Pogba y Khedira acercan a la Juventus al liderato de Serie A
Turín, As
Una Juventus capaz de jugar bien pero también de sufrir, ganó a domicilio al Sampdoria 2-1 consiguiendo su noveno triunfo consecutivo en la Serie A. Es una victoria fundamental para los de Turín, que ahora ocupan el segundo puesto juntos con el Inter, a apenas dos puntos del Nápoles. Una remontada increíble del campeón de Italia, que antes de esta racha perfecta ocupaba la duodécima posición a 11 puntos de la cima de la tabla.
Los bianconeri, sin el lesionado Mandžukic, salieron de inicio con Morata en la delantera del sólido 3-5-2 de Allegri, y empezaron el choque con autoridad. La Vecchia Signora se volcó al ataque desde el principio y tras 17 minutos abrió la lata: Pogba controló con el pecho un balón alto en plena área rival, se giró, y con un preciso zurdazo cruzado batió a Viviano. La Samp jugó el resto de la primera mitad intentando reaccionar, un objetivo que se complicó cuando Soriano, fundamental en la medular, tuvo que dejar el césped por lesión.
El enfrentamiento parecía haberse puesto cuesta abajo para la Juve nada más empezar la reanudación: en el 47', de hecho, un gran pase vertical de Dybala premió la llegada de Khedira, que se presentó solo ante el portero rival superándolo con un delicado toque con el exterior del pie derecho. Los bianconeri controlaron sin demasiada dificultad los ataques de los doriani, que sin embargo consiguieron volver a meterse en el partido en el 64' gracias a Antonio Cassano: Fantantonio, que no marcaba goles en la Serie A desde el 25 de octubre del 2014 (en un Parma-Sassuolo), combinó con el colombiano Carbonero y desde el límite del área rival superó a Buffon con un disparo raso. Es su octavo tanto ante los de Turín, una de sus victimas preferidas.
Después del 2-1 la presión de los locales aumentó con el paso del tiempo, y la Juve acabó el partido en las narices de Buffon: la Samp - que perdió a Moisander por una tarjeta roja en el 94' – estuvo de hecho a un paso del empate, y Chiellini desvió fuera con la cabeza un balón cuyo destino era la red a pocos instantes del pitido final. El campeón de Italia, sin embargo, es especialista también en sufrimiento y logró cerrar la primera vuelta a dos puntos del liderato: un resultado inesperado tras haber vivido el peor arranque liguero de toda su historia. La remontada bianconera puede continuar, y el espectáculo de esta lucha por el Scudetto, también.
Una Juventus capaz de jugar bien pero también de sufrir, ganó a domicilio al Sampdoria 2-1 consiguiendo su noveno triunfo consecutivo en la Serie A. Es una victoria fundamental para los de Turín, que ahora ocupan el segundo puesto juntos con el Inter, a apenas dos puntos del Nápoles. Una remontada increíble del campeón de Italia, que antes de esta racha perfecta ocupaba la duodécima posición a 11 puntos de la cima de la tabla.
Los bianconeri, sin el lesionado Mandžukic, salieron de inicio con Morata en la delantera del sólido 3-5-2 de Allegri, y empezaron el choque con autoridad. La Vecchia Signora se volcó al ataque desde el principio y tras 17 minutos abrió la lata: Pogba controló con el pecho un balón alto en plena área rival, se giró, y con un preciso zurdazo cruzado batió a Viviano. La Samp jugó el resto de la primera mitad intentando reaccionar, un objetivo que se complicó cuando Soriano, fundamental en la medular, tuvo que dejar el césped por lesión.
El enfrentamiento parecía haberse puesto cuesta abajo para la Juve nada más empezar la reanudación: en el 47', de hecho, un gran pase vertical de Dybala premió la llegada de Khedira, que se presentó solo ante el portero rival superándolo con un delicado toque con el exterior del pie derecho. Los bianconeri controlaron sin demasiada dificultad los ataques de los doriani, que sin embargo consiguieron volver a meterse en el partido en el 64' gracias a Antonio Cassano: Fantantonio, que no marcaba goles en la Serie A desde el 25 de octubre del 2014 (en un Parma-Sassuolo), combinó con el colombiano Carbonero y desde el límite del área rival superó a Buffon con un disparo raso. Es su octavo tanto ante los de Turín, una de sus victimas preferidas.
Después del 2-1 la presión de los locales aumentó con el paso del tiempo, y la Juve acabó el partido en las narices de Buffon: la Samp - que perdió a Moisander por una tarjeta roja en el 94' – estuvo de hecho a un paso del empate, y Chiellini desvió fuera con la cabeza un balón cuyo destino era la red a pocos instantes del pitido final. El campeón de Italia, sin embargo, es especialista también en sufrimiento y logró cerrar la primera vuelta a dos puntos del liderato: un resultado inesperado tras haber vivido el peor arranque liguero de toda su historia. La remontada bianconera puede continuar, y el espectáculo de esta lucha por el Scudetto, también.