El Nápoles sabe golear sin Higuaín y sigue a seis de la Juve
Nápoles, As
En un San Paolo lleno y enfurecido por la sanción a Higuaín, el Nápoles arrolló al colista Verona volviendo a situarse a seis puntos de la Juventus, cuando faltan seis jornadas al final de la Serie A. El sueño de arrebatar el Scudetto a la Vecchia Signora sigue siendo muy complicado, pero el conjunto de Sarri – que también estaba sancionado, en el banquillo se sentó el segundo entrenador Calzona – demostró que su estilo de juego no sufrió la ausencia del argentino.
Los partenopei dominaron el enfrentamiento desde el primer minuto, creando una cantidad enorme de ocasiones: Insigne, con un gran lanzamiento de falta, golpeó el palo en el 12', el mismo con el que se topó Gabbiadini tres minutos después. El punta italiano estuvo a un paso del gol dos veces más, pero un enorme Gollini – otro gran meta de la escuela italiana, del 1995 – le negó con dos milagros la alegría del gol que, sin embargo, llegó en el 33': Callejón recibió un perfecto pase largo de Hamsik, Gollini neutralizó su chut y el balón llegó a la cabeza de Gabbiadini, que firmó así su séptimo tanto en este curso. Pueden parecer pocos, pero el exdoriano jugó apenas 903 minutos: vivir detrás de un caníbal como el Higuaín de esta temporada no es fácil.
Instantes antes del descanso los azzurri sentenciaron: otro genial balón de Hamsik puso a Callejón solo delante del meta rival, y Souprayen tuvo que pararle con las malas en plena área. El lateral fue expulsado e Insigne se encargó del lanzamiento del penalti, que no falló. El partido se acabó básicamente allí, puesto que en la reanudación los locales controlaron el balón sin apuros logrando el 3-0 de Callejón, que empujó entre palos una asistencia de El Kaddouri. Es el duodécimo tanto de la temporada para el exmadridista, que Sarri definió varias veces imprescindible y hoy fue decisivo una vez más.
Los tres puntos, más que para apuntar a un Scudetto que parece ya tener rumbo a Turín, sirven para mantener las distancias con el imparable Roma de Spalletti – que mañana recibirá al Bolonia en el Olímpico – de momento a siete puntos. Eso sí, ver al Barcelona sumar apenas un punto en tres jornadas hace pensar, bajo el Vesuvio, que a veces los milagros pasan. Pero con esta Juve, triunfadora en 21 de los últimos 22 partidos, creer se hace imposible.
En un San Paolo lleno y enfurecido por la sanción a Higuaín, el Nápoles arrolló al colista Verona volviendo a situarse a seis puntos de la Juventus, cuando faltan seis jornadas al final de la Serie A. El sueño de arrebatar el Scudetto a la Vecchia Signora sigue siendo muy complicado, pero el conjunto de Sarri – que también estaba sancionado, en el banquillo se sentó el segundo entrenador Calzona – demostró que su estilo de juego no sufrió la ausencia del argentino.
Los partenopei dominaron el enfrentamiento desde el primer minuto, creando una cantidad enorme de ocasiones: Insigne, con un gran lanzamiento de falta, golpeó el palo en el 12', el mismo con el que se topó Gabbiadini tres minutos después. El punta italiano estuvo a un paso del gol dos veces más, pero un enorme Gollini – otro gran meta de la escuela italiana, del 1995 – le negó con dos milagros la alegría del gol que, sin embargo, llegó en el 33': Callejón recibió un perfecto pase largo de Hamsik, Gollini neutralizó su chut y el balón llegó a la cabeza de Gabbiadini, que firmó así su séptimo tanto en este curso. Pueden parecer pocos, pero el exdoriano jugó apenas 903 minutos: vivir detrás de un caníbal como el Higuaín de esta temporada no es fácil.
Instantes antes del descanso los azzurri sentenciaron: otro genial balón de Hamsik puso a Callejón solo delante del meta rival, y Souprayen tuvo que pararle con las malas en plena área. El lateral fue expulsado e Insigne se encargó del lanzamiento del penalti, que no falló. El partido se acabó básicamente allí, puesto que en la reanudación los locales controlaron el balón sin apuros logrando el 3-0 de Callejón, que empujó entre palos una asistencia de El Kaddouri. Es el duodécimo tanto de la temporada para el exmadridista, que Sarri definió varias veces imprescindible y hoy fue decisivo una vez más.
Los tres puntos, más que para apuntar a un Scudetto que parece ya tener rumbo a Turín, sirven para mantener las distancias con el imparable Roma de Spalletti – que mañana recibirá al Bolonia en el Olímpico – de momento a siete puntos. Eso sí, ver al Barcelona sumar apenas un punto en tres jornadas hace pensar, bajo el Vesuvio, que a veces los milagros pasan. Pero con esta Juve, triunfadora en 21 de los últimos 22 partidos, creer se hace imposible.