durante el proceso del referendo constitucional del 21 de febrero, ahora se mantienen activos y manifiestan su descontento por las decisiones ejecutadas por el partido en función de gobierno, el Movimiento Al Socialismo (MAS).
"Bolivia yo me comprometo”, "Bolivia dijo No”, "A mí me gusta la democracia no la dictadura, Estamos Emputados Bolivia”; "Si los medios callan, las redes hablan” y "Movimiento Ciudadano Bolivia” -por mencionar algunas- son las páginas en Facebook y Twitter por las que los participantes se autoconvocan para marchar por diversas causas.
Una de las primeras protestas fue para defender el resultado de la consulta del 21 de febrero y al mismo tiempo reprocharon los casos de corrupción del Fondo Indígena y el presunto tráfico de influencias entre el presidente Evo Morales y su expareja Gabriela Zapata, ejecutiva de la empresa china CAMC.
Luego fue para evitar la regulación de las redes sociales por el Gobierno y después por las personas con discapacidad. Una marcha inesperada en plaza Murillo fue encabezada hace dos semanas por periodistas de base en la ciudad de La Paz, quienes ante los constantes abusos de autoridades del MAS y la intención de modificar la Ley de Imprenta se movilizaron para exigir respeto a la libertad de prensa y garantías para su trabajo.
Recientemente, los docentes investigadores de posgrado del CIDES-UMSA rechazaron el amedrentamiento contra uno de sus miembros por haber investigado el Fondo Indígena y repudiaron las políticas del Gobierno en tiempos de democracia. "No podemos quedarnos indiferentes ante la vulneración de derechos de libertad de expresión, de pensamiento u opinión, no se queden callados”, convocó una docente del CIDES, Fernanda Wanderley, que también integra el colectivo Fuerza Ciudadana.
Según el líder de "Otra Izquierda es Posible”, Alberto Astorga, la causa por la cual varios sectores de la sociedad dejaron la pasividad de la crítica por la lucha activa es que ven vulnerados sus derechos. "Hay tantas injusticias en el país, el MAS inserta su mano en la justicia y en todos los órganos, hasta los profesionales como el abogado Eduardo León se han visto afectados”, afirmó.
Ésas no son las únicas razones por las que estos grupos funcionan. El representante de la "Red Nacional de Participación Política Juvenil”, José Manuel Ormachea, dijo que también luchan por su derecho político generacional. "Nacimos con el objetivo de la renovación urgente de los cuadros políticos en el país, los liderazgos más caducos tienen que aceptar nuestra existencia”, afirmó.
La mayoría dijo que los dirigentes se "vendieron” al MAS, por lo que la lucha será impulsada por las bases civiles y exigieron que ningún político se atribuya el éxito de su protesta.
Marcha en defensa de la democracia
Desde la anterior semana circula por las redes sociales Facebook, Twitter y las aplicaciones Whatsapp y Telegram una convocatoria para participar en la "Marcha por la Democracia”. El llamado viene desde colectivos ciudadanos.
"La marcha no es convocada por ningún partido político, es 100% convocada por la sociedad y ciberactivistas, que estamos cansados de tantos abusos, queremos un cambio por eso marcharemos”, se lee en el mensaje que se hizo viral, al igual que los hastags: #Boliviatenecesita, #BoliviaDijoNo, #UnidosSeremosMillones.
La marcha será el 18 de junio a las 17:00. La cita es por departamentos: Beni en la plazuela Fátima; Cochabamba, plaza Colón; La Paz, plaza San Francisco; Oruro, Parque de la Unión; Potosí, plaza Central; Santa Cruz, plaza del Estudiante; Sucre, plaza 25 de Mayo; y Tarija, plaza principal.
Punto de vista
María Teresa Zegada
Socióloga
Plataformas son saludables para la democracia
La presencia de plataformas ciudadanas y colectivos juveniles es muy interesante porque justamente están expresando varias cosas: primero, un descontento con el Gobierno y lo están haciendo a través de una acción política concreta. Manifiestan insatisfacción con la política tradicional porque estos colectivos podrían canalizarse mediante organizaciones políticas existentes, es decir, podrían apoyar a los Demócratas o Unidad Nacional, pero no.
Ellos muestran otras formas de protesta política y es desde la ciudadanía. Eso refleja una madurez ciudadana y actitud comprometida con la práctica política, es un signo de muy buena salud de la democracia, están buscando maneras creativas de incidir en la esfera pública, de participar sin necesidad de ser parte de la política tradicional, como partidos y candidaturas.
El Gobierno debería estar muy atento no en el sentido de aplacarlas, sino de tomarlas como una señal de expresión de la sociedad, debe reorientar muchas prácticas políticas con las que la ciudadanía está descontenta.
Es muy saludable para la democracia, es el momento de la expresión civil, de dar señal, de dar mensajes tanto al
Estado como a los partidos políticos. Estas plataformas que están creciendo y en algún momento van a tener que implementarse de una manera más articulada para lograr un efecto político, porque por ahora son voces en la esfera pública que deben tomarse en cuenta.
Así como aparecen pueden tender a desaparecer. De lo que se trata es de generar un impacto, tendrán que buscar formas de articulación de mensajes que podrían constituir en un mensaje ideológico programático y en una alternativa de poder a mediano y largo plazo.