Modric se multiplicó por tres: fue Kroos, James y Cristiano
Madrid, As
Luka Modric se multiplicó por tres en Los Cármenes. Realizo un partido monumental para dar los tres puntos al Real Madrid: sostuvo al equipo, organizó y dio salida al balón y ejecutó el 1-2. Hizo el trabajo de tres, el de Kroos, el de James y el de Cristiano Ronaldo.
Para iniciar su magistral obra Modric primero se empleó en la recuperación. En defensa ganó el 47,1% de los balones que disputó, interceptó cinco pases y de las cinco entradas que realizó, dos terminaron con éxito. Se empleó con empeño en defensa y para ello sólo necesitó realizar una falta. En el minuto 89, para más señas.
Una vez recuperado el balón, tocó distribuirlo, llevarlo cerca de la portería contraria con la mayor rapidez y fluidez posible. Cuando tuvo el esférico en su poder, movió al equipo con criterio y precisión quirúrgica: realizó 51 pases buenos y solamente nueve erróneos: un 85% de acierto. Un porcentaje que asciende hasta el 92% cuando el pase es de distancia corta. En campo contrario el criterio del croata con el pase también es elevado: el 81% de éxito.
Y para rematar su gran faena en Granada, hizo el gol que le dio los tres puntos al Real Madrid. Un gol para el que necesitó tres remates (33%). Zidane reconoció el mérito en rueda de prensa ("debe tirar más") y él, aplicado, recogió el guante ("antes del partido me dijeron que tire más y eso es lo que hice"). Tres disparos que igualaron los que realizó Cristiano y uno menos de los que intentó Benzema. Entre estos tres jugadores firmaron 10 de los catorce remates del Real Madrid, y el resto se repartieron entre Sergio Ramos (1), Carvajal (1), Isco (1) y Jesé (1).
Luka Modric se multiplicó por tres en Los Cármenes. Realizo un partido monumental para dar los tres puntos al Real Madrid: sostuvo al equipo, organizó y dio salida al balón y ejecutó el 1-2. Hizo el trabajo de tres, el de Kroos, el de James y el de Cristiano Ronaldo.
Para iniciar su magistral obra Modric primero se empleó en la recuperación. En defensa ganó el 47,1% de los balones que disputó, interceptó cinco pases y de las cinco entradas que realizó, dos terminaron con éxito. Se empleó con empeño en defensa y para ello sólo necesitó realizar una falta. En el minuto 89, para más señas.
Una vez recuperado el balón, tocó distribuirlo, llevarlo cerca de la portería contraria con la mayor rapidez y fluidez posible. Cuando tuvo el esférico en su poder, movió al equipo con criterio y precisión quirúrgica: realizó 51 pases buenos y solamente nueve erróneos: un 85% de acierto. Un porcentaje que asciende hasta el 92% cuando el pase es de distancia corta. En campo contrario el criterio del croata con el pase también es elevado: el 81% de éxito.
Y para rematar su gran faena en Granada, hizo el gol que le dio los tres puntos al Real Madrid. Un gol para el que necesitó tres remates (33%). Zidane reconoció el mérito en rueda de prensa ("debe tirar más") y él, aplicado, recogió el guante ("antes del partido me dijeron que tire más y eso es lo que hice"). Tres disparos que igualaron los que realizó Cristiano y uno menos de los que intentó Benzema. Entre estos tres jugadores firmaron 10 de los catorce remates del Real Madrid, y el resto se repartieron entre Sergio Ramos (1), Carvajal (1), Isco (1) y Jesé (1).