El Atleti blinda a Oblak y sube su cláusula a 100 millones de euros
Madrid, As
El pasado julio, el United llamó a las puertas del Calderón preguntando por Oblak. El portero había impresionado al final de temporada. Se hizo con la portería el 18 de marzo, cuando Moyá se lesionó en el minuto 20 del Atleti-Leverkusen, y jugó 12 partidos, encajando 7 goles y dejando la portería a cero 7 partidos. Se convirtió en intransferible.
“Oblak es del Atlético hasta 2020 y, su cláusula, 50 millones”, recibió entonces como respuesta el United. Ahora, si volviera, encontraría otra: Oblak amplió ayer un año más su contrato (de 2020 a 2021) y está blindado, su cláusula son ya 100 millones. El doble de la que tenía y un mensaje para los grandes: Oblak ya no es intransferible, ahora es directamente un imposible para el United y todo aquel que venga preguntando por él al Calderón. Un movimiento similar al que el Atlético ya hizo hace unos meses con Griezmann, a quien puso también una cláusula de tres dígitos (era de 80, pasó a 100). En el club es tan importante el que marca los goles como el que los para.
Y Oblak, como Griezmann, no deja de crecer partido a partido. Es el portero menos goleado de la Liga donde sólo ha encajado 11 goles (6 en casa, 5 fuera) y ha dejado su portería a cero 14 veces, con un porcentaje de paradas del 81,03%. “Para mí, esta renovación, supone que el club confía en mí. Estoy muy contento”, revelaba el futbolista, en perfecto español, quinto idioma que domina ya, a la web del club. Y es que Oblak está “muy feliz de verdad” en el Atlético. “Por eso también renovamos: quiero continuar aquí”. Eso sí, dejó claro que el muro no es sólo él, que lo es todo el equipo. “Defendemos bien y encajamos los menos goles posibles pero es así, trabajamos duro, intentamos siempre ganar y al final espero que consigamos eso que queremos”.
Ídolo de la grada, ya es habitual que el Calderón le dedique su propia versión del hit de los Gipsy Kings: “Obi Oblak, cada día te quiero más...”. “Muchas veces, cuando juego, estoy muy concentrado y no oigo lo de fuera, pero cuando escucho, me siento feliz por eso: espero que les demos muchas alegrías a los aficionados”. Él tiene tiempo para hacerlo: vestirá la rojiblanca hasta los 28 años. Ahora tiene 23.
El pasado julio, el United llamó a las puertas del Calderón preguntando por Oblak. El portero había impresionado al final de temporada. Se hizo con la portería el 18 de marzo, cuando Moyá se lesionó en el minuto 20 del Atleti-Leverkusen, y jugó 12 partidos, encajando 7 goles y dejando la portería a cero 7 partidos. Se convirtió en intransferible.
“Oblak es del Atlético hasta 2020 y, su cláusula, 50 millones”, recibió entonces como respuesta el United. Ahora, si volviera, encontraría otra: Oblak amplió ayer un año más su contrato (de 2020 a 2021) y está blindado, su cláusula son ya 100 millones. El doble de la que tenía y un mensaje para los grandes: Oblak ya no es intransferible, ahora es directamente un imposible para el United y todo aquel que venga preguntando por él al Calderón. Un movimiento similar al que el Atlético ya hizo hace unos meses con Griezmann, a quien puso también una cláusula de tres dígitos (era de 80, pasó a 100). En el club es tan importante el que marca los goles como el que los para.
Y Oblak, como Griezmann, no deja de crecer partido a partido. Es el portero menos goleado de la Liga donde sólo ha encajado 11 goles (6 en casa, 5 fuera) y ha dejado su portería a cero 14 veces, con un porcentaje de paradas del 81,03%. “Para mí, esta renovación, supone que el club confía en mí. Estoy muy contento”, revelaba el futbolista, en perfecto español, quinto idioma que domina ya, a la web del club. Y es que Oblak está “muy feliz de verdad” en el Atlético. “Por eso también renovamos: quiero continuar aquí”. Eso sí, dejó claro que el muro no es sólo él, que lo es todo el equipo. “Defendemos bien y encajamos los menos goles posibles pero es así, trabajamos duro, intentamos siempre ganar y al final espero que consigamos eso que queremos”.
Ídolo de la grada, ya es habitual que el Calderón le dedique su propia versión del hit de los Gipsy Kings: “Obi Oblak, cada día te quiero más...”. “Muchas veces, cuando juego, estoy muy concentrado y no oigo lo de fuera, pero cuando escucho, me siento feliz por eso: espero que les demos muchas alegrías a los aficionados”. Él tiene tiempo para hacerlo: vestirá la rojiblanca hasta los 28 años. Ahora tiene 23.