Wanchope milagroso
Buenos Aires, Telam
Abila le dio el empate agónico a Huracán en el final, con diez hombres, cuando San Lorenzo ya se relamía con la victoria. El gol del Ciclón lo anotó Belluschi.
San Lorenzo festejaba. Se relamía con una victoria clásica, pero el que arruinó los planes fue Ramón Abila. Sobre el final, cuando parecía que la visita se quedaba con los tres puntos en el bolsillo, Wanchope decretó el empate para Huracán, a base de empuje y con uno menos. Resignación para el Ciclón por haber perdido dos puntos en el último lapso. De todas formas, quedó como puntero de la zona 1. El Globito sumó una unidad después de todo lo vivido con el accidente en Venezuela.
El partido comenzó a crecer después de la mitad del primer tiempo. Antes, poquito. Juego repartido y bastante cortado por infracciones. Comenzó a adelantarse San Lorenzo, merodeando el arco de Marcos Díaz. Algo similar para Huracán en los tramos finales de esa parte. Cierta dinámica le metieron los dos elencos, convirtiendo al pleito en una ida y vuelta interesante, especialmente desde lo emocional.
Ya en el segundo tiempo, empezaron a florecer las situaciones de calibre. Primero Huracán con un tiro de Bogado y luego dos contestaciones: una sacada por Díaz y otra un cabezazo de Caruzzo por arriba.Se acercaba algo más la visita, pero el Globo no se quedaba atrás, también con peligro. Wanchope Abila en este caso, con un remate que se fue al lado del palo de Torrico.
Cuando parecía que el choque entraba en una meseta, Cerutti desbordó por la derecha y tiró el centro, conectado por el pie de Belluschi. El volante la mandó adentro y desató el delirio del banco visitante. ¿Qué pasó luego? Huracán tuvo que salir a quemar las naves y buscar el empate. Se repitieron algunas situaciones para la Quema. Y una polémica por un cruce de Caruzzo a Abila, por supuesto penal. Para Rapallini, no fue tal. Encima, después, el árbitro le mostró la roja a Risso por una patada a Matos desde atrás, en mitad de cancha.
Finalmente, cuando más de uno ya daba por sentado el 1-0, Abila aprovechó la última bola de la noche y la mandó a guardar para desatar el grito atragantado de todo el Ducó y decretar el empate clásico.
En la próxima fecha, San Lorenzo vistará a Gimnasia y Huracán recibirá a Estudiantes.