Argentina atrapa a narcotraficantes prófugos vinculados en escándalo político

Buenos Aires, Reuters
Fuerzas policiales de Argentina capturaron el sábado a los tres narcotraficantes condenados por un triple asesinato con supuestas vinculaciones políticas que habían huido de la cárcel a fin del 2015, según informaron una fuente de seguridad y la agencia oficial de noticias del país sudamericano.


La huída carcelaria se produjo apenas dos semanas después de la asunción del nuevo Gobierno argentino, liderado por el ex empresario Mauricio Macri, en un caso que despertó acusaciones cruzadas en la escena política del país.

"Nos avisan desde el campo de acción que fueron atrapados los otros dos (prófugos) también. Están actuando diferentes fuerzas de seguridad", dijo a Reuters telefónicamente una fuente policial de la provincia de Santa Fe, que previamente había confirmado el primer arresto.

"No estamos en condiciones de hablar oficialmente porque esto será anunciado por las autoridades (políticas)", agregó la fuente. La agencia oficial de noticias Télam publicó luego las tres recapturas.

Los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci escaparon el 27 de diciembre de una prisión de la provincia de Buenos Aires, donde estaban condenados a cadena perpetua por el asesinato en 2008 de tres empresarios que -al igual que ellos- traficaban efedrina, usada para fabricar drogas sintéticas.

Las detenciones se produjeron en una zona de campo abierto a unos 570 kilómetros al norte de la ciudad de Buenos Aires, capital de Argentina, tras volcar el vehículo en el que, aparentemente los tres fugados, evadían controles policiales.

"La zona tiene varios pantanos por las inundaciones (del río Paraná), por eso se usaron (en la búsqueda) caballos que aportó un baquiano (campesino del lugar)", sostuvo la fuente de seguridad.

La persecución de los condenados evadidos ocupó a diario los titulares nacionales, por lo que la noticia de la recaptura invadía las primeras planas de los medios periodísticos.

El jueves, las fuerzas de seguridad de Argentina desplegaron un operativo con cientos de agentes en una zona rural al sur de la provincia agrícola de Santa Fe, donde se escondían por entonces los prófugos luego de protagonizar horas antes un tiroteo con gendarmes.

LA ARISTA POLÍTICA DEL CASO

La operación, que incluyó helicópteros, grupos especiales de policía y a francotiradores, por momentos fue transmitida en vivo por la televisión local.

La fuga generó amplio revuelo en el país austral porque se dio meses después de que Martín Lanatta afirmara en un polémico reportaje televisivo que el crimen que cometieron fue ordenado por Aníbal Fernández, entonces Jefe de Gabinete de ministros y candidato a gobernador de la mayor provincia de la nación.

Muchos creen que esa denuncia, realizada desde prisión ante las cámaras de un programa periodístico opositor, jugó un rol clave en la derrota de Fernández en Buenos Aires, un duro golpe para el peronismo de centroizquierda que semanas después perdió el balotaje presidencial con el partido de Macri.

Fernández negó las acusaciones, que según él fueron parte de una operación mediática para perjudicarlo y llevar al poder al partido de Macri, un político de centroderecha muy crítico de la ex presidenta Cristina Fernández, que gobernó entre 2007 y 2015.

"El narcotráfico avanzó por inacción o complicidad del gobierno anterior", dijo recientemente Macri.

Tras la fuga, la flamante gobernadora de la provincia de Buenos Aires y aliada de Macri, María Eugenia Vidal, desplazó a la cúpula del servicio penitenciario del distrito, por sospechas de que agentes de la prisión podrían haber ayudado en el escape.

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