Un Bernabéu en combustión: cuatro pitadas en un mes
Madrid, As
Tras el parón navideño y con el futuro de Rafa Benítez más cuestionado que nunca, el Real Madrid vuelve a su casa para recibir a la Real Sociedad. Pero no será un regreso plácido, ya que el Bernabéu está susceptible y vigilante. Ya mostró su disconformidad en partidos anteriores, con pitos al entrenador, presidente y jugadores.
El Clásico ante el Barcelona en el Bernabéu (0-4) destapó la inconformidad del público madridista: el equipo llegaba a la cita ante su histórico enemigo tras perder en el Pizjuán ante el Sevilla (3-2), y con 0-2 a favor de los culés y Marcelo sacando de la línea de gol un balón justo antes del descanso, el Bernabéu explotó con pitos y gritos de ¡Florentino, dimisión!
Tras el descalabro ante el Sevilla y el Barcelona, el Real Madrid encontró el confort lejos de su estadio con dos victorias consecutivas, una ante el Shakhtar en Champions y la otra en Ipurua en Liga. El Cádiz y la Copa se asomaban como una oportunidad única para seguir rebajando la tensión entre los incondicionales aficionados, pero surgió el asunto de Cheryshev y la posterior eliminación del Real Madrid por alineación indebida del ruso, que arrastraba una sanción de su etapa en el Villarreal.
Y con estos ingredientes volvió el Real Madrid a disputar un partido en su casa, catorce días después de la goleada ante el Barça y tres después de la eliminación copera. Benítez, junto a Cheryshev, fue el gran pitado en el momento que la megafonía anunciaba los onces iniciales para medirse al Getafe. El mismo guion se repitió ante el Malmö tres días después.
La derrota en Villarreal (1-0) fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de la afición. El Bernabéu recibió de uñas a su equipo en la visita del Rayo Vallecano y Benítez una vez más fue quien más silbidos recibió durante las alineaciones, pero esta vez todos los jugadores, en mayor o menor medida, recibieron el descontento de su público. Y los primeros quince minutos del partido ante el Rayo Vallecano tampoco ayudaron a rebajar la tensión. El equipo de Jémez bailaba al Real Madrid al son de los pitos generalizados del Bernabéu, que se volvió a girar al palco una vez más: ¡Florentino, dimisión! Hasta Cristiano Ronaldo estalló y se revolvió contra la grada
Con este ambiente recibe el miércoles el Real Madrid a la Real Sociedad (16:00, siga el partido en directo en as.com): ha perdido tres de los últimos seis partidos de Liga, el caso de la alineación indebida de Cheryshev continúa dando reveses al Real Madrid tras el fallo del TAD y el presidente, el entrenador y la inmensa mayoría de los jugadores de la primera plantilla ya han recibido el enfado de sus socios hasta en cuatro ocasiones en un mes. Incluso los gritos en contra del presidente se han plasmado en una petición de dimisión a través de la plataforma change.org.
Tras el parón navideño y con el futuro de Rafa Benítez más cuestionado que nunca, el Real Madrid vuelve a su casa para recibir a la Real Sociedad. Pero no será un regreso plácido, ya que el Bernabéu está susceptible y vigilante. Ya mostró su disconformidad en partidos anteriores, con pitos al entrenador, presidente y jugadores.
El Clásico ante el Barcelona en el Bernabéu (0-4) destapó la inconformidad del público madridista: el equipo llegaba a la cita ante su histórico enemigo tras perder en el Pizjuán ante el Sevilla (3-2), y con 0-2 a favor de los culés y Marcelo sacando de la línea de gol un balón justo antes del descanso, el Bernabéu explotó con pitos y gritos de ¡Florentino, dimisión!
Tras el descalabro ante el Sevilla y el Barcelona, el Real Madrid encontró el confort lejos de su estadio con dos victorias consecutivas, una ante el Shakhtar en Champions y la otra en Ipurua en Liga. El Cádiz y la Copa se asomaban como una oportunidad única para seguir rebajando la tensión entre los incondicionales aficionados, pero surgió el asunto de Cheryshev y la posterior eliminación del Real Madrid por alineación indebida del ruso, que arrastraba una sanción de su etapa en el Villarreal.
Y con estos ingredientes volvió el Real Madrid a disputar un partido en su casa, catorce días después de la goleada ante el Barça y tres después de la eliminación copera. Benítez, junto a Cheryshev, fue el gran pitado en el momento que la megafonía anunciaba los onces iniciales para medirse al Getafe. El mismo guion se repitió ante el Malmö tres días después.
La derrota en Villarreal (1-0) fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de la afición. El Bernabéu recibió de uñas a su equipo en la visita del Rayo Vallecano y Benítez una vez más fue quien más silbidos recibió durante las alineaciones, pero esta vez todos los jugadores, en mayor o menor medida, recibieron el descontento de su público. Y los primeros quince minutos del partido ante el Rayo Vallecano tampoco ayudaron a rebajar la tensión. El equipo de Jémez bailaba al Real Madrid al son de los pitos generalizados del Bernabéu, que se volvió a girar al palco una vez más: ¡Florentino, dimisión! Hasta Cristiano Ronaldo estalló y se revolvió contra la grada
Con este ambiente recibe el miércoles el Real Madrid a la Real Sociedad (16:00, siga el partido en directo en as.com): ha perdido tres de los últimos seis partidos de Liga, el caso de la alineación indebida de Cheryshev continúa dando reveses al Real Madrid tras el fallo del TAD y el presidente, el entrenador y la inmensa mayoría de los jugadores de la primera plantilla ya han recibido el enfado de sus socios hasta en cuatro ocasiones en un mes. Incluso los gritos en contra del presidente se han plasmado en una petición de dimisión a través de la plataforma change.org.