Bolivia importó carburantes por $us 8.006 millones en diez años
El país compró los combustibles, principalmente diésel, desde Argentina, Chile, Estados Unidos, Brasil, Perú, entre otros. Se dejó de importar gas licuado.
ABI y Página Siete/ La Paz
En el periodo 2006-2015, las importaciones bolivianas de combustibles y lubricantes llegaron a 8.006 millones de dólares por el ingreso de 8,5 millones de toneladas, informó el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
El valor de las compras creció casi cuatro veces durante la última década. En cuanto al volumen, las importaciones se triplicaron en similar periodo.
Sin embargo, el valor de las importaciones de combustibles y lubricantes se redujo 15% en 2015 con respecto a 2014, al pasar de 1.215 millones de dólares a 1.038 millones de dólares.
No obstante, el volumen de las importaciones se incrementó 17% el año pasado con relación al 2014, al pasar de 1,1 millones a 1,3 millones de toneladas, señala el informe del IBCE.
Bolivia adquiere esos productos a precio internacional, principalmente de Argentina, Chile, Estados Unidos, Brasil y Perú, entre otros países.
Las regiones que más consumen esos combustibles y lubricantes son, en orden de importancia, Santa Cruz, Oruro, Tarija, La Paz, Potosí, Cochabamba y Beni, de acuerdo con el IBCE.
Subvención
A principios de febrero, la viceministra de Política Tributaria, Susana Ríos, informó que la subvención que destina el Gobierno para los carburantes (gasolina y diésel) se redujo aproximadamente en 55% en 2015.
Esto es de 790 millones de dólares en 2014 a 359 millones de dólares en 2015.
"Como ustedes saben, el Estado gasta una cuantiosa cantidad de recursos en la subvención de gasolina, diésel y otros carburantes que van en directo beneficio del transporte. En 2014, se gastó en subvención 5.500 millones de bolivianos; en 2015, aproximadamente 2.500 millones de bolivianos, que son montos bastante cuantiosos”, precisó con motivo del paro que protagonizaron entonces los asociados a la Cámara Boliviana de Transporte Nacional e Internacional.
Para 2016, el Gobierno programó 350 millones de dólares destinados a la subvención a los carburantes, según el Presupuesto General del Estado (PGE).
Los recursos presupuestarios se destinan a la importación de diésel, gas oil, el incentivo a los campos petroleros y a gasolina especial.
La demanda de diésel supera los 1.734.560 metros cúbicos, pero sólo se producen alrededor de 777 mil metros cúbicos.
El país dejó de importar Gas Licuado de Petróleo.
El subsidio estatal
Rebaja La caída del precio internacional del petróleo ayudó a reducir los costos de la importación de carburantes para atender el mercado.
Sustitución Para bajar la subvención, el Gobierno impulsa el cambio de matriz y la conversión de vehículos a Gas Natural Vehicular (GNV).
Infraestructura Con las plantas separadoras se producen más líquidos.
ABI y Página Siete/ La Paz
En el periodo 2006-2015, las importaciones bolivianas de combustibles y lubricantes llegaron a 8.006 millones de dólares por el ingreso de 8,5 millones de toneladas, informó el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
El valor de las compras creció casi cuatro veces durante la última década. En cuanto al volumen, las importaciones se triplicaron en similar periodo.
Sin embargo, el valor de las importaciones de combustibles y lubricantes se redujo 15% en 2015 con respecto a 2014, al pasar de 1.215 millones de dólares a 1.038 millones de dólares.
No obstante, el volumen de las importaciones se incrementó 17% el año pasado con relación al 2014, al pasar de 1,1 millones a 1,3 millones de toneladas, señala el informe del IBCE.
Bolivia adquiere esos productos a precio internacional, principalmente de Argentina, Chile, Estados Unidos, Brasil y Perú, entre otros países.
Las regiones que más consumen esos combustibles y lubricantes son, en orden de importancia, Santa Cruz, Oruro, Tarija, La Paz, Potosí, Cochabamba y Beni, de acuerdo con el IBCE.
Subvención
A principios de febrero, la viceministra de Política Tributaria, Susana Ríos, informó que la subvención que destina el Gobierno para los carburantes (gasolina y diésel) se redujo aproximadamente en 55% en 2015.
Esto es de 790 millones de dólares en 2014 a 359 millones de dólares en 2015.
"Como ustedes saben, el Estado gasta una cuantiosa cantidad de recursos en la subvención de gasolina, diésel y otros carburantes que van en directo beneficio del transporte. En 2014, se gastó en subvención 5.500 millones de bolivianos; en 2015, aproximadamente 2.500 millones de bolivianos, que son montos bastante cuantiosos”, precisó con motivo del paro que protagonizaron entonces los asociados a la Cámara Boliviana de Transporte Nacional e Internacional.
Para 2016, el Gobierno programó 350 millones de dólares destinados a la subvención a los carburantes, según el Presupuesto General del Estado (PGE).
Los recursos presupuestarios se destinan a la importación de diésel, gas oil, el incentivo a los campos petroleros y a gasolina especial.
La demanda de diésel supera los 1.734.560 metros cúbicos, pero sólo se producen alrededor de 777 mil metros cúbicos.
El país dejó de importar Gas Licuado de Petróleo.
El subsidio estatal
Rebaja La caída del precio internacional del petróleo ayudó a reducir los costos de la importación de carburantes para atender el mercado.
Sustitución Para bajar la subvención, el Gobierno impulsa el cambio de matriz y la conversión de vehículos a Gas Natural Vehicular (GNV).
Infraestructura Con las plantas separadoras se producen más líquidos.