Trump gana en Carolina del Sur y se afianza como el favorito republicano
La victoria del magnate en las primarias evidencia la fortaleza de su fenómeno
Joan Faus
Columbia, El País
El republicano Donald Trump ganó este sábado las elecciones primarias de Carolina del Sur, las terceras en la carrera para designar al candidato conservador en las elecciones presidenciales de noviembre. La victoria del magnate inmobiliario, con una cómoda ventaja, le afianza como el favorito para hacerse con la nominación republicana.
Semana a semana, Trump demuestra que su fenómeno -levantado sobre el hartazgo con el establishment político y manifestado con una retórica populista- no es ni frágil ni temporal. Tras quedar segundo en Iowa y primero en New Hampshire, la victoria en Carolina del Sur del empresario neoyorquino, sin experiencia política, revela la transversalidad de su espectro de votantes.
"Cuando ganas es hermoso. Y vamos a empezar a ganar por nuestro país”, dijo Trump a sus seguidores tras su victoria electoral.
Carolina del Sur es el primer Estado sureño que elige al candidato de cada partido. Es un termómetro. Desde 1980, solo un candidato que ha ganado las primarias no ha logrado la nominación republicana para las elecciones presidenciales. Y los resultados aquí pueden anticipar el respaldo futuro a un candidato en esta región: siete de los doce estados que votan el 1 de marzo son sureños.
Con el 99% de los votos escrutados, Trump contaba con el 32,5% de los votos, seguido por los senadores Marco Rubio (22,5%) y Ted Cruz (22,3%) prácticamente empatados. A mucha distancia, se situó el cuarto más votado: el exgobernador de Florida Jeb Bush (7,8%). Tras no quedar entre los tres primeros, Bush, hijo y hermano de expresidentes, anunció en un hotel de Columbia, la capital de Carolina del Sur, que suspendía su campaña.
Los resultados consolidan la percepción de que la carrera republicana es cosa de tres: Trump, Cruz y Rubio. Cruz venció en Iowa y, como Trump, tiene un discurso insurgente que apela a las bases más conservadoras del partido. El resultado de Rubio -tras quedar quinto en New Hampshire- le refuerza en su aspiración a erigirse en el candidato del establishment moderado, cada vez más inquieto ante el éxito del outsider Trump. Con el abandono de Bush, Rubio pierde a un preciado competidor: su antiguo mentor político era inicialmente el favorito del establishment.
Hay poco tiempo para la reflexión. El martes, se celebran los caucus republicanos de Nevada, en el Oeste del país. Allí, Trump también encabeza las encuestas.
Joan Faus
Columbia, El País
El republicano Donald Trump ganó este sábado las elecciones primarias de Carolina del Sur, las terceras en la carrera para designar al candidato conservador en las elecciones presidenciales de noviembre. La victoria del magnate inmobiliario, con una cómoda ventaja, le afianza como el favorito para hacerse con la nominación republicana.
Semana a semana, Trump demuestra que su fenómeno -levantado sobre el hartazgo con el establishment político y manifestado con una retórica populista- no es ni frágil ni temporal. Tras quedar segundo en Iowa y primero en New Hampshire, la victoria en Carolina del Sur del empresario neoyorquino, sin experiencia política, revela la transversalidad de su espectro de votantes.
"Cuando ganas es hermoso. Y vamos a empezar a ganar por nuestro país”, dijo Trump a sus seguidores tras su victoria electoral.
Carolina del Sur es el primer Estado sureño que elige al candidato de cada partido. Es un termómetro. Desde 1980, solo un candidato que ha ganado las primarias no ha logrado la nominación republicana para las elecciones presidenciales. Y los resultados aquí pueden anticipar el respaldo futuro a un candidato en esta región: siete de los doce estados que votan el 1 de marzo son sureños.
Con el 99% de los votos escrutados, Trump contaba con el 32,5% de los votos, seguido por los senadores Marco Rubio (22,5%) y Ted Cruz (22,3%) prácticamente empatados. A mucha distancia, se situó el cuarto más votado: el exgobernador de Florida Jeb Bush (7,8%). Tras no quedar entre los tres primeros, Bush, hijo y hermano de expresidentes, anunció en un hotel de Columbia, la capital de Carolina del Sur, que suspendía su campaña.
Los resultados consolidan la percepción de que la carrera republicana es cosa de tres: Trump, Cruz y Rubio. Cruz venció en Iowa y, como Trump, tiene un discurso insurgente que apela a las bases más conservadoras del partido. El resultado de Rubio -tras quedar quinto en New Hampshire- le refuerza en su aspiración a erigirse en el candidato del establishment moderado, cada vez más inquieto ante el éxito del outsider Trump. Con el abandono de Bush, Rubio pierde a un preciado competidor: su antiguo mentor político era inicialmente el favorito del establishment.
Hay poco tiempo para la reflexión. El martes, se celebran los caucus republicanos de Nevada, en el Oeste del país. Allí, Trump también encabeza las encuestas.