Adán: víctima de Mourinho y ahora gran ídolo en Heliópolis

Madrid, AS
Madridista de corazón, ídolo exprés en el Betis, donde todavía no ha cumplido casi dos años pues fue fichado por los verdiblancos en el mercado invernal de la 2013-14. Antonio Adán ha encontrado su sitio en Heliópolis, donde en poco tiempo hasta le han nombrado capitán. Es el tercero, por detrás de Jorge Molina y de otro tótem, Joaquín Sánchez. Detrás de esa cara de niño bueno hay un futbolista con carácter, que ya tiene un importante peso específico en el vestuario verdiblanco. Dicen que es uno de los que más aconseja a los jóvenes, entre ellos Dani Ceballos, y que su opinión pesó mucho en la decisión del utrerano de renovar con el Betis pocas semanas antes que él. Porque, desde el 20 de noviembre, Adán está un poco más atado al Villamarín: hasta 2019.



Su cláusula de apenas ocho millones no le cierra las puertas de algún otro equipo grande que ha llamado de la Premier. Tiene 28 años, con lo que le quedan muchos años de portero, y sus temporadas en el Real Madrid no le mermaron demasiado, y si lo hicieron fue más en el aspecto emocional que en el físico. Encontrarse justo en medio del fuego cruzado entre Iker Casillas y José Mourinho le marcó para siempre. “Cosas así te hacen madurar demasiado rápido”, ha confesado Adán en más de una ocasión.

En el Santiago Bernabéu le metieron cinco, segunda jornada de Liga. Hoy tiene el reto de amargar a su exequipo sumando otra actuación despampanante a las muchas que ha hecho ya en los últimos tiempos. Adán no está tan inspirado como a comienzos de Liga. Entre eso y que al goleador Rubén Castro también le han abandonado las musas así le va al Betis, que no gana hace nueve partidos (siete de Liga y dos de Copa). Pero en Villarreal el portero de Mejorada apareció en los últimos instantes para sacar una pierna salvadora. Fue la primera piedra, el cimiento de un Betis que quiere reengancharse a la Liga.

“Estoy muy agradecido al Madrid”, no deja de repetir Adán cuando le preguntan por el club blanco. Hoy lo tendrá enfrente e intentará amargar a los que fueron sus excompañeros.