La ONU prepara “medidas significativas” contra Corea del Norte
El Consejo de Seguridad condena de forma unánime la prueba con la bomba de hidrógeno
Nueva York / Washington, El País
La comunidad internacional clamó este miércoles contra Corea del Norte por la prueba de una munición más dañina que las bombas atómicas y más potente que las lanzadas sobre el Hiroshima y Nagasaki. Los 15 miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas condenaron de forma unánime el ensayo y decidieron preparar nuevas “medidas significativas”, sin más concreción, contra el régimen de Pyongyang por la prueba con una bomba de hidrógeno asegura haber llevado a cabo con éxito.
El comunicado del Consejo de Seguridad fue leído por el embajador de Uruguay ante la ONU, Elbio Rosselli, ya que el país latinoamericano preside este mes el organismo, que se reunió de urgencia. Se trata de una “clara amenaza a la paz internacional y la seguridad” que viola las resoluciones de Naciones Unidas, recalcó. El embajador de Japón ante la ONU, Motohide Yoshikawa, señaló a la prensa que su país maneja alguna ideas sobre las nuevas medidas, aunque las compartiría en el seno del Consejo de Seguridad. El pasado más reciente muestra, no obstante, que las sanciones no han tenido un gran éxito hasta ahora.
La exhibición de poder de Corea del Norte es una sacudida para una comunidad internacional que busca frenar la amenaza nuclear. Se produce después de que el pasado julio se alcanzara un acuerdo histórico para frenar el programa nuclear de Irán y se iniciara el levantamiento de las sanciones contra Teherán. Es la cuarta en la última década realizada por el régimen norcoreano (las hubo también en 2006, 2009 y 2013), todas en contra de las resoluciones de Naciones Unidas.
Minutos antes de la reunión del Consejo, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, también condenó de forma “inequívoca” la prueba con bomba de hidrógeno. El ensayo norcoreano supone un elemento “enormemente desestabilizador que menoscaba los esfuerzos internacionales contra la proliferación de armas nucleares”, dijo Ban Ki-moon, y reclamó al país “que cese toda actividad nuclear”.
La prueba nuclear norcoreana es "una clara amenaza a la paz y la seguridad" internacional y una "clara violación" a las resoluciones de la ONU que exigen al régimen de Pyongyang.
Naciones Unidas, de todos modos, dejó entrever algunas dudas sobre lo manifestado por el régimen coreano. La Organización del Tratado de Prohibición Completa de Pruebas Nucleares (CTBTO), con sede en Viena, señaló que el evento sísmico detectado durante la supuesta prueba de la bomba de hidrógeno tuvo la misma intensidad que en 2013, un test anterior de Corea.
"Las características de las señales que hemos observado esta vez son muy congruentes con lo que el mundo vio en 2013 y que fue una prueba nuclear declarada y fue considerada como una prueba nuclear", indicó a los medios en la capital austriaca Randy Bell, director del centro internacional de datos de la CTBTO, según recoge Efe. En concreto, la intensidad del terremoto fue de magnitud 4,9, muy similar al de 2013.
Estados Unidos: "Es una provocación"
También el Gobierno de Estados Unidos duda de las afirmaciones de Corea del Norte de que ha realizado con éxito una prueba con una bomba de hidrógeno, pero aseguró que, de ser cierto, Pyongyang recibirá una “respuesta adecuada” a esta “flagrante provocación”.
“El análisis inicial no es congruente con las afirmaciones norcoreanas de que ha realizado con éxito una prueba con una bomba de hidrógeno”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest. “No hay nada que haya sucedido en las últimas 24 horas que haya causado al Gobierno estadounidense cambiar nuestra evaluación de las capacidades técnicas y militares” de Pyongyang, agregó. Aun así, para Washington cualquier prueba nuclear que realice el régimen norcoreano es una “provocación y una violación flagrante” de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, subrayó.
Por su parte, el Departamento de Estado prometió que se responderá “de forma adecuada a todas y cada una de las provocaciones de Corea del Norte”. Desde el Capitolio aumentaban este miércoles las voces que reclamaban un incremento de las sanciones norteamericanas contra el régimen de Pyongyang.
La prueba viene después del lanzamiento de un misil balístico desde un submarino el pasado diciembre y de una serie de incidentes en la zona desmilitarizada de a frontera con Corea del Sur en agosto.
La dinastía atómica de los Kim
El programa atómico norcoreano empezó en los años sesenta con apoyo ruso y chino, pero no dio sus primeros pasos reales hasta los ochenta.
El primer ensayo atómico subterráneo fue el 9 de octubre de 2006, bajo el régimen de Kim Jong-il, con una potencia estimada de 1 kilotón.
La segunda prueba fue el 25 de mayo de 2009 en el mismo lugar que el anterior (la base de Punggyeri, a 400 kilómetros de Pyongyang), y con una potencia estimada de 3,5 kilotones.
El tercero se efectuó el 12 de febrero de 2013, con Kim Jong-un, hijo de Kim Jong-il, en el poder. Con una potencia estimada de 6,7 kilotones, causó un temblor de magnitud 4,5 en la escala de Richter.
