Morales desafía a probar tráfico de influencias y a activistas de DDHH a manifestarse por el infundio
Santa Cruz, ABI
El presidente Evo Morales desafió el viernes en Santa Cruz a comprobar la denuncia de tráfico de influencias y a las organizaciones de Derechos Humanos (DDHH) a pronunciarse sobre el infundio que involucra a una mujer y a un niño, después de que el ex jefe de inteligencia entre 1989 y 1993, Carlos Valverde, ahora periodista, vinculara sentimentalmente al jefe de Estado con una empresaria y abogada representante de una firma asiática que tiene contratos con el Estado.
En conferencia de prensa, el Primer Mandatario reconoció que tuvo una relación de pareja en 2007 con Gabriela Zapata Montaño y dijo que de esa relación nació un niño que "lamentablemente" falleció, lo que ocasionó problemas que le distanciaron desde ese año de su pareja.
"Evidentemente a la Gabriela Zapata la conocí en 2005, la verdad que era mi pareja, el 2007, tuvimos un bebé y lamentablemente nuestra mala suerte ha fallecido, tuvimos algunos problemas y a partir de ese momento nos distanciamos", puntualizó al cuestionar que en la "guerra sucia" que impulsa la oposición se utilice un hecho tan personal y privado después de diez años para confabular contra su Gobierno.
El Primer Mandatario dijo que quisiera ver la reacción de los activistas de Derechos Humanos, de la Defensoría del Pueblo y otras organizaciones que, a su juicio, deberían pronunciarse.
El presidente Evo Morales desafió el viernes en Santa Cruz a comprobar la denuncia de tráfico de influencias y a las organizaciones de Derechos Humanos (DDHH) a pronunciarse sobre el infundio que involucra a una mujer y a un niño, después de que el ex jefe de inteligencia entre 1989 y 1993, Carlos Valverde, ahora periodista, vinculara sentimentalmente al jefe de Estado con una empresaria y abogada representante de una firma asiática que tiene contratos con el Estado.
En conferencia de prensa, el Primer Mandatario reconoció que tuvo una relación de pareja en 2007 con Gabriela Zapata Montaño y dijo que de esa relación nació un niño que "lamentablemente" falleció, lo que ocasionó problemas que le distanciaron desde ese año de su pareja.
"Evidentemente a la Gabriela Zapata la conocí en 2005, la verdad que era mi pareja, el 2007, tuvimos un bebé y lamentablemente nuestra mala suerte ha fallecido, tuvimos algunos problemas y a partir de ese momento nos distanciamos", puntualizó al cuestionar que en la "guerra sucia" que impulsa la oposición se utilice un hecho tan personal y privado después de diez años para confabular contra su Gobierno.
El Primer Mandatario dijo que quisiera ver la reacción de los activistas de Derechos Humanos, de la Defensoría del Pueblo y otras organizaciones que, a su juicio, deberían pronunciarse.