Familia boliviana sufre terrorífico asalto en Brasil
Erbol
Una banda delincuencial irrumpió en la casa de unos bolivianos en San Pablo, Brasil, los tomó como rehenes y amenazó con cortar los dedos de un niño para averiguar el escondite de dinero.
Medios brasileños reportaron que el asalto se produjo la madrugada de este viernes en la calle Puirenópolis de la localidad de Guarulhos.
En la casa viven nueve bolivianos, tres adultos y seis niños, que fueron tomados como rehenes, mientras la banda, formada por seis miembros, robaba sus pertenencias.
Los delincuentes estaban armado con revólver calibre 38 y un cuchillo.
Luego de robar los electrodomésticos, los antisociales intentaron buscar dinero, el cual supuestamente estaba escondido, pero los bolivianos no querían revelar su ubicación.
Uno de los afectados relató que un delincuente le dijo: “Te vamos a matar ya que tu no colaboras con nosotros”.
Después, amenazaron a los bolivianos con cortar los dedos de uno de los niños si no accedían a revelar el escondite del dinero. Unos de los asaltantes dijo que arrancaría los dedos uno por uno.
Los vecinos advirtieron el alboroto y llamaron a la Policía. Los uniformados llegaron a la escena y persiguió a los delincuentes, logrando atrapar a tres de ellos.
Una banda delincuencial irrumpió en la casa de unos bolivianos en San Pablo, Brasil, los tomó como rehenes y amenazó con cortar los dedos de un niño para averiguar el escondite de dinero.
Medios brasileños reportaron que el asalto se produjo la madrugada de este viernes en la calle Puirenópolis de la localidad de Guarulhos.
En la casa viven nueve bolivianos, tres adultos y seis niños, que fueron tomados como rehenes, mientras la banda, formada por seis miembros, robaba sus pertenencias.
Los delincuentes estaban armado con revólver calibre 38 y un cuchillo.
Luego de robar los electrodomésticos, los antisociales intentaron buscar dinero, el cual supuestamente estaba escondido, pero los bolivianos no querían revelar su ubicación.
Uno de los afectados relató que un delincuente le dijo: “Te vamos a matar ya que tu no colaboras con nosotros”.
Después, amenazaron a los bolivianos con cortar los dedos de uno de los niños si no accedían a revelar el escondite del dinero. Unos de los asaltantes dijo que arrancaría los dedos uno por uno.
Los vecinos advirtieron el alboroto y llamaron a la Policía. Los uniformados llegaron a la escena y persiguió a los delincuentes, logrando atrapar a tres de ellos.