Emery: "Con mayor frescura quizá habríamos encontrado el partido"
Madrid, As
-¿Qué lectura hace del partido?
-Los 120 minutos dan para muchas cosas. El equipo ha competido muy bien. Con once estuvo siempre en disposición de tener el control del partido, con posesión a veces del Barcelona y otras de nosotros, pero con capacidad para hacerles daño en ataque. La superioridad numérica la controlamos bien. En el segundo tiempo tuvimos dos buenas ocasiones. Si hubiéramos tenido mayor frescura, en esos tres cuartos finales podríamos haber encontrado el partido. Pero hay que valorar lo que ha hecho el equipo después del esfuerzo del miércoles. Hemos sido capaces de ser superiores, pero es el Barcelona, que sabes que te puede desequilibrar el partido en cualquier momento y así lo ha hecho. Felicito al Barcelona pero también al Sevilla. Me voy orgulloso del trabajo del equipo en toda la Copa y en esta final.
-¿Cree que no aprovechó el Sevilla su superioridad?
-A partir de la expulsión he visto a mi equipo con las mismas opciones de poder ganar. No queríamos que el Barcelona aprovechase alguna desconexión defensiva nuestra. Hemos tenido ocasiones para marcar pero sobre todo que el Barça tuviera pocas, que lo hemos hecho once contra once y contra diez. Luego la expulsión nuestra ha equilibrado.
-¿Ha pasado Coke, tras algún fallo de hoy, de héroe a villano?
-Coke va siempre a todo, a veces está más acertado o menos. Pero siempre puedes ir a la guerra, por eso lo quiero igual. Después del miércoles había que hacer otro esfuerzo igual, hemos tenido nuestros momentos. Sobre todo queríamos competir, dejarle pocas opciones de que ellos se sientan cómodos y lo hemos hecho. Cualquier error individual es totalmente perdonable.
-¿Le ha faltado suerte o ambición?
-No creo en esa suerte, la ambición la tiene mucha este equipo. Nos ha faltado frescura, que nos hubiera permitido responder aún más. El Barcelona tuvo pocos momentos pero con eficacia.
-¿Empaña esta derrota la campaña del Sevilla?
-En fútbol estamos para buscar retos y transmitir ilusiones. El equipo los ha tenido y la afición ha participado de ello. Vivirlo con los sevillistas es ilusionante, cómo transmite al equipo. La victoria engrandece más la unión, pero esa unión es perfecta. La afición ha entendido que el equipo ha estado de pie después del gran esfuerzo del otro día y lo ha agradecido. La respuesta de la afición ha sido espectacular otra vez.
-¿Qué fue lo mejor y qué le faltó al Sevilla para llevarse la Copa?
-Lo mejor, la respuesta de querer y de creer en ganar la final. Faltó acierto en los momentos que el equipo tuvo y ese acierto creo que con algo más de frescura hubiera llegado.
-¿Está contento con la entrada de Konoplyanka?
-A ver cómo atino esa respuesta. Es difícil para él. Es un chaval encantador. Está acostumbrado a jugar y es muy bueno jugando. Queremos enseñarle a competir y es un proceso que no se hace en diez semanas ni doce. Yo estoy contento porque él quiere. Ahora tenemos que hacerle mejorar, que compita más. El fútbol es muy serio y para crecer hay que competir. Es un proceso y estoy contento.
-Banega parece que se ha despedido y se va tras una expulsión. ¿Quizá es la pieza fundamental que haya que buscar el recambio?
-He tenido mucha relación con él. De amor y de odio, por momentos. Yo le quiero, porque es un chaval que ama el fútbol, se hace querer y cuando llegas a él te entrega su corazón y su fútbol, que es mucho. Está agradecido al Sevilla y ha soltado lágrimas porque se va.
-¿Puede dar el Sevilla nuevos pasos?
-Llevo tres años en el club, llegué sin tener competición europea. Pasamos una época difícil. Hasta el día de hoy el equipo ha competido, de manera sostenida pero importante. Desde ganar títulos hasta ir a la Champions, Ahora tenemos que dar un pasito más y el club tiene capacidad de respuesta, ambición. El club quiere vivirlo y sabe que la exigencia es muy alta. No nos ponemos límites y queremos ir a buscarlos.
-¿Qué espera de la próxima Champions?
-Quiero ser hoy mejor que ayer y mañana mejor que hoy. E impongo esa norma a los que están cerca de mí porque me la impongo yo.
