El Bayern y Arturo Vidal son demasiado para el Benfica
Lisboa, As
Era demasiada proeza para el Benfica. Hombre por hombre, el Bayern de Múnich era superior sobre el papel y así quedó plasmado en el Estadio Da Luz. El Benfica planteó el partido valientemente, trazando la línea defensiva a diez metros del centro del campo, pero eso solo le sirvió para no echarse atrás; el balón, en un 70% fue siempre del Bayern,aunque no creara peligro.
El equipo de Guardiola se dedicó a controlar frente a un equipo lisboeta casi juvenil. Rui Vitoria quiso apostar por la juventud y la movilidad, no pudo contar con Mitroglou y sacó a Jiménez, pero tuvo el gran fallo de dejar jugara sus anchas a Xabi Alonso. El veterano jugador, a los cinco minutos ya boqueaba falto de oxígeno, pero si le dejan jugar tranquilo, como así fue todo el partido, desmonta cualquier táctica rival. Él solo descompuso a todo el centro campo lisboeta, que veía cómo volaba el balón a un punto extraño donde invariablemente aparecía un alemán.
El Bayern tenía todo controlado, pero un chispazo lo tiene cualquiera y es lo que
ocurrió con Jiménez, que remató magistralmente a la red. Ni así se desconcertó el Bayern, que siguió a lo suyo y pronto encontró premio a su indiscutible calidad individual y colectiva.
La segunda parte con el tempranero gol de Müller, hizo todo mas fácil para el Bayern. Douglas, Vidal y Müller tuvieron buenas ocasiones para ampliar el marcador. El Benfica rompió el entramado defensivo, que ya no le servía, y se lanzó a por todas. Encontró el empate en una falta al borde del área, y tuvo la suerte el equipo de que acabara de entrar Talisca, un junco brasileño con una zurda de seda que solo sabe hacer exactamente eso, disparar a media distancia. Se la cuadró a Neuer y así el Benfica pudo acabar de pie su brillante carrera en esta Champions. El equipo hizo todo lo que pudo y salió con honor; el Bayern cumplió, pero su centro defensivo sigue despertando muchas dudas, por arriba y por abajo.