El cuarto se efectuó ayer. Fue el primero en que se empleó una bomba de hidrógeno, más potente que los otros.
Nueva York / Washington, El País
La comunidad internacional clamó este miércoles contra Corea del Norte por la prueba de una munición más dañina que las bombas atómicas y más potente que las lanzadas sobre el Hiroshima y Nagasaki. Los 15 miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas condenaron de forma unánime el ensayo y decidieron preparar nuevas “medidas significativas”, sin más concreción, contra el régimen de Pyongyang por la prueba con una bomba de hidrógeno asegura haber llevado a cabo con éxito.
El comunicado del Consejo de Seguridad fue leído por el embajador de Uruguay ante la ONU, Elbio Rosselli, ya que el país latinoamericano preside este mes el organismo, que se reunió de urgencia. Se trata de una “clara amenaza a la paz internacional y la seguridad” que viola las resoluciones de Naciones Unidas, recalcó. El embajador de Japón ante la ONU, Motohide Yoshikawa, señaló a la prensa que su país maneja alguna ideas sobre las nuevas medidas, aunque las compartiría en el seno del Consejo de Seguridad. El pasado más reciente muestra, no obstante, que las sanciones no han tenido un gran éxito hasta ahora.
La exhibición de poder de Corea del Norte es una sacudida para una comunidad internacional que busca frenar la amenaza nuclear. Se produce después de que el pasado julio se alcanzara un acuerdo histórico para frenar el programa nuclear de Irán y se iniciara el levantamiento de las sanciones contra Teherán. Es la cuarta en la última década realizada por el régimen norcoreano (las hubo también en 2006, 2009 y 2013), todas en contra de las resoluciones de Naciones Unidas.
Minutos antes de la reunión del Consejo, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, también condenó de forma “inequívoca” la prueba con bomba de hidrógeno. El ensayo norcoreano supone un elemento “enormemente desestabilizador que menoscaba los esfuerzos internacionales contra la proliferación de armas nucleares”, dijo Ban Ki-moon, y reclamó al país “que cese toda actividad nuclear”.
La prueba nuclear norcoreana es "una clara amenaza a la paz y la seguridad" internacional y una "clara violación" a las resoluciones de la ONU que exigen al régimen de Pyongyang.
Naciones Unidas, de todos modos, dejó entrever algunas dudas sobre lo manifestado por el régimen coreano. La Organización del Tratado de Prohibición Completa de Pruebas Nucleares (CTBTO), con sede en Viena, señaló que el evento sísmico detectado durante la supuesta prueba de la bomba de hidrógeno tuvo la misma intensidad que en 2013, un test anterior de Corea.
"Las características de las señales que hemos observado esta vez son muy congruentes con lo que el mundo vio en 2013 y que fue una prueba nuclear declarada y fue considerada como una prueba nuclear", indicó a los medios en la capital austriaca Randy Bell, director del centro internacional de datos de la CTBTO, según recoge Efe. En concreto, la intensidad del terremoto fue de magnitud 4,9, muy similar al de 2013.
Estados Unidos: "Es una provocación"
También el Gobierno de Estados Unidos duda de las afirmaciones de Corea del Norte de que ha realizado con éxito una prueba con una bomba de hidrógeno, pero aseguró que, de ser cierto, Pyongyang recibirá una “respuesta adecuada” a esta “flagrante provocación”.
“El análisis inicial no es congruente con las afirmaciones norcoreanas de que ha realizado con éxito una prueba con una bomba de hidrógeno”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest. “No hay nada que haya sucedido en las últimas 24 horas que haya causado al Gobierno estadounidense cambiar nuestra evaluación de las capacidades técnicas y militares” de Pyongyang, agregó. Aun así, para Washington cualquier prueba nuclear que realice el régimen norcoreano es una “provocación y una violación flagrante” de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, subrayó.
Por su parte, el Departamento de Estado prometió que se responderá “de forma adecuada a todas y cada una de las provocaciones de Corea del Norte”. Desde el Capitolio aumentaban este miércoles las voces que reclamaban un incremento de las sanciones norteamericanas contra el régimen de Pyongyang.
La prueba viene después del lanzamiento de un misil balístico desde un submarino el pasado diciembre y de una serie de incidentes en la zona desmilitarizada de a frontera con Corea del Sur en agosto.
La dinastía atómica de los Kim
El programa atómico norcoreano empezó en los años sesenta con apoyo ruso y chino, pero no dio sus primeros pasos reales hasta los ochenta.
El primer ensayo atómico subterráneo fue el 9 de octubre de 2006, bajo el régimen de Kim Jong-il, con una potencia estimada de 1 kilotón.
La segunda prueba fue el 25 de mayo de 2009 en el mismo lugar que el anterior (la base de Punggyeri, a 400 kilómetros de Pyongyang), y con una potencia estimada de 3,5 kilotones.
El tercero se efectuó el 12 de febrero de 2013, con Kim Jong-un, hijo de Kim Jong-il, en el poder. Con una potencia estimada de 6,7 kilotones, causó un temblor de magnitud 4,5 en la escala de Richter.
El cuarto se efectuó ayer. Fue el primero en que se empleó una bomba de hidrógeno, más potente que los otros.