Diego Godín está preparado para la ‘final’ del Allianz Arena
Múnich, ASCarrasco y él, ambos con el alta, entraron en la convocatoria de Simeone, que se lleva a todos sus hombres a Múnich. Augusto puede caerse del once.
Buenas noticias para el Atlético en el entrenamiento de ayer: Godín y Carrasco se incorporaron al grupo de trabajo con el resto de sus compañeros, recibieron el alta médica y entraron en la convocatoria de Simeone, que se lleva a todos sus hombres a Múnich (incluidos Tiago, que todavía no tiene el alta, y Bernabé, portero del filial).
El central, que se lesionó a los 10 minutos del partido en San Mamés el pasado 20 de abril, llevaba ya varios días tocando balón y su regreso a la dinámica del grupo era cuestión de tiempo; peor pinta tenía lo del extremo, que se retiró con dolores en su tobillo derecho frente al Málaga, pero también él se ejercitó al ritmo de los demás en una sesión marcada por el sol y el trabajo táctico. Ambos tienen opciones de entrar en el equipo titular para la vuelta de semifinales del Allianz Arena ante el Bayern en la Champions.
Así lo demostró el Cholo al situar a sus jugadores para las explicaciones tácticas: Godín se situó junto a Savic y Carrasco, junto a Koke en el flanco izquierdo de la medular. Las sensaciones del central uruguayo en los últimos días han sido muy buenas y se encuentra listo para jugar desde el inicio, si bien es cierto que, en las jugadas de estrategia que el equipo ensayó en el tramo final de la sesión, fue Savic y no Godín el rematador. Más complicado es el concurso de Carrasco, que llega más justo y muy probablemente Simeone le reservará como posible revulsivo en el banquillo, para aprovechar su velocidad en el tramo final. Si finalmente fuese titular, Augusto se caería del once (parece poco probable tras su gran partido en el Calderón).
De todo lo trabajado por Simeone, destaca el simulacro de movimientos sin balón que preparó, situando a los diez jugadores de campo entre la línea central y la frontal de su propia área. El Cholo, preocupado por la capacidad del Bayern de embotellar a sus rivales con su circulación rápida y la profundidad de sus laterales, insistió mucho en que la basculación de todos sus hombres fuese uniforme para evitar situaciones peligrosas.